Su venida y la apostasia

Post on 13-Aug-2015

80 views 0 download

Transcript of Su venida y la apostasia

2Th 2:1 que no abandonéis ligeramente

vuestros primeros sentimientos, ni os

alarméis con supuestas revelaciones, con ciertos

discursos, o con cartas que se supongan

enviadas por nosotros, como si el día del Señor

estuviera ya muy cercano.

2Th 2:1 Por lo que hace a la

venida de nuestro Señor Jesucristo y a

nuestra reunión con El, os rogarnos,

hermanos,

2Th 2:2 No os dejéis seducir de nadie en

ninguna manera; porque no vendrá este

día sin que primero haya acontecido la

apostasía, casi general de los fieles, y

aparecido el hombre del pecado, el hijo de

la perdición,

2Th 2:2 que no os turbéis de ligero,

perdiendo el buen sentido, y no os alarméis, ni por espíritu, ni por discurso, ni por

epístola atribuida a nosotros, como si el

día del Señor estuviese inminente.

H2611�ף ָח�ֵנ

kjanéfde H2610; sucio (i.e. con pecado),

impío:- falso, hipócrita, impío, lisonjero, pérfida, apostata de la

palabra.

A Timoteo, el mismo apóstol le escribió: “Pero el Espíritu dice

claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe escuchando a espíritus engañadores

y a doctrinas de demonios” (1 Timoteo 4:1), y ya antes le había

dicho: “También debes saber esto: que en los postreros días vendrán

tiempos peligrosos” (2 Timoteo 3:1).

El abandono de la fe, a fin de seguir lo que el mundo ofrece. El

apóstol Pablo dijo de Demas:

“Porque Demas me ha desamparado, amando este

mundo, y se ha ido…” (2 Timoteo 4:10).

Por lo tanto, la apostasía es un abandono intencional de la fe

cristiana, por considerar que el mundo con sus atractivos es

superior. El apóstata hace una comparación entre la Iglesia y el

mundo, Cristo y el diablo, el cielo y el infierno, la santidad y el placer, y se decide por el mundo, el diablo, el

infierno y el placer.

Por la revoltura que se hace de la fe cristiana con las costumbres,

creencias y estilos que predominan en el mundo: es

decir, es una mezcla de ambos para generar una religión híbrida. Este es el tipo de apostasía más

peligroso.

apostasía entre los antiguos griegos quería decir: “Salirse del camino, continuar

caminando paralelamente al camino real pensando que se transita por él, pero

arribando a un destino distinto.” “Apostasía” es un término alarmante que los eruditos y

hombres genuinos de Dios están sonando con sus trompetas para despertar a la Iglesia.

Pero, gracias a todas las drogas soporíferas que la Iglesia ha venido consumiendo con

extraordinario deleite, no se le puede despertar de su profundo letargo. Y si es que no lo

sabemos,

“letargo” (griego, λήθαργος) no es una siesta vespertina, sino “el síntoma de varias

enfermedades nerviosas, infecciosas o tóxicas, caracterizado por un estado de somnolencia

profunda y prolongada.”

La vida frívola de los cristianos.

- La insensibilidad hacia la santidad de Dios.

- La naturalidad con que se practica el pecado.

- La introducción en la iglesia de cuanto estilo de adoración extravagante y ridículo que va surgiendo.

- El desprecio declarado hacia la sana doctrina.

- Desprecio a la instrucción. De ahí, la eliminación de la Escuela Dominical.

- La marcada indiferencia hacia la Palabra de Dios.

- El materialismo de las iglesias, ministros y miembros.

- Las competencias para ver quién tiene la iglesia más grande.

- El número alarmante de ministros que caen en adulterio, que se divorcian, y que siguen inamovibles en sus púlpitos.

- El concepto tan bajo que el mundo secular tiene de las iglesias, de los ministros y de los cristianos.

- Los estilos de adoración sensuales de parte de músicos, vocalistas y cantantes nómadas.

- El protagonismo y señorío que muchos pastores tienen sobre las iglesias.

- El nepotismo que hace de las iglesias una empresa familiar.

- La facilidad con que las personas se hacen cristianas, se bautizan y se hacen miembros de las

iglesias.

- La sustitución de la Biblia por la psicología.

- La politiquería, el caciquismo pueblerino, el apadrinamiento, y la burocracia que distinguen a

tantas personas que ostentan cargos eclesiásticos.

2Th 2:3 el cual se opondrá a Dios, y se alzará contra todo lo que se dice Dios, o se adora, hasta llegar a poner su asiento en el templo de Dios, dando a entender

que es Dios.

• 2Th 2:3 Que nadie en modo alguno os engañe, porque antes ha de venir la apostasía y ha de manifestarse el hombre del pecado, el hijo de la perdición,

2Th 2:4 ¿No os acordáis que cuando estaba todavía entre

vosotros, os decía estas cosas? 2Th 2:5 Ya sabéis vosotros la causa que ahora le detiene,

hasta que sea manifestado o venga en su tiempo señalado.

2Th 2:6 El hecho es que ya va obrando o formándose el

misterio de iniquidad; entretanto el que está firme

ahora, manténgase, hasta que sea quitado el impedimento.

2Th 2:7 Porque el misterio de iniquidad está ya en acción; sólo

falta que el que le retiene sea apartado."

2Th 2:8 Entonces se manifestará el inicuo, a quien el Señor Jesús

matará con el aliento de su boca, destruyéndole con el esplendor de

su venida;"

Castillan 2Th 2:9 Aquél

tendrá también su parusia, por la

acción poderosa de Satanás, bajo la

forma de toda clase de poder, de signos y de prodigios falsos

2Th 2:9 aquel inicuo, cuya

venida, por acción de Satanás, irá

acompañada de todo género de

portentos, señales y prodigios engañosos,

2Th 2:10 y de seducciones de iniquidad para los

destinados a la perdición, por no haber recibido el

amor de la verdad que los salvaría.

Joh 6:36 Pero Yo os digo que vosotros me habéis visto, y no me creéis;"

Joh 6:60 Luego de haberle oído, muchos de sus discípulos dijeron: ¡Duras son estas palabras!

¿Quién puede oírlas?

Joh 6:26 Les contestó Jesús, y dijo: En verdad, en verdad os digo, vosotros me buscáis, no porque habéis visto los milagros, sino porque habéis comido los panes y os habéis saciado;"

Joh 6:66 Desde entonces muchos de sus discípulos se retiraron y ya no le

seguían.

2Th 2:11 Por eso Dios les envía un poder engañoso,

2Th 2:12 para que crean en la mentira y sean condenados cuantos, no creyendo en la

verdad, se complacieron en la iniquidad.

2Th 2:13 Pero nosotros debemos dar incesantes gracias a Dios por vosotros, hermanos amados del Señor, a quienes Dios ha elegido

como primicias para haceros salvos por la santificación del

Espíritu y la fe en la verdad