La República, sobre el gobierno perfecto y la virtud.

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LA REPÚBLICA Τελειαρχής Ἀρετής οὐ γαρ τι νυυν γε κἀχθες, ἀλλ' ἀε ποτε ζυ τουυτο Por Jaime Jasso Bacha Libro I Primeros interlocutores Quirión Hiperión Zenón Segundos interlocutores Crisés Diómedes Quirión.- ¿Pero qué cosa pasa en la casa de Andrómaco? Apenas tengo noticia de que acaban de llegar, mas ahora que vengo a visitarlos, me entero que parten de nuevo. Hiperión.- En buena hora vienes a visitarnos, querido amigo. Si llegas mañana no nos encuentras. Quirión. ¿Tan pronto salen de nuevo? Zenón.- Justamente, y si no hubiésemos tenido que atender asuntos urgentes no habríamos vuelto aún. Quirión. ¿Y qué asunto les lleva a alejarse de su casa y de la ciudad? Hiperión.- Seguramente conoces a nuestro compañero de la infancia, Crisés. Quirión. ¿Cómo no habría de conocerle? Si ha sido así mismo amigo y compañero mío. Hiperión.- No te serán desconocidas entonces las conversaciones y discusiones que con él, tanto mi hermano como yo hemos tenido. Quirión.- Sí, en más de una ocasión les he escuchado. Hiperión.- No resulta entonces necesario decirte qué tan afectos somos a tales discursos, especialmente a los que tratan sobre la filosofía. Quirión.- Por supuesto que no. Hiperión.- Tal es la razón que nos aleja de la ciudad y de nuestros amigos. Quirión. ¿Y ésa es la razón que les hace seguir a Crisés a todos los sitios donde la patria envía a su padre? Hiperión.- No a todos lados, pero bien dices, durante la misión comisionada a su padre fuimos invitados a pasar algunos días en casa de Crisés, junto con otros de sus amigos; y sabrás que a la mitad de nuestra estancia comenzamos una conversación que posteriormente hubo de trabarse en discusión. Quirión.- Eso no me resulta asombroso en lo absoluto. Hiperión.- Tampoco te resultará asombroso que fue de tal duración e intensidad que el resto de los convidados no pudieron o no quisieron seguirle el trote y pronto se

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Dialogo de análisis sobre los fundamentos de gobierno, las bases filosóficas y funcionales, y como la realización de este estudio y la instauración del gobierno justo, la Ciudad Justa, es un reflejo de la virtud y su operación en la realidad.

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LA REPBLICA , '

Por Jaime Jasso Bacha

Libro I Primeros interlocutores Quirin Hiperin Zenn Segundos interlocutores Criss Dimedes Quirin.- Pero qu cosa pasa en la casa de Andrmaco? Apenas tengo noticia de que acaban de llegar, mas ahora que vengo a visitarlos, me entero que parten de nuevo. Hiperin.- En buena hora vienes a visitarnos, querido amigo. Si llegas maana no nos encuentras. Quirin. Tan pronto salen de nuevo? Zenn.- Justamente, y si no hubisemos tenido que atender asuntos urgentes no habramos vuelto an. Quirin. Y qu asunto les lleva a alejarse de su casa y de la ciudad? Hiperin.- Seguramente conoces a nuestro compaero de la infancia, Criss. Quirin. Cmo no habra de conocerle? Si ha sido as mismo amigo y compaero mo. Hiperin.- No te sern desconocidas entonces las conversaciones y discusiones que con l, tanto mi hermano como yo hemos tenido. Quirin.- S, en ms de una ocasin les he escuchado. Hiperin.- No resulta entonces necesario decirte qu tan afectos somos a tales discursos, especialmente a los que tratan sobre la filosofa. Quirin.- Por supuesto que no. Hiperin.- Tal es la razn que nos aleja de la ciudad y de nuestros amigos. Quirin. Y sa es la razn que les hace seguir a Criss a todos los sitios donde la patria enva a su padre? Hiperin.- No a todos lados, pero bien dices, durante la misin comisionada a su padre fuimos invitados a pasar algunos das en casa de Criss, junto con otros de sus amigos; y sabrs que a la mitad de nuestra estancia comenzamos una conversacin que posteriormente hubo de trabarse en discusin. Quirin.- Eso no me resulta asombroso en lo absoluto. Hiperin.- Tampoco te resultar asombroso que fue de tal duracin e intensidad que el resto de los convidados no pudieron o no quisieron seguirle el trote y pronto se

dispusieron a tomar otras diversiones. Quedamos la mayor parte del tiempo discutiendo mi hermano Zenn, Criss y yo. Quirin.- Pero de qu conversaban con tanto fervor? Hiperin.- Te soy sincero, no puedo recordar cmo empezamos, pero el tema esencial de nuestra conversacin fue sobre cmo debe de gobernarse un Estado. Zenn.- Propiamente sobre cul es la forma perfecta de gobierno. Quirin.- Ah! Saben cuanto me hubiese gustado participar, o al menos escucharla. Pero! Es el caso de que deseen seguir discutiendo con Criss lo que ahora les hace partir? A caso no acabaron con la cuestin en tanto tiempo? Hiperin.- No, de hecho s acabamos con la discusin sobre el Estado perfecto. Quirin.- Y cul fue entonces la conclusin a la que llegaron? Hiperin.- Amigo mo, me resultara imposible referrtelo as sucintamente, mas si tienes tiempo te podra referir la discusin misma, y ms an, si Zenn nos acompaa bien podr completar cualquier parte que falte siendo importante. Quirin.- Justamente acabo de terminar los negocios y asuntos que tena pendientes que vine a saludaros, tengo ms que el tiempo necesario. Hiperin.- Pues me resultar sumamente placentero relatrtelo. Como te he dicho, no recuerdo como empezamos la discusin. Pero al pasar dos o tres das, en los que si acaso nos detenamos para comer y dormir, dejamos de comn acuerdo la discusin, despus de que nadie quera ni escucharnos ni mediar entre nosotros. Sin llegar por el momento a ninguna conclusin ni acuerdo. Seguimos as por tal vez da y medio con nuestra resolucin, pero bien pronto volvimos a enganchar en la discusin y la cosa pareca haber llegado a punto muerto, pues no era que alguno cediese de sus puntos de vista. Quirin.- Dime entonces qu era lo que argan cada uno. Hiperin.- Te burlars de nosotros si te digo que con dificultad veo que todo ese tiempo de discutir y rebatir hayamos dicho algo con sentido. Quirin.- Qu! Me dices que discutieron y por tanto tiempo en vano. Hiperin.- Hasta ese punto atinas. Pero a Criss se le ocurri que llevsemos el asunto con un amigo de su padre, Dimedes, quien recientemente le haba dado algunas lecciones de estrategia. Relatndonos el talante y habilidad de su amigo y maestro, que no slo haba servido en batalla sino tambin haba ocupado diversos cargos en su patria; nacin a la cul anteriormente Criss mismo nos haba referido para dar ejemplos de lo que l vea como buenos puntos de gobierno. Como todo eso nos pareci con bastante sentido, Criss mismo averigu si era posible que Dimedes nos pudiese recibir, lo que afortunadamente fue al da siguiente: C. Saludos Dimedes. D. Saludos a ti Criss, dime quines te acompaan? C. Son Zenn e Hiperin, hijos de Andrmaco. Y el asunto que nos trae es que a causa de una discusin que surgi entre nosotros sobre cul es la forma de gobierno perfecta, no hemos podido llegar a un acuerdo y pensamos que tal vez t puedas mediar entre nuestras posturas. D. Ah! Amigo mo, se es un tema sumamente interesante, pero dime crees t que sea posible que mediando entre las posturas que ustedes tienen puedan llegar a un acuerdo? C. Por qu no? D. Qu resultara si fuera yo del parecer de Hiperin?, no sera seguro que estaramos en oposicin a Zenn y a t? Lo mismo si tomara la postura de cualquiera de los tres, no se nos opondran los otros dos? C. Seguramente. D. Sin mencionar que no est del lado de ninguno de ustedes y no sean

tres sino cuatro los que estn en desacuerdo. C. Tambin sera posible. D. No as mismo si discutiramos y alguno de nosotros ganara sobre los dems significara esto forzosamente que est en lo correcto, o que ha sido ms hbil en la discusin? C. Slo significara que ha sido ms hbil en la discusin. D. Si insistiramos buscando a quin mediara entre nosotros tendramos como lmite el punto donde ya no pudiramos encontrar alguien ms dispuesto a mediar. C. Ciertamente. D. Y an entonces significara tener mayor nmero de personas que concordaran con tal o cual dictamen algo ms que tal postura es popular? C. No. D. Nos vemos entonces en un problema, si lo que buscamos es conocer la verdad y no slo derrotar a los que nos oponen. Z. Mismo que no hemos podido resolver. D.Qu podramos hacer para dar mayor solidez a nuestro dialogo que el que tienen los de los nios, que se figuran que quien pueda mantener ms enfticamente que s es cierto o que no es cierto encontrar algo de valor? H. Resumes con acierto toda nuestra discusin, y si Criss ha dicho verdad, ser posible que t hagas una exposicin del gobierno de tu patria, ya que lo conoces bien. D. Es muy halageo que alguien hable bien del pas de uno, y quin no sostendra que la nacin de la que uno es orgulloso ciudadano es la mejor? Pero, de qu servira eso si se encontrasen personas del mismo dictamen pero de distintas naciones? C. No de mucho. D. Mas si nosotros desesemos conocer de la correcta y sana constitucin del cuerpo no buscaramos a quin entre nosotros pudiera explicrnosla? H. Naturalmente, buscaramos a un mdico. D. Y si desesemos saber algo sobre la correcta constitucin de las casas y los edificios, con quin acudiramos? Z. Con algn arquitecto. D. Perfectamente, y si buscsemos cul es la forma perfecta para un Estado, en la que est debidamente constituido y bien gobernado, acudiramos con una persona distinta al estadista? Z. Justamente a se acudiramos. D. Bien, pues ya tenemos la mitad del camino recorrido para resolver nuestras incertidumbres, slo veo un inconveniente. H. Cul es? D. No resulta as como con el mdico y el arquitecto que bien pronto, si los solicitramos, tendramos una aglomeracin de ellos? C. Sobre todo si ofrecisemos una buena paga. D. Y de stos, y as tambin de todas la artes y ciencias, todos los que dicen profesarlas y ser expertos en ellas, todos los que se dicen mdicos o arquitectos, o cualquier otro oficio y arte lo son en realidad? Z. Ciertamente existen embusteros que se hacen pasar por mdicos y por arquitectos, que en realidad no lo son. H. Y no slo farsantes, sino tambin existen los que no tienen en realidad ms que un toque menos que mediocre de la ciencia de la que se dicen poseedores. D. Entonces nos ser de alguna utilidad el cuestionar a cualquiera de los que se hacen llamar estadistas sobre la forma correcta de Estado, o en esto es anloga la ciencia del Estado con las dems y existen quienes tramposamente pretenden ser estadistas o que no saben que se llaman ilusoriamente expertos o conocedores en esa ciencia y su arte? C. Ciertamente en esto tambin nos podra tocar un embaucador o un mediocre, y si cayramos en las manos de uno de stos ms daina nos podra resultar su exposicin por confusa y falsaria. D. Qu sucedera si en vez de interrogar a uno, tomsemos un gran nmero de los que se hacen llamar estadistas y los cuestionsemos? H. Tal vez tendramos una idea mejor de lo que es el estadismo. C. Pero en este caso an nos contaminaran las opiniones de los farsantes y de los mediocres, que diluiran tanto la aportacin que algn estadista verdadero, si es que encontrsemos uno, nos pudiera proporcionar. H. Eso bien nos podra resultar. Z. Parece entonces que tenemos que encontrar un medio o forma de discriminar entre los verdaderos estadistas y aquellos que slo pretenden serlo. D. No nos vemos en el mismo predicamento cada vez que nos encontramos en la necesidad de la labor de un

artista talentoso? C. Seguramente. H. Y as justamente como procedemos con las dems artes y ciencias, y evaluamos a los dems artistas o tcnicos examinaremos sus obras, para indagar si han sido bien hechas o mal hechas, y pediremos que nos refieran los maestros de los que han aprendido, a fin de que veamos si stos tambin han sido buenos maestros o no? D. Mas en esto hay tambin distintos gneros de artes y tcnicas, que producen distintos tipos de obras; algunas basta simplemente con observarlas para apreciarlas y si nos complacen diremos que estn bien hechas y si no, que estn mal hechas, puesto que el objeto de tales obras es el agradar. Pero no resulta necesario que si vamos a calificar las obras de otras artes de acuerdo si estn bien o mal hechas tendremos que saber de hecho si sus obras estn bien o mal hechas? Z. Seguramente. D. Y para saber si estn bien o mal hechas tendramos que saber cmo son las obras bien y mal hechas? Z. Necesariamente. D. El caso que nos ocupa no es precisamente averiguar qu formas de gobierno estn bien hechas? C. Eso mismo. D. Si nos falta el conocimiento que establecimos para evaluarlas podremos valorarlas? H. Es cierto, tendramos que saber de antemano lo que le intentamos preguntar. C. De que otra forma sabramos evaluar si han hecho gobiernos correctos y buenos si no sabemos o no estamos de acuerdo en lo que es un gobierno bueno. D. Difcil es la cuestin que tratamos, y se evidenciar an ms difcil si resaltamos que inclusive aquellos que, como artistas o tcnicos tienen fama de ser buenos en su labor, bien pueden seguir slo alguna receta o frmula sin tener ningn entendimiento de lo que hacen; igualmente puede ser que un instinto o una habilidad natural les lleven a realizar bien las labores, o inclusive puede ser que slo tengan buena suerte y que lo bien que han resultado sus obras haya sido por causa ajena a ellos, mas ninguno nos hayamos percatado. En todos estos casos an contando con muchas y buenas obras no nos podrn iluminar sobre ciencia o arte alguna. Z. No podran. D. Dganme de las artes y ciencias de las que hemos tratado las hay unas cuyo buen ejercicio es muy benfico, y su mal ejercicio es por mucho perjudicial y aquellas que al contrario son a lo ms ligeramente benficas o tiles por ms excelencia con la que se ejerzan, as como relativamente inocuas si se ejercen mal? H. Y aquellas en el medio. A las segundas, no les damos mayor importancia y dejamos que cualquiera las realice, mientras que las primeras son de nuestro mximo inters. C. As es. D. As tambin vara con la urgencia que tenemos de los servicios de un arte u otro? Z. A qu te refieres? D. Slo a que si necesitamos con urgencia no dudaremos en entregarnos al ms prximo, que hacer una profunda indagacin de cul es el mejor de los que pueden ejercerlo? C. Naturalmente. D. Si no tuvisemos urgencia, y el asunto fuese muy relevante para nosotros, como con la salud, realizaramos una muy minuciosa y profunda indagacin? C. Claro, pues acaso no es la salud un bien de la mayor importancia? D. Qu les parece es el estadismo un asunto de mayor o menor importancia? H. De la mayor. D. Pues as como hablamos de bien y dao, y encontramos que la salud y por lo tanto la medicina es de la mayor prioridad, es de suma importancia saber a quin le ha de recaer la responsabilidad de los asuntos pblicos, no nos suceda lo que al caballo en la fabula de Esopo y se monten en el poder quienes no deban de hacerlo de modo alguno. Z. Soy de tu dictamen. D. Tenemos entonces que es apreciable. Pero tenemos en este caso la premura que nos haga entregarnos al primero que diga que es hbil en tal ciencia, o es ms grande nuestro deseo de conocer a fondo tal problema y echar de ver la verdad sobre el mismo? H. Como tal urgencia, no tenemos. C. No, no parece ms notable la prontitud que la certeza. D. En tal caso dganme, si hemos hablado de aquellos que siguen una formula llana y simple, e inclusive de los que la suerte les precede y hemos quedado que stos no

pueden instruirnos e iluminarnos sobre la ciencia del Estado qu otro podra efectivamente hacerlo? H. Quin en realidad tuviera conocimiento sobre esa ciencia. D. Y ste podra por s mismo indagar si otro posee la comprensin de tal ciencia? C. S, y con ello averiguar si es o no estadista. D. Y ste sabra juzgar si un Estado est gobernado de buena o de mala forma, si est instituido de manera correcta? Z. Tambin. H. Con todo nos encontramos en la misma situacin pues no hemos dado cmo saber cul es el estadista en verdad. D. Mas si encontramos un estadista en verdad con esto mismo, encontraramos cmo es la forma ideal de Estado? C. S. Z. Pero an queda preguntarse cmo lo haremos. D. Cmo sabra el estadista que otro hombre tambin comprende la ciencia del Estado? Sera posible hacerlo sin la comprensin de la ciencia del Estado? H. Lo hara por va de la misma comprensin de la que hablamos. D. No es evidente que la comprensin de la ciencia es la comprensin del objeto o materia de la ciencia misma? C. Lo es. D. As si slo ganramos comprensin en esta ciencia suficiente para poder distinguir entre los farsantes y los autnticos hombres de Estado es posible que reconociramos cul es la forma ideal de gobierno y podremos distinguirle de las otras? C. Con toda seguridad. D. Saben, creo que hay un modo de que obtengamos ese conocimiento y podamos discernir a tal gobierno y a los verdaderos estadistas. H. Y cul es? D. Es un mtodo, que he aprendido de mis maestros, a base de preguntas y respuestas en dialogo, se va examinando el tema y la materia sobre la que se desea profundizar. Z. Pues mustranos cmo ha de servirnos. D. Esperen un momento, pues este mtodo precisa, para ser til, que se guarden ciertas reglas. La primera, que resulta indispensable, es la de tomar la resolucin cabal de la bsqueda de la verdad, tanto al preguntar como al responder, sin otra intencin que empae la verdad. Z. Bien me parece, pues buscamos la verdad y no engaar a nadie, mucho menos a nosotros mismos. D. La segunda sera el abstenerse de dar extensiones innecesarias, manteniendo puntuales y concisas tanto las cuestiones como las respuestas. Si acaso se requiere mayor extensin ser mejor el repreguntar. La siguiente sera el argumentar basado en la razn, an cuando se cite alguna frase 1. Z. Bien me parece hay algo ms? D. S, si se dice algo y cualquiera de los oyentes considera que lo expuesto no es verdadero, debe de objetar, planteando las razones que le hagan considerarlo as, de otro modo ha de aceptarse la razn en todo caso. Fuera de esto slo cabe agregar que se debe de dar la civilidad y el respeto que toda conversacin de hombres libres debe de guardar. H. Me parece ms que aceptable. D. Se comprometen a seguir estas lneas? Hiperin.- As dijo, a lo que todos aceptamos, y entonces Dimedes continu diciendo: D. Si les parece yo tomar el papel de preguntar y ustedes debern de responder. C. Adelante. D. Suponiendo que exista un lugar, donde haya o no gobierno establecido, los hombres que all viven pueden ser buenos o malos consigo mismos y entre s? C. S. D. Justos o injustos. C. S. D. Ahora suponiendo que deseen ser justos y buenos Qu les est permitido hacer? Todo lo que quieran y se les ocurra o slo lo que no cause dao a s y a otros? H. Lo que no cause dao. D. Y lo que causa dao en contra de algo, es que afecta su integridad? C. As es. D. Hablando de individuos diramos que su integridad se refiere a la parte fsica y la psquica? C. Justamente. D. Y sta es inherente a la persona o es un agregado externo? C. Es inherente. D. En tal caso todos los individuos tienen, en justicia, la libertad de actuar con respecto a todos los dems mientras que no afecten tal integridad. C. Lo concedemos. D. Este derecho se extiende a la capacidad que las1 No tomndose por valedera la autoridad del autor de la frase.

personas tienen de asociarse, sea esto trabar relaciones ms que temporales con sus semejantes? H. Se extiende a ello. D. A que veramos que estn limitadas tales asociaciones? Z. A lo mismo que estn limitados los hombres, a no hacer dao o afectar la integridad de los dems, y de s mismos. Por lo dems estn libres de hacer lo que quieran. D. Si un grupo de individuos se asociara con el fin de preservar la integridad inherente de los que en tal sitio habitasen diramos que tal actividad se salga de los justos lmites que les hemos impuesto? C. De ningn modo. D. Y si adems sumasen a tal propsito el de causar el mayor progreso que puedan a s mismos y a sus prximos, tendramos algo que objetarles en los trminos descritos? C. Tampoco. D. Mas si una organizacin se dispusiese en contra del bienestar y prosperidad de lo que ciframos en la dualidad de lo tangible y lo consciente los transgredira? H. Efectivamente los trasgredira. D. Lo mismo podemos decir de un individuo que tuviera tal propsito de bloqueo? Z. Lo mismo de un individuo, nada le quita que se asocie ni que acte solo, al respecto que formulas. D. No resultara qu tal situacin de impedimento al progreso y mejoramiento del conjunto de habitantes si las acciones que el malicioso sujeto o la maliciosa organizacin se dirigieran a frenar y actuar en contra de las acciones de la organizacin primera, de la que dijimos que su labor y propsito sera el de proteger la integridad inherente de todos los que habiten en tal lugar y gestionar su progreso? Z. Efectivamente tal accin en contra de la organizacin benvola sera, ciertamente, contraria a los lmites que le hemos encontrado a todo individuo o asociacin. D. Y en qu categora caeran tales acciones? C. Dentro de las acciones malas e injustas. H. De hecho slo le estara en justicia permitido serle neutral o favorable. D. Ahora si en vez de que se estableciese la asociacin justa que hemos dibujado primero, se estableciese como suprema, en el territorio del que hablamos, la contraria a esa, sera justo o injusto resistirse a sus acciones en cuanto tiendan a su indigno designio? C. Resistirse sera justo. D. Sera justo que se rebelasen, lo derrocaran y buscaran establecer uno justo? Z. Sera justo. D. Y sera justo an que lo eliminaran buscando establecer otro orden pero tambin as injusto? C. No, pues esto equivaldra a llevar actos tendientes al establecimiento de una formacin con fines injustos, lo que sera injusto igualmente al anterior. D. Qu diramos de los actos que tiendan a derrocarlo, mas no sean tendientes a establecer un orden justo? C. No te entiendo. D. Dime el destruir tal orden, o ms bien desorden, pero dejando a la deriva posteriormente lo que liber del sometimiento, dejara sin control una serie de circunstancias que podran resultar ms dainas que el orden maligno derrocado? C. Tal podra resultar. D. En tal caso slo podra ser justo cualquier cambio con propsito de repararle mas no perderle. C. Soy de tu dictamen. D. Ya hemos visto en esto sus relaciones, es decir las relaciones que existen entre organizaciones que claman la superioridad, sean por un lado las injustas y por el otro lado las justas. Ahora dganme Puede tal organizacin benfica estar subordinada a otra agrupacin? H. Es posible. Z. Analicmoslo. D. Veamos puede tal asociacin estar sujeta a otra voluntad o propsito? C. Cmo? D. Ya hemos sealado su causa y justificacin, es decir su motivo, que es el bien de los que la integran como de los que son sujetos a sus acciones, que en mayor detalle consiste en la proteccin a su integridad inherente y la gestin de su bienestar futuro. Z. S, y contraria a eso resultara injusta. D. Es este objetivo un medio para otro fin? C. Es un fin ltimo, no tiene utilidad ms que para s mismo. D. Pero qu papel juega en esto la asociacin misma de la que hablamos, de fin o de medio? C. De medio para el fin. D. Entonces la organizacin est

sujeta al propsito como medio al fin y no al revs Cierto? H. S. D. En todo o en parte? H. En todo y cada una de sus partes. D. En este aspecto no puede entonces subordinarse a otra agenda. Pero continuemos. Z. Adelante. D. Veamos si puede estar subordinada a otra asociacin. C. No lo s, pudiera ser. D. Tenemos entonces que tomar todas las posibilidades, primero, que ambas asociaciones no compartan el mismo objetivo. Segundo que sean neutras en relacin a los objetivos de ambas. Tercero que compartan el mismo objetivo. Hay otra? Z. S, que coincidan en partes del mismo objetivo y en otros no. D. Bien, en el primer caso podran subordinarse? H. No, pues como ya dijimos no comparten el mismo objetivo. D. En el segundo, caso en cuanto son neutrales? C. En tanto son neutrales, no se estorban una a la otra pero no pueden compartir rumbo al no compartir destino. D. En el tercer caso, cuando de hecho s comparten objetivo qu vemos? C. En ese caso s es posible que se subordinen. D. Bien, pero an en ese caso es expedito que dupliquen sus labores? C. No te entiendo. D. Me refiero a que es correcto que realice la segunda el mismo trabajo que acaba de hacer la primera, en tanto como una lavandera lave la ropa que ha lavado otra sin poder agregar nada a la limpieza de sta? H. No, sera un desperdicio de esfuerzo. D. Ser entonces expedito que estorben la una a la otra o que coordinasen sus esfuerzos dividiendo la labores en etapas sean de remojado, estrujado, enjuagado y dems que convienen a tal oficio, o que dividiendo la ropa hagan una parte una y la otra el resto? C. En ningn caso sera expedito que se estorbaran, bien pueden hacer la distribucin coordinada de la que dices o la divisin plana y simple de su labor. D. Entonces cuando hacen la divisin simple y llana de la labor podemos decir que estn subordinadas? C. No simplemente que estn coordinadas. D. Y en cuanto organicen por etapas la labor de entre ellas? C. En ese caso s estaran subordinadas. D. Para toda subordinacin existe supraordinacin? H. Necesariamente, una manda y la otra obedece. D. Y en ese caso quin manda, es acaso quien remoja, o quien enjabona? Z. Por ese aspecto ninguna. D. Entonces en cuanto al lavado de la ropa no estn supraordinadas ni subordinadas? C. No. D. Mas en cuanto a la organizacin y designacin puede mandar una u otra, o talvez otra distinta de ellas decida? C. Cierto. D. Y en tanto exista una unidad de organizacin, podemos decir que son dos organizaciones independientes o de una unidad de organizacin? C. De una sola organizacin en todo caso. D. Parece que hemos visto que tal asociacin no puede estar subordinada a otra contraria en objetivos, ni a otra neutral en los mismos trminos, tampoco puede estar subordinada a otra con la que compartiendo objetivos no comparta mtodos pues es el caso que se estorbaran, y finalmente si una se rene y coordina con otra de su misma naturaleza se convierten en el acto de unir su organizacin en una sola. Vemos que pueda subordinarse a otra? C. No le resulta posible hacerlo. H. Soy del mismo dictamen. D. En todo caso podra apoyarse con organizaciones del fin contrario? C. No, slo con las que compartan propsito. D. Es posible que otros individuos y organizaciones se subordinen a sta? C. En cuanto obedezcan los mandatos de sta, s. D. Y esta asociacin de la que hablamos puede dar cualquier mandato? Z. No, slo puede emitir aquellos que su razn de ser le permita, los necesarios para el logro de su objetivo. D. Y en este aspecto todas las actividades, dentro de la esfera de accin de la asociacin, estarn subordinadas. C. Cmo? D. Ya dijimos que los que formen parte de la asociacin como las acciones que stos tomen estarn subordinadas a la finalidad de la asociacin, que es el bien, sea la proteccin de la integridad y la gestacin de bonanza. C. S, as dijimos. D. Y de los dems individuos y asociaciones hemos sostenido que no pueden actuar contrariamente a las disposiciones de tal organizacin, pues con ello dejara de ser justas. C. Tambin eso dijimos. D. Queda entonces que la asociacin de la

que hablamos se encuentra supraordinada a todos los individuos y asociaciones ejerciendo la direccin del conjunto completo, justamente como el piloto 2 lleva el mando del navo. C. Precisamente. D. Queda darle a esta asociacin otro nombre diverso de gobierno3. Z. No, ese nombre le viene por naturaleza. D. Mas dganme en el oficio de piloto es requisito el conocer el manejo de la nave? C. S. D. El manejo de la tripulacin? C. Tambin. D. Debe de tener el conocimiento de cmo conducirle en tiempos despejados, y en tempestad? El de mantener el orden entre la tripulacin y los pasajeros, o de disponer quien lo haga? H. Evidentemente. D. Y la de navegar es ciencia que deba abarcar su pericia en tanto conozca los mtodos y tenga las habilidades de llevar la nave de su origen a su destino de la manera ms expedita y menos riesgosa? H. Absolutamente. D. Y no consiste precisamente en todo lo anterior la excelencia de la navegacin y del pilotaje? C. Con toda razn. D. Puede llamarse piloto al que carente de esta ciencia y arte pretendiera o tomara el puesto de mando? C. No ciertamente. D. Causara con esto un bien o un mal? H. Naturalmente un mal. D. De igual forma en la nave del Estado hay tripulantes, parejeros y piloto, as tambin existe la ciencia y arte del estadismo, hay un punto de origen y uno de destino, una ruta expedita, tiempos de calma y tempestades. Y al que conoce la ciencia del gobierno del Estado se le puede llamar estadista o gobernante. Z. Y con justicia. D. Y a quin desconozca esta ciencia? C. Ni uno ni otro ttulo se le pueden dar. D. No procederemos de la misma manera con el que injustamente se apodera del puesto del piloto como con el que se apodera del puesto del gobernante? C. Y con la misma justicia los consideraremos como usurpadores e injustos causantes de muchos males. D. Cmo cules? C. Toda su labor ser intil si es incapaz de conocer el fin y objetivo de la labor del piloto, as tambin ser incapaz de localizar el origen y estado actual de las cosas, le ser imposible encontrar el destino y con deficiencia de ambos cmo podra encontrar una ruta? Mucho menos la ruta propicia, y de esto cuntos males ms se vendrn. D. Y de que medios cuenta el piloto experto para evitar estos males? C. Son varios los instrumentos de los que se sirve y varios los mtodos que realiza para evitar estos males, y lograr su labor. H. Pero todos stos estarn dirigidos a encontrar el destino con la mayor salvedad posible. D. As mientras unos sirven para trazar la ruta otras para mantenerla, otros para mantener el buen estado de la nave, otros para reconocer los alrededores, otros para mantener el orden y la disciplina entre los tripulantes; unas sern ciencias como las matemticas y la astronoma, o menos precisas como la cartografa y la meteorologa; otros sern instrumentos humanos que desempeen las funciones que el piloto les encargue, otros sern instrumentos materiales como el astrolabio, la brjula, el mapa y el comps; otros como los remos y las velas. C. Ciertamente esos son los instrumentos de los que se sirve el piloto entre otros. D. Ahora Podemos hacer una distincin de estos instrumentos entre punteros y propulsores? H. No comprendo lo que quieres decir. D. De entre los instrumentos que le son tiles al piloto, existen algunos que sirven para trazar la ruta y otros que le sirven para impulsarle a tal destino o no? H. As es, aunque algunos pueden compartir funciones. D. Si las comparten, consideraremos que tienen el uso que en ese momento se les d. H. Me parece muy adecuado. D. En tanto los instrumentos que permiten el llegar a uno y a otro lado, de acuerdo como se apliquen, tendrn utilidad si se carece de los que marcan ruta? Z. No, pues podran llevar indistintamente a cualquier parte sin direccin si no conocemos la trayecto. D. En tanto a los que permiten encontrar el destino y la ruta, nos resultarn tiles por s solos? C. No si an conociendo con claridad la ruta y el destino somos incapaces de alcanzarles por carecer de los medios2 Gr. . 3 La palabra gobierno deriva de la misma palabra que piloto en griego, ver nota anterior.

para hacerlo. D. Queda entonces que la utilidad de ambos tipos de medios se encuentra en la aplicacin de ambos, pero dganme qu determinaremos primero, los medios de propulsin o los medios de direccin? C. Es evidente que necesitamos conocer primero el destino y ruta para con ello determinar que medios de propulsin nos sern requeridos. D. Ya dijimos que el piloto encontrar el destino para la nave, mas puede fijar en justicia un destino daino para s o para los tripulantes o para los pasajeros? C. En ningn caso. D. Entonces slo le est permitido marcar destinos bien aventurados? C. Le est obligado el as hacerlo. D. Asistindose de qu arte y ciencia puede determinarse un rumbo bien aventurado y distinguir uno desventurado, ser de aquella que distingue entre el bien y el mal? H. Seguramente. D. Y es sta la tica o es otra? H. Es sa misma. D. Y cmo genera sus conclusiones? C. Por medio de juicios de valor. D. Y qu nombre le damos a la persona que en situaciones de la mayor dificultad sabe resolver estos juicios de valor? C. La de sabio. D. Qu cualidad le provee tal capacidad? C. La sabidura. D. Esta cualidad que le permite discernir el bien y el mal en un slo caso o en todos? C. En todos hasta donde su sabidura alcance. D. Es sta una cualidad de virtud o de vicio? H. Definitivamente es de virtud. D. Qu te parecera si a nuestro piloto le permitimos marcar nicamente destinos bienaventurados, podr marcarlos sin la sabidura? C. Me parece muy improbable. D. En tal caso admitiremos piloto sin sabidura? Z. Cmo habramos de hacerlo? D. Les parece que verifiquemos el orden en importancia de los elementos de los que hemos hablado? C. Bien. D. Se subordina la idea de bien a la sabidura o al revs? C. No lo s. El bien tiene por objeto la sabidura o la sabidura tiene como objeto el bien? H. La sabidura tiene por objeto el bien. D. Entonces consideraremos sabia tal cosa en tanto esta produzca un bien en ltimo sentido? C. Ciertamente. D. Luego consideraremos gobernante al que carezca de sabidura, an as tenga todo el poder? Z. Ya hemos dicho que no. D. En tal caso la categora de gobernante depende de la sabidura y no la sabidura de la categora de gobernante. C. Cierto. D. No habamos dicho que para la navegacin era importante y necesario que se definiera el destino y ruta y que esto era labor del piloto o gobernante? C. As dijimos. H. Pero ese destino y ruta lo podran definir los tripulantes. D. Mas esto no significara que no hubiera un piloto, slo que ste estara conformado por un cuerpo de colegas formado por los tripulantes, que en todo caso consideraramos como piloto. H. Cierto. D. Pero cuando carezca de piloto o de cuerpo que cumpla con las funciones de piloto, la llamaremos tripulacin? C. En ningn caso. D. Depende la existencia de la tripulacin como tal, y no como una simple suma de marinos, del piloto? C. Definitivamente D. Por ello en jerarqua la tripulacin atender al piloto, el piloto atender a la sabidura y la sabidura atender al bien? H. Por ello mismo as ser. Z. No podra ser de otra forma.

D. Pero creo que en algo nos estamos engaando, o al menos nuestro estudio no ha sido completo. C. Cmo! D. Les parece que sea suficiente saber que es lo correcto en tal o cual situacin, por decirlo, en el caso de un soldado que sabe como su obligacin el guardar tal puesto, o el hacer carga, o cualquier otra tarea de guerra mas no la realice? C. Tal cosa es posible. D. S, y an que poseyendo los mtodos y la condicin fsica adecuados para la realizacin de la labor que le toca. C. S, esto es visto con cierta frecuencia en el caso que indicas y en otros. D. Cul podra ser la causa de esto? H. Esto puede ser por falta de valor. D. En muy buen sentido y ste es un bien material o una cualidad? H. Es una cualidad. D. Y como tal la tendremos entre los vicios o entre las

virtudes? Z. Solamente entre las virtudes. D. En tal caso cuando un peligro se asoma, ya vimos que el saber slo no resultaba suficiente y que para expresarse como virtud requiere del valor. Z. Y en todos los casos de digna mencin. D. Las acciones que comnmente son reconocidas como valerosas se encuentran aquellas en las que intilmente se arriesga frente a un peligro? C. No, a sas se les llama arriesgadas, intrpidas, necias. D. Y qu es lo que diferencia a las arriesgadas de las valerosas? C. La utilidad. D. Pero si un hombre se arriesga a tomar lo que a otro le pertenece, en contra de lo justo, lo llamaremos valeroso? C. No, pues su accin no es justa, no est encaminada al bien. D. Y cmo diferenciamos el bien del mal? C. Con la sabidura, ya lo hemos dicho. D. As que una accin intrpida o arriesgada cuando es acompaada de la sabidura es valerosa. C. Naturalmente. D. Entonces no slo la sabidura depende del valor, sino tambin el valor depende de la sabidura. H. Parece correcto. D. Pero si vemos con cuidado puede una accin ser sabia sin ser justa? C. No veo como. D. Valerosa sin ser justa? C. Menos an. D. Deber ir acompaada de la constancia? C. Cmo habra de ser sabia en la inconstancia? D. Ya dijimos que lo sabio debe tender nicamente al bien, qu voluntad debe acompaar siempre a la accin sabia entonces? C. La voluntad de bien, es decir la benevolencia. D. Hacia s mismo? C. Seguramente s. D. Y solamente? C. Tal vez. D. Analicmoslo con cuidado. Es posible desear para s un bien a travs de desear un mal para alguien ms? H. Es posible. D. Mas es congruente? C. No te entiendo? D. Veamos, al desear mal para alguien ms, el deseo surge en tal cuerpo o en el espritu? C. En el espritu. D. Y aquello que inclina al mal es bueno o es malo? C. Necesariamente malo. D. Entonces el desear mal para cualquiera es hacer bien? C. No, seguramente. D. Si inclinamos nuestro espritu al mal nos hacemos un bien? C. Cmo podra ser? D. Ser en tal caso desearnos un bien causndonos un mal? C. Nunca. D. Cundo buscaremos entonces granjearnos un bien deseando a otros un mal? C. En ningn caso. D. Dime qu bien es ms grande o estimable, las posesiones o la salud? C. La salud, sin ella las posesiones no dan ningn disfrute. D. Pensando cabalmente habr quien cambie la salud por bienes que no podra disfrutar sin ella? C. No lo creo. D. Qu salud es ms preciosa, la del cuerpo o la de la psique? C. La de la psique. D. Por qu? C. Porque sin la salud del espritu es imposible disfrutar de la del cuerpo. D. Tenemos por buen negociante al que vendiendo sus mercancas recupera el costo y obtiene una ganancia o lo contrario? C. Al que logra la ganancia. D.En analoga habr hecho buen negocio quien pierde un bien mayor por lograr uno menor? C. No. D. Entonces diremos que es posible lograr un bien deseando un mal para otro? H. No. D. Queda entonces que la benevolencia es un requisito para la obtencin del bien? C. S. D. Por otro lado, podr ser justa su accin si es afectado por las apariencias externas ya sean atrayentes o repulsivas, placenteras o dolorosas? Z. No, si lo desvan de su justo curso. D. Deber pues de mantener su ecuanimidad y templanza. Y con respecto a las inclinaciones internas, deber controlarlas o dejarlas descontroladas? C. De igual forma deber mantenerlas controladas. D. Es negable que requiera para esto el autocontrol? Z. No, sin duda. D. Si supusisemos que un actor tomara el papel de una persona justa, podramos decir que es una persona justa en realidad? C. No, mas que simplemente est actuando el papel de una persona justa. D. De la misma forma que el actor finge ser el personaje de su papel, un individuo que realiza actos que en apariencia son virtuosos, mas lo hace insinceramente, le tendramos como persona justa y virtuosa? C. No, pues le hace falta en verdad, sinceramente, llevar la virtud. D. Cmo se les llama a las personas que pretenden precisamente ser lo que no son? C. Hipcritas. D. Y el hombre

virtuoso en sus acciones est acompaado por la sinceridad y la pureza o por la hipocresa y la corrupcin? C. Por la sinceridad y la pureza. D. En alguno de los casos en los que en realidad evidenciamos la virtud tal como el valor, vemos que est desprovista de lo que es sabidura o justicia? Z. No. D. O hemos visto que pueda haber accin justa que no sea benevolente, o que no sea pura? C. Tampoco. D. Parece que todas estas cualidades se acompaan las unas a las otras y que no se encuentran disociadas? H. S, pero se da el caso que encontramos acciones que sera ms propio el nombrarlas como valerosas, sabias, o justas aunque no estn desprovistas de las otras virtudes. D. Dime lo que opinas si se le presentara un tetraedro a una persona, no dependera de cmo lo viera, es decir de que parte lo sostuviera para mirarlo que le pareceran distintas las superficies? H. S. D. Mas el tetraedro por s mismo vara? H. No. D. De igual forma hay acciones que desde el punto que les apreciamos parecen ms sabias que valerosas, ms templadas que benevolentes. C. Como distintos aspectos de una misma cosa. D. Sin embargo cualquiera de sus facetas o combinaciones, el resultado de la virtud es el bien, sea por s sola o en la medida que faculta a las dems artes y ciencias la produccin del bien y la elusin del mal. Z. Cmo es que faculta a las dems artes y ciencias el generar el bien? No son estas mismas ciencias y artes, o algunas de ellas capaces de generar el bien o un bien por s mismas? D. Qu quiere decir con bien? Z. No es capaz la arquitectura de producir construcciones. D. Ciertamente. Z. No es til la metalurgia para hacer herramientas y bienes de uso? La cocina y la agricultura no son capaces de producir alimentos? La industria de producir todo tipo de ingenios y sustancias que facilitan la vida? Y Las ciencias de generar los ms asombrosos y tiles descubrimientos? D. Efectivamente. Z. No es capaz el artista de hacer cuadros, esculturas y dems obras de arte que deleitan el espritu de los hombres? D. Es cierto y muchas ms obras pueden ser fabricadas por las artes y ciencias. Z. Entonces estars de acuerdo con migo en tanto otras artes y ciencias pueden crear independientemente el bien. D. Estoy de acuerdo que pueden independientemente de la virtud crear bienes, mas nunca ajenas de la virtud generarn un bien. Z. Cmo insistes en ello? D. Con respecto a los productos de los que hablamos, sean platillos, obras de arte, posesiones y los dems es posible ser moderado, actuar de forma moderada en su uso? Z. Ciertamente. D. Y ser inmoderado? Z. Tambin. D. Siendo inmoderado en el uso de la comida, no obstante delicias en la excelencia del arte que las produce, haremos con ello un bien a nuestro cuerpo o a nuestra psique? Z. No, de ningn modo. D. Y cmo evitaremos tal dao, con el autocontrol y la templancia o ajenos de ellos? Z. Con ellos. D. Y en el uso de todos los ingenios y maravillas podremos usarlos beneficiosamente? Z. Con toda razn. D. Ser posible as mismo hacer dao a nosotros mismos y a los dems con estos mismos objetos? Z. No entiendo a qu te refieres? D. Todos estos ingenios no nos proveen de facultades diversas? Z. Ciertamente. D. Son estas facultades en s mismas un poder? Z. Lo son. D. En la manera que facultad es un poder, lo es para llevar a cabo una determinacin. Z. S. D. As nuestras determinaciones pueden ser malas o buenas, por lo que si son malas resultar el poder de llevarlas a cabo en algo bueno o malo? Z. Malo, el llevar las malas determinaciones a cabo. Bueno, el llevar las buenas a cabo. D. Hemos dicho ya cul es la cualidad que nos hace distinguir la una de la otra? Z. Efectivamente, la sabidura. D. No sobresale de entre todos los objetos variados de los que hemos hablado aqul que da el poder de adquirir? Z. Ciertamente, si es que hablas

del dinero. D. Pero as como result con los dems objetos, es forzosamente malo el poder de adquirir que da el dinero? Z. No. D. Es forzosamente bueno? Z. Tampoco. D. Mas es posible que alguien desarrolle tal deseo por ste que realice una injusticia para obtenerle? Z. Eso sucede con mucha frecuencia. D. Si buscramos una gua para hacer uso benfico del dinero no sera sta la justicia? Z. S. D. La benevolencia, la templancia, el auto control? Z. Naturalmente D. Y siguiendo a stas tendremos a la economa, o la economa las preceder? Z. stas regirn a la economa. D. Ahora de los bienes que nos proporcionan las artes como la msica, la poesa la danza, la escultura y todas las que de este tipo se nos puedan ocurrir ser correcto que cometamos injusticias para adquirirlas? C. De ningn modo. D. Ser correcto acaso que dejemos que nuestro espritu se afecte y aferre tanto al deleite que no tolere separarse de su belleza? C. No sera eso un bien. D. Ser correcto entonces que los usemos y nos deleitemos en ellos de forma que no dae nuestro bienestar, tanto mental como fsico? H. Perfectamente. D. Dime entonces Zenn, no debemos buscar en la virtud el bien? Z. Ciertamente. D. Deber hacer esto mismo nuestro estadista? C. Sin duda, pues su objeto es el bien del Estado y ningn bien se logra ajeno a la virtud. D. Y entre dos opciones sea la primera lo til y la segunda lo intil, sea si quieren la seleccin entre lo expedito y no expedito? C. Seguramente lo til y expedito sobre lo intil. D. Cundo resultara til? C. Cuando produzca un bien en el sentido ltimo o coadyuve a eso mismo. D. Podr nuestro estadista dedicarse nicamente al estudio de la virtud? C. De lo que hemos dicho se deduce que no. Z. Pero cmo lo deduces? C. Hemos planteado que la virtud ser la que le asista al piloto a encontrar destino y marcar rumbo o no? Z. As lo hemos hecho. C. Esto ha sido con el fin de llegar a ese destino o no? Z. Para llegar a ese destino. C. En tal caso requerir el conocimiento de los medios efectivos para lograr eso? Z. S. C. Y son sos distintos de las ciencias y artes de las que hemos hablado? Z. No. C. Si se ha de servir de ellas es expedito que tenga de ellas el conocimiento necesario de cmo servirse? Z. Lo ser, sin duda. C. De eso podemos negar que requiera tener conocimiento de ellas? Z. Es cierto necesitar saber al menos suficiente para poder servirse de ellas.

D. Si ha de servirse de las ciencias de cules es evidente que ha de conocer? C. Primeramente de la ciencia del Bien, y en general de las ciencias tericas y prcticas. D. Bien, es un poco general tu respuesta, pero si les parece iremos viendo por partes y deduciendo las ciencias de las que tenga que servirse y por lo tanto deba tener conocimiento. Z. Muy bien. D. Pero primero dime de estas ciencias que mencionas habr aquellas que rijan y aquellas que sirvan? H. Naturalmente, regir la ciencia del Bien y las dems servirn para los fines que aquella nos indique. D. Incluyes en esto la ciencia de la necesidad? H. A qu te refieres con la ciencia de la necesidad? Nunca haba odo hablar de ella. D. Te parece que si yo te diera un ejemplo de lo que es materia de una ciencia, t pudieras decirme cmo la conoces? Por ejemplo si hablo de la ciencia y el arte de los metales. H. En ese caso hablaramos como ciencia de la metalurgia, y como arte la herrera. D. Bien, ahora esta ciencia de la necesidad es la que nos permite conocer que por ejemplo todas las casas azules son casas. H. Me parece que hablaras entonces de la lgica. D. Dime entonces le toca a esta ciencia mandar o ser mandada por las dems? Se encuentra subordinada a la ciencia del Bien o es acaso

al revs? H. No me parece que mande sta a aqulla, pues nuestro objetivo central es el bien y no lo necesario. D. Mas esta ciencia de la necesidad aplica al campo de lo bueno y de lo malo? H. Cmo sera? D. Es necesario que lo bueno no sea malo? H. Necesario es. D. Y no aplica tambin la necesidad a las ciencias del segundo grupo, aquellas que dijimos que seguiran a la tica? C. Ciertamente. D. Sin esta ciencia de la necesidad, ya vimos sera imposible distinguir entre opuestos, sera en tal caso posible tener algn conocimiento en su total ausencia? C. No, sin duda. D. En tal caso ser parte de las ciencias en las que deber estar profundamente versado el estadista? C. Efectivamente, y en la ausencia de sta sabremos que no es un estadista, pues sin ella no les es posible llevar las funciones ms esenciales del piloto del Estado. D. Hemos dicho que se ha de servir de las ciencias y artes comunes, mas ha de servirse de ellas por s mismo o se servir de otras personas para que las apliquen? Z. Puede que haga uso de ambas vas, de hecho hemos dicho que se servir de herramientas psquicas, humanas, tericas, y materiales, y me parece que en esos trminos se podra valer directamente como indirectamente de las ciencias y artes. D. Y en qu casos no podr servirse de otras personas? C. En aquellas obligaciones que lo determinan como piloto por definicin, pues sin ellas no sera piloto ni de la nave ni del Estado, sino que esas otras personas lo seran. D. Hablamos ya de la primera a cierto detalle: la fijacin de destino y ruta. Mas pensando que delegara el resto de actividades necesarias para su empresa a la tripulacin, que le quedara como obligacin? C. Fijar el destino y rumbo sin ms. D. Pero Qu? La tripulacin sola distribuir el resto de las labores entre s? Z. Por qu no? D. No dijimos que no podra servirse directamente de asistentes humanos en las funciones que slo le competan al piloto, pues si no las realizase no sera el piloto? C. Ciertamente, lo seran stos a los que les compete realizarlas. D. Y no sera ste nuestro piloto colectivo del que hablbamos antes? H. S. D. Pero entonces no hemos pasado ninguna labor del piloto a la tripulacin, mas hemos cortado al pobre hombre en un nmero de pilotillos, pues estos son los que se estn sirviendo de asistentes humanos para realizar las labores que lleven a rumbo a la nave. H. Sin duda. D. Entonces si reconstruimos a nuestro piloto unitario del colegiado habremos sealado una obligacin? C. Seguramente, la de servirse de asistentes humanos para realizar las labores necesarias para el Estado. D. Podramos llamar piloto a quien no realizara esta funcin? C. No, ciertamente. D. As an que no exista tripulacin? H. Cmo? Qu delegacin habra entonces? D. Puede determinar la necesidad de hacer algo un hombre solo por s slo? C. Puede. D. Y encomendrsela a s mismo? C. S. D. Y realizarla? C. Tambin. D. Mas puede realizarse voluntariamente aquello que no se ha determinado hacerse? H. De ningn modo, aunque se hiciese algo casualmente, esto no hubiese sido volicionado. D. De esta forma puede un hombre slo ser piloto y tripulacin, mas no un hombre slo ser tripulacin, pues sta depende del piloto. C. Tal parece. D. Mas en todos los casos el piloto designar quin ha de realizar qu funcin, an la delegacin de los actos de delegacin subsecuentes? C. As es. D. Tendremos claramente a la delegacin como una de las funciones necesarias para el pilotaje? Z. Con toda razn. D. Y la ciencia de la delegacin puede serle desconocida al piloto? C. Claramente no. D. Y el piloto o gobernante del Estado puede desconocerla? Z. Menos an. D. Y en que consiste esta ciencia? Z. En encomendar u ordenar una labor determinada a determinado sujeto. D. Entonces ese sujeto no puede ser cualquiera, debe de tener al menos una cualidad especial. C. Por supuesto, debe de ser capaz de elaborar o realizar lo que se le ha encomendado. D. En tal caso si nuestro piloto encarga la realizacin de tal accin a cierto sujeto, este alguien deber conocer la ciencia o arte rectora de la labor, mas si no la sabe

o es incapaz de llevarla a efecto se habr hecho correctamente la delegacin? C. Claro que no. D. Si le encarga algo que est fuera del alcance del encargado? C. Tampoco ser correcta la delegacin. D. Entonces ser posible dar un encargo a alguien si se desconoce si es capaz, en los trminos que hemos puesto? Z. Posible s es. D. Mas diramos que as lo hara un hombre sabio? Z. Para nada. D. Queda entonces que ha de conocer la naturaleza, disposicin y cualidades del encomendado. Adentrando un poco es posible ordenar la aplicacin de una ciencia, sin conocer en lo absoluto la ciencia que se le pide? C. Qu quieres decir? D. Que si al surgir una necesidad es a la vez forzoso que sepamos como satisfacerla? C. No, hasta es posible que no podamos satisfacerla. D. Mas en cuanto requerimos de alimento recurrimos a las artes que pueden provernoslo, sea a la agricultura, a la pesca y dems. C. Es cierto. D. Y por qu? C. Porque sabemos que son las que nos pueden proporcionar tales alimentos. D. Ser necesario que conozcamos lo que pueden hacer? Z. Efectivamente. D. Sera esto un requisito para el arte y la ciencia de delegar, el conocer las utilidades de las ciencias y artes todas? H. Pero cmo? Habra de conocer los objetos de las ciencias todas abarcndolas con ello? D. No se puede esperar simplemente la utilidad que de cada una puede ser conocida sin conocer cada detalle de la ciencia o arte mismo? H. No lo s. D. Dime es necesario que para conocer la utilidad del arte de la pesca sepamos pescar nosotros mismos? H. No necesariamente. D. Para que nos sirvamos de los bienes que produce el herrero, el zapatero, el lechero, el leador es necesario que abarquemos toda la esfera de conocimiento que es necesaria para tales actividades? H. Ciertamente no. D. Mas an es posible que juzguemos sus obras, encontrando cules son buenos o malos trabajos por su uso? H. Efectivamente. D. Habr cosas as que con prctica podamos valorar con echarle un vistazo y otras que requerirn de hecho el poseer el conocimiento de las operaciones propias del arte que las realiza? H. Tal resultara. D. En tal caso para delegar las primeras nos faltara conocer a fondo las ciencias o artes o slo de las segundas para poder delegar efectivamente? H. Slo de las segundas. D. Y hasta ahora hemos encontrado algunas de las que ser requisito dominar para el estadista cierto? C. Efectivamente, la ciencia del Bien, la de la necesidad y ahora hemos visto que la de la delegacin. D. Perfectamente. Si bien hemos dicho que el estadista ha de preferir lo til a lo intil, por cul se decidir entre lo til someramente y lo ptimo? C. Naturalmente que ha de preferir lo ptimo a lo til, con relacin que lo ptimo en realidad participa ms de la utilidad. D. Y en ese sentido dijimos que ha de conocer la ciencia y arte de delegar a fin de producir lo til o no? Z. Tal fue. D. Hemos dicho cmo ha de determinar lo til? C. Si ha de juzgar por medio de la virtud la bondad o la maldad de las cosas que pueden lograr las ciencias y artes comunes. D. Eso es en relacin a lo bueno y lo malo en ltimo sentido, pero no es cierto que existe una nocin general de lo til, ajena al concepto de bien, o ms bien ignorante del mismo, y sera la que la gente comn de ella guarda? C. Tal parece que as sucede. D. Y en qu sentido es sostenido que algo es til en estos trminos? C. En el sentido de que sirve para algn fin. D. Cierto, y hemos hablado que las personas pueden tener fines, al menos por ignorancia, separados del bien? C. Efectivamente es cierto que las personas pueden tener todo gnero de voliciones, aunque en ltima instancia estn en contra de lo que en realidad desean. D. En ese sentido hablamos de la utilidad de forma ms general, en tanto se adapta a los fines que nos hemos propuesto. Cierto? C. Cierto. D. Sea cul fuere nuestro propsito, sera necesario convertirlo en acciones para realizarlo o no? C. Necesariamente. D. Ahora esto mismo, la determinacin de medios para alcanzar fines puede realizarse expeditamente? C. Naturalmente, as como deficientemente. D. Esto depender en la

calidad del modo en que se haga? C. S. D. Y si el que lo hace lo hace con la ayuda de la experiencia adquirida lo tender a hacer mejor que el que lo hace contrario a la experiencia adquirida? C. Lo har mejor el que lo hace atendiendo la experiencia, como en cualquier arte. D. Bien entonces hablamos de un arte? C. Tal vez. D. Y ser que tambin sea una ciencia? C. Lo sera si hubiese un cuerpo de conocimientos sobre su materia. D. No hemos implicado que lo hay? C. Ciertamente. D. Ahora vemos que esta ciencia y arte tienen en s aplicacin en todos los campos, o si lo vemos de otra forma que toda ciencia y arte es una aplicacin de sta para la consecucin de conocimiento en cierta actividad o rama del conocimiento o no? C. Se podra plantear de tal modo. D. La vemos operar dentro de la labor del estadista? Z. As es. D. Mas existe algn oficio que sea sujeto casi por completo a la consecucin de objetivos? Z. La estrategia y la ciencia militar, pues no est sujeta, por s misma, a otra cosa que la consecucin de los objetivos que se le indiquen o que sta misma desglose del objetivo original. D. Magnficamente, es la estrategia el arte que se dedica a la consecucin de objetivos. C. Y a encontrar los medios para lograrles. D. Ahora que importancia tendr la estrategia para el estadista? Z. T mismo lo dijiste, el piloto tiene una misin. D. Cierto. Z. Y esta misin era determinar el destino y marcar el rumbo para llegar a ste. D. As dijimos. Z. As el gobernante habiendo establecido el bien como destino har todo el uso que pueda de la ciencia de consecucin de objetivos, la estrategia, para lograr precisamente este objetivo. D. Y slo la usar en ese sentido? C. Cmo? D. No debe el piloto, y as tambin el estadista defender externamente, es decir en contra de posibles ataques lo que est bajo su mando? Z. Seguramente. D. Y en este sentido utilizar la estrategia tal y como es la ciencia militar o de otra manera? Z. Exactamente como arte de la guerra. D. Ms en este caso es conveniente que nuestro piloto conozca pormenores de esta rama de la estrategia? Z. No veo cul es punto de la pregunta. D. Bien, debe delegar el piloto la funcin de defensa a otro, conociendo como dijimos tanto como sea necesario para delegar, o debe conocerla a fondo por s mismo? Z. Creo que debe conocerla tanto y cuanto sea necesario para delegar, mas no dominarla propiamente. D. Esto tambin lo diras con respecto al gobernante del Estado? Z. Lo mismo puede ser dicho. D. En ese caso sealar a un general o a otro experto en el campo de la guerra? Z. Efectivamente. D. Y se ven afectados los Estados con el resultado de la eficiencia o ineficiencia de las operaciones militares o no? Z. Naturalmente, en forma superlativa. D. Podramos repetir lo que se ha dicho que el arte de la guerra es de vital importancia para los Estados, un asunto de vida o muerte, salvacin o perdicin o se dira que exageramos? Z. No hay en ello ninguna exageracin. D. En ste como en otros asuntos que son de vital importancia para el Estado, podremos con seguridad admitir que no guardan ninguna importancia para el estadista, y que bien podra dejar este asunto en las manos de otro, que si bien sea capaz o medianamente capaz? C. Al contrario. Por Zeus! Es de la mayor importancia tanto para el Estado como para el estadista, y de ninguna forma podr deshacerse de asuntos de la primera importancia como los que guardan la seguridad del Estado, si bien slo podra delegar esos asuntos en manos de quien sea realmente excelente en el arte de la guerra y a nadie ms. D. Y si la cruel guerra se decanta contra nuestro Estado, ya sea por que se ejerza la defensa de nuestras leyes o se auxilie a los Estados con los que se tenga natural o convenido pacto pondremos al ms hbil entre nosotros en el arte de la guerra al mando de nuestras fuerzas? C. Seguramente. D. Ser ste nuestro nico criterio en la seleccin de comandante en armas? H. Qu otro podramos poner? D. Supongamos que ponemos al frente de nuestras fuerzas al mejor capacitado entre nosotros. Podr ser ste, independiente de su habilidad en esas artes,

fiel a nuestro Estado? C. Es posible. D. Es as mismo posible que se d lo contrario, que l ms capaz en ste o cualquier otro arte comn sea infiel a nuestro Estado? C. Efectivamente, tambin esto es posible. D. Y de hecho si se viene la guerra, por las razones que sta se conjura, bajo la bandera de la tirana, de la democracia o la oligarqua, ser nuestro deber combatir y defendernos? H. Con toda justicia. D. Ahora en la circunstancia de que nuestro comandante militar en jefe sea leal a nuestras leyes podremos librarnos de la amenaza de la tirana? C. Sin duda, si con su habilidad y nuestras fuerzas somos capaces de alcanzar la victoria. D. Pero si nuestro comandante militar no participa en nuestra fidelidad al Estado? C. Podra ganarse la guerra igualmente dependiendo de la habilidad y balance de fuerzas. D. Ms dganme en la circunstancia de que se logre la victoria en tal campaa, con las fuerzas que se le han aprovisionado, sera posible que se voltease en contra de nuestro Estado, al cul le tiene nula fidelidad? C. Sera posible. Z. Fcilmente se podra dar esa situacin. D. Con el mando total y sin refreno por nuestras leyes ni amor por la virtud, qu tipo de gobierno crees que forzase en nuestro Estado? C. Con seguridad conducira a la tirana D. No ser eso precisamente lo que tratbamos de combatir y contra lo que levantamos las armas en un principio? C. Justamente. D. Resulta que hemos perdido en contra de la tirana al momento que nos dispusimos a combatirla, ya fuera que perdiramos en contra de la tirana externa o que utilizramos a un hombre hbil pero sin escrpulos ni virtud. Queda claro que otro criterio deberemos imponerle si hemos de buscar la seguridad del Estado y no su destruccin? H. Buscaremos que el comandante en jefe de las labores de guerra sea, adems de hbil en su arte, leal al Estado y sus leyes. Z. Si es importante la lealtad al Estado en toda funcin de gobierno, sta es donde adquiere la mayor preeminencia, pues si cualquier otra funcin o cargo delegado por el gobernante requiere en la medida de la importancia del asunto lealtad a las leyes, la falta de sta en el caso de la defensa interna o externa es el caso en el que no podra sometrsele a las leyes. D. An en los dems Estados de los que hemos invocado, sea tirana, oligarqua y democracia, es de suma importancia que faccin se hace del poder blico, pues es la que con mayor facilidad puede hacerse del poder, pues ste descansa en ltima instancia en la razn de la fuerza. H. Mas es posible que en un Estado slo se ejerza moralmente la autoridad, sin necesidad del uso de las armas? D. Es posible regir a aquellos que sean dciles al rgimen? H. Naturalmente. D. Y qu de los que sean adversos? H. No, stos slo obedeceran bajo coercin. D. En todos los casos, entonces, los gobiernos, de una forma u otra pondrn este poder de coercin en un grupo o en un individuo. C. Ciertamente. D. Este grupo o individuo en las ms diferentes configuraciones que pudiera llegar a tener, es posible que busque acrecentar su poder? H. Eso es muy probable, pues es un rasgo frecuente entre los hombres. D. Tanto fuera como dentro del Estado? C. S. D. Si bien la estructura de la divisin y distribucin del poder no puede impedir mucho, por mucho, la maldad, si es posible al menos evitar, de las posibles, una trasgresin. H. Cul es? D. Dime es posible que esta persona o grupo que sea depositaria del comando supremo de las fuerzas militares luche por una concesin que ya se le ha concedido? C. No lo hara, no tendra caso. D. Veamos pues, podemos darle alevosamente poder fuera del Estado? C. Nunca si tal anexin es injusta. D. No podemos tampoco darle ms mando que el que las Leyes pueden atribuir dentro del Estado sobre los individuos en este contenido? C. Tampoco pues esto controvertira el objeto justo del Estado. D. Mas le podemos conceder una cosa y es el cargo de piloto del Estado. C. Pero cmo? Haremos del jefe militar la cabeza del Estado? D. Es ms fcil mover el agua del mar a un lago, o mover el agua del lago al mar? C. La del lago es por mucho ms simple de mover al mar. D. Y que es

ms fcil darle el cargo de piloto al comandante militar, o el de comandante militar al piloto del Estado. Naturalmente la segunda es ms simple. D. Y con ello le traeremos estabilidad al Estado, pues el cargo que el comandante podra aspirar por rango, ya lo tiene. C. Cierto, y como se vuelve ms estable se vuelve ms expedito, lo que hemos determinado resultar justo. D. As tambin qu es lo que diremos? Es la ciencia de las armas capaz de causar mal en su mal uso? C. Diremos que es una de las que ms dao puede causar en su mal uso, siendo la guerra uno de los males ms graves y odiosos. D. Dime entonces cmo hemos de impedir que sta resulte daina? C. Como lo hicimos con las dems ciencias y artes, poniendo como rectora de ella la virtud, y as con el mando de la justicia, hacer uso de ella. D. Perfectamente, mas son abundantes las personas virtuosas o son ms bien escasas? H. Escassimas. D. Es o no un requisito como lo hemos dispuesto para el cargo de piloto del Estado? H. Es el primer requisito. D. En esa sazn tenemos esta razn indirecta como segunda para sealar al piloto como comandante militar. Z. As es. D. Y en tanto que pedimos del piloto como gobernante de la nave del Estado el conocimiento de la estrategia abstracta a profundidad, y al comandante militar le hemos exigido adems la ciencia prctica de la guerra, le estaramos siendo muy exigentes al pedir al gobernante que extendiese hasta tal punto sus habilidades? C. Ciertamente ya tendra mucho tramo avanzado, si precisamente ya domina la estrategia en abstracto, quedara aadirle el conocimiento del arte de la guerra como concretizacin de la estrategia que le es natural requisito. H. De hecho tal conocimiento le traera mayor solidez a lo que ha de dominar en abstracto, y mejorar sus facultades. D. Esta situacin que hemos visto con el comandante militar no se extiende en s a todo el que estudie la estrategia? H. De qu forma? D. La estrategia y el arte de la guerra pueden resultar dainos si no actan bajo el comando de la justicia? C. S. D. Y esto sucede slo con el comandante en jefe o con cualquiera que tenga intencin de hacer mal uso del arte de la guerra? C. A todos. D. En tal caso la proteccin debiera cubrirles o slo a uno? C. Sera mejor que los cubriera a todos. D. Sin embargo, tenemos monopolio de la enseanza en la estrategia? C. No, pero es obvio que en cuanto en nuestro Estado se ensee la estrategia debern tomarse todas las medidas de seguridad. D. Y cules son esas medidas de seguridad? C. El procurar que slo las personas que sean justas tengan entrenamiento en la estrategia. D. Prohibiremos que sin tener conocimiento suficiente de la ciencia del Bien se tomen estudios en estas ciencias? C. Lo haremos. D. En tal caso debemos de guardar tanta secreca del arte y ciencia de la guerra y no difundirlos en pblico a fin de que evitemos causar perjuicio a los que no estn listos para recibirlos y pudieran con ellos daar, tal como los cultos esotricos no permiten que escape palabra de sus enseanzas a los que no estn iniciados.

Libro II C. De hecho tal veda es la que hacen los platnicos con la prohibicin de entrar al estudio de la dialctica hasta la edad de treinta aos, y esto slo es permitido para espritus selectos. D. Mas nosotros hemos de decir, como ellos, que el estudio de la verdad y el bien se reservaran para tal edad? C. Quizs. D. Pero dime qu temen ellos en el uso de la dialctica, que a tal extremo los ha llevado? C. Ellos figuran que el bien y la investigacin de la verdad sern puestos en ridculo, y a base de este ridculo los corazones de los jvenes se cierren a su bsqueda y realizacin. D. Duras son las consecuencias que temen, y de ser ciertas habr que cifrar la dialctica entre las ciencia peligrosas. Z. De ese modo habramos de actuar. D. Pero veamos, es posible tener una opinin incorrecta? C. Es posible. D. Es posible tener conocimiento falso? C. Eso es imposible. D. A travs de las demostraciones es que se logra el conocimiento, al menos en la dialctica? C. Ciertamente. D. Y an que todo el pueblo y las ciudades vecinas sostengan como verdadero lo falso o al revs, su naturaleza intrnseca vara? C. No, fuera que dependa de esa opinin. D. Para la persona que tiene conocimiento de tal o cul realidad, independientemente de que pueda o no demostrarla, o inclusive si puede demostrarla pero no persuadir a nadie de su verdad, podr ser convencido que tal conocimiento es falso? C. En ningn caso si es un conocimiento y no una mera opinin. D. En el ejercicio de la dialctica, una persona con criterio y agudeza mental se dar cuenta de las debilidades y fortalezas de la misma dialctica? C. De qu debilidades hablas? D. Te bastar si te cito una fortaleza y una debilidad y seguimos nuestro dialogo? C. Sea as. D. En la dialctica, si empezamos con la verdad podemos dialogar con rigor y concluir con verdad, exponiendo un nuevo aspecto de ella, sta es una fortaleza. C. Bien. D. Mas si tomamos premisas defectuosas o hablamos sin rigor podemos concluir en una falsedad. C. Cierto. D. Quedas saciado con esto? C. S. Bien, una es debilidad y la otra fortaleza. D. Al darse cuenta de la naturaleza de la dialctica, en su uso no estar ciego a la demostracin, sino que adquirir mayor tacto en revisar la congruencia de los argumentos e investigar la realidad de las premisas, de tal forma que el artilugio intelectual le sirva efectivamente en la bsqueda de la verdad. C. Cierto. D. En su uso correcto vemos que deba ser restringida? C. No lo creo as ahora. D. En tanto a qu edad sea propicio ensearla y qu tipo de individuos puedan sacar de ella provecho es evidente que se requerira un mayor anlisis? C. Ciertamente, mas es indiscutible que en cuanto sea til ha de servirle al estadista. D. Tienes toda la razn. En tanto a prevenciones y cuidados, ms creo que habra de tenerse con otro arte, que bien parece un remedo de la dialctica, y que es frecuentemente confundida con sta. H. Cul es ese arte? D. La retrica. C. Y por qu razn habra de tenerse ms cuidado con sa que con la dialctica? D. Han de saber que la retrica se sirve de palabras, al igual que la dialctica, pero tiene un propsito completamente distinto. Mientras la dialctica tiene como objeto la investigacin de la verdad, la retrica tiene como objeto encontrar los medios de manipular a la audiencia. C. Has dicho bien cul es el objeto de la retrica, mas no me parece claro por qu motivos sea ms de cuidado. D. A sta como al resto de las ciencias comunes, el asunto le es ajeno si con su ejercicio se causa un bien o un mal, pero se presta o al menos tiene mucha fama de servir para el mal. Su objetivo es el de causar persuasin ya lo dijimos. Mas

dganme si se intenta persuadir de la falsedad como si sta fuera cierta se har un bien o un mal? C. Un mal. D. Si se intenta desengaar por medio de la persuasin y convencer de lo verdadero? C. Un bien. D. Resultara extrao que si este arte nos sirve para persuadir y manipular a nuestros semejantes de la forma que queramos, los bribones y malhechores se ejercitaran en su prctica? H. Naturalmente sern atrados como moscas. D. No ser una herramienta habitual en el arsenal del demagogo, del tirano y del oligarca? C. En tanto puedan hacerse de ella, lo intentarn. D. De all su mala fama, mas como hemos dicho tambin puede hacerse un uso honesto de la retrica, en la persuasin de lo recto, la inspiracin hacia lo justo y el desenredo de lo falso. Z. Me parece magnfico, pero me surge una duda. Puede as como hacerse mal uso de la retrica hacerse mal uso de la dialctica? D. Qu piensas? Puede un individuo con la dialctica averiguar la verdad sobre el tema en el que se enfoque? Z. Eso mismo es el objeto y uso de la dialctica. D. Te parecera posible que un individuo enfocara su mente en averiguar cul es el modo mejor de producir un dao a alguien? Z. Es enteramente posible. D. Pues ese es un caso, pero te parece que si tuvisemos un poder que nos alcanzara para esclarecer las cosas, tal como es posible con la dialctica, perdiramos nuestro tiempo con tal pregunta? Pues si preguntramos algo como eso significara que creemos que as logrando tal cosa nos causaramos satisfaccin no es as? Z. Seguramente. D. No sera mejor buscar entender como obtener la satisfaccin que buscamos y nos enfocramos en analizar como podemos hacernos a nosotros mismos un bien? Z. Naturalmente, primero que nada buscaramos como causarnos un bien. D. Mas an si por medio del anlisis de la dialctica siguiramos contemplando sobre la primera y nefanda cuestin veramos con claridad sus cualidades? Z. As es. D. Veramos en su fondo si nos es daosa o benfica? Z. Si analizsemos hasta ese extremo. D. Mas si slo desarrollsemos la retrica nos realizaramos esta pregunta, o ms bien nos ufanaramos de lo mucho que podemos persuadir y manipular a los otros, sin saber si en esto nos hacemos un bien o un mal? C. Difcilmente, como comnmente vemos que es usada la retrica. D. Es en ese sentido que la retrica es un remedo de la dialctica, en cuanto la primera pretende hacer lo que en realidad hace la segunda.

Z. En ese sentido existen remedos de la virtud? D. Sera posible, creo yo, encontrar remedo de todas las cosas. Z. Podras poner un ejemplo. D. Bueno, pues precisamente hablamos del arrojo como compartiendo caractersticas con el valor. H. Cierto, mas existen remedos mejores y peores? D. Como en todo. H. Danos un ejemplo de un remedo que te parezca de los mejores. D. En el caso de la lealtad vemos como se aprecian aspectos tanto de la pureza como de la justicia? C. Si inclusive del valor y la constancia. D. Y esto es natural. No es que su eje sea el apego al objeto de la lealtad? C. Tal se aprecia. D. En este sentido, en forma relativa al objeto de apego, devuelve confianza con confianza, justicia con alianza, benevolencia con amor? H. Efectivamente, pero no habra por esto que considerarla como un aspecto de la virtud. D. Hasta ahora hemos sostenido que en las acciones virtuosas se evidencia un aspecto de la virtud, mas nunca es contrario a los dems cierto? C. Cierto. En ese sentido hemos dicho que una accin valerosa lo es con el requisito de ser justa. Z. As dijimos. D. Mas es posible que una accin leal sea injusta? Z. Cmo? D.

Quien devolviendo en lealtad el buen trato que ha recibido, despus reciba de ste una peticin a realizar alguna accin cualquiera la har? C. Si ha de ser leal s. D. Si esta accin fuera injusta, podremos decir que se ha hecho otra cosa que una injusticia? Z. Tal quedara. C. Mas si en realidad es leal no realizara lo que injustamente le es solicitado. D. En ese caso estaramos cambiando el objeto de la lealtad a la justicia o estaramos cambiando el significado que antes le dbamos a la palabra lealtad, y necesitaramos una nueva palabra para tomar el significado que anteriormente le dbamos a la palabra lealtad o fidelidad, que tiene implcita la confianza, pues para ser fiel bastaba una alianza subordinada al objeto de fidelidad. Si lealtad ahora significara hacer lo justo debiera conocerlo? C. Definitivamente. D. Tal conocimiento es propio de la lealtad o de la sabidura y la justicia? C. De la sabidura y la justicia. D. Sin embargo en mi apreciacin no hay otra sombra de la virtud que le siga tan cerca, pues la lealtad colocada donde naturalmente aparece ayuda a conducir las ms de las veces a algo bueno. C. A qu te refieres? D. Me refiero a la lealtad de los hijos con los padres, de los ciudadanos con su patria, la de los amigos, inclusive la de los perros a sus dueos. Pues primero les refrena de hacerles dao alguno, as tambin les hace defender el objeto de su lealtad hasta con la vida. Z. Cierto es todo eso. D. Y aunque tomando todo eso, es por mucho inferior a la virtud, tiene la caracterstica de que es mucho ms fcil de adquirirse. Z. Esto parece evidente. D. Ser entonces expedito que el Estado propicie la lealtad? C. Por supuesto, el Estado ha de promover la lealtad entre padres e hijos, hermanos, amigos, y la lealtad misma que al Estado es debida. D. Es independiente este valor que le hemos encontrado a la lealtad de la calidad del objeto de lealtad? C. Lo lamento, pero no te comprendo. D. Si el objeto de lealtad es ms prximo a ser la causa de mltiples acciones demeritorias ser ms valiosa la lealtad a ste? C. Al revs. D. Hemos dicho que el leal tiende a defender el objeto de su lealtad, qu se vendra si este objeto fuese ignominioso? C. Que el leal defendera algo innoble. D. Y eso sera meritorio? C. No. D. Bien resulta que si hemos de hacer que nuestro Estado sea objeto de lealtad, no debiramos preocuparnos antes de que fuera digno de ella? H. Definitivamente. D. Y como lo haramos? H. Hemos visto que se puede ser leal a la justicia? D. S. H. Y el que es fiel a la justicia en vista a esa lealtad har algo injusto? D. No, eso sera absurdo. H. Hemos comenzado con la intencin de que nuestro Estado tienda al bien cierto? D. Cierto. H. En ese sentido debemos de hacerlo lo ms virtuoso y justo. D. Naturalmente. H. En ese sentido la lealtad a nuestro Estado resultar una cosa buena en tanto logremos el objetivo de hacerlo justo. D. Magnficamente. Pero queda a resolver un detalle, pues esto funcionara a la perfeccin para con todos los individuos que comprendan la justicia. C. Cul es ese detalle? D. Son las acciones del leal independientes de las del objeto de su fidelidad? H. Lo son. D. Si el leal realiza acciones justas o injustas por el objeto de su lealtad a peticin de ste, sern ambos responsables? C. Naturalmente. D. A este extremo nuestro Estado no tiene problema porque no ha de solicitar accin injusta. C. Ciertamente. D. Mas es posible que el leal actu por su cuenta en la realizacin de tales acciones, sean correctas o incorrectas. H. No lo podemos negar, mas sera ese responsable solamente. D. Lo sera ciertamente, si el objeto de lealtad no ha incitado intencionalmente la lealtad. H. Cierto, pero nuestro Estado hemos dicho propiciar la lealtad al Estado mismo. D. Atinas perfectamente. H. Y si como dices esto no atae a los que han comprendido la justicia, atae a los que no la han comprendido. D. Ciertamente. Y qu quedara hacer? C. Intentar acercarlos lo ms posible a la comprensin de la justicia, y evitar todo lo que pueda ocasionar que por lealtad se realicen acciones incorrectas. D. Eso mismo deber hacer con relacin a la lealtad, para mantener su pureza y que sta d los

mejores beneficios que sean posibles. Z. Evidentes son las razones por las que la aprecias tan cercana en apariencia a la virtud misma. D. La considero, Zenn, la ms cercana en realidad a las virtudes, no en apariencia. Z. Entonces consideras que otra sea ms cercana en apariencia, y menos en realidad? D. Aciertas en ello. Z. Y qu es lo que ms se acerca segn t en apariencia a la virtud que no sea la fidelidad? D. Si insistes en saberlo. Z. Insisto, cul cualidad es? D. La inocencia. C. En tan baja categora la sitas? D. Mas sepan que no es sin motivo, al menos en m entender. H. Y cul es la causa de eso? D. Son varias, pero dime t lo que consideras es ms fcil confundir lo que es similar o lo que es distinto? C. Lo que es similar. D. As por ejemplo es fcil confundir vinagre con jugo y tomar uno por otro? C. As de fcil. As quien confundiendo vinagre con jugo de uva tome un poco se llevar un chasco? C. Seguramente. D. Si un potente veneno fuese fcil de confundirse con cualquier cosa de uso cotidiano, y se tomase el veneno por la cosa veramos que se llevara un simple chasco? C. No, de hecho se llevara con ello la vida misma o dolores terribles D. Pequeez podramos considerar esta confusin, si hemos de confundir la virtud y tomar algo diametralmente distinto por ella. C. Grave sera tal asunto. D. sta tan laureada cualidad, la inocencia conlleva un conocimiento o una ignorancia? C. Ciertamente ignorancia. D. Existe virtud sin sabidura? C. No. D. Resulta suficientemente evidente que la ignorancia es contraria a la sabidura o requiere de mayor anlisis? C. Resulta suficientemente explcito. D. La inocencia tiene o brinda alguna proteccin del vicio? C. No, ciertamente. D. Es por s misma propulsora del bien? C. Tampoco. D. Bien parece que slo nos coloca en un punto de donde la perversin puede fcilmente tomar raz, mas dificulta que enrace la virtud. C. Por qu dices que estorba en la implantacin de la virtud? D. Por la dificultad que causa a que se presenten ante ella conceptos que puedan ser malinterpretados. No hemos dicho que se confunde con frecuencia la inocencia con la virtud? C. Ese es el caso. D. Quin piense que hay virtud donde slo hay inocencia, pensar que es necesario inculcarla? C. No sin duda, si a caso incrementarla. D. En todos estos sentidos es contraria la inocencia a la virtud? H. Lo es, mas me queda la duda de si es la virtud alcanzable, o es una idea y simplemente todo esfuerzo humano para alcanzarla es como dices de los remedos o tal vez sombras de la virtud, tendiendo a buscarla como los ciegos pudieran intentar seguir la luz. D. Bien, tenemos ahora la oportunidad de ver si con nuestros esfuerzos podemos develar la verdad sobre eso o no? H. Enteramente. D. Si todo acto humano en persecucin de la idea de virtud fuese una sombra de ella alguna alcanzara la perfeccin de tal virtud o aspecto de la virtud? C. En tal caso sera como la copia defectuosa de esa idea, de la que emana o imita. D. Mas como hemos venido hablando hasta ahora, si hubiera una accin justa qu diremos en tanto a su justicia, que es justa o que no lo es? H. Diremos que es justa. D. Le falta algo para ser justa, o le sobra algo? H. De ningn modo, ya es justa. D. Y no es perfecto aquello que no le falta nada ni le sobra nada? H. Justamente. D. Entonces una accin sera perfectamente justa en tanto sea justa? H. Tal cul. D. La tendramos en el concepto de sombra o copia imperfecta? H. No, pero existe una accin perfectamente justa? D. En tanto se deba de distinguir entre dos o ms cursos de accin distintos que generen distintos resultados, gradados entre el bien causado y el mal provocado cul accin debe de escogerse? H. Naturalmente aquella que mayor bien cause y menor mal. D. Es esto dentro de la medida de lo posible o de lo imposible? H. Dentro de lo posible. D. Qu diras si tenemos a un medico, por ejemplo, ste dictamina los tratamientos de acuerdo a su ciencia y arte? H. Justamente. D. Ahora si ste conociera el curso de accin que su ciencia le seala, y por causa de negligencia, o de maldad u otro vicio, prescribiera el curso de accin contrario Cometer con ello una accin justa? H. Cometer con ello una injusticia. D. Y si con benevolencia prescribe el curso que su arte y ciencia le indica? H. Habr hecho un acto justo. D. Mas es posible que por su naturaleza, la prescripcin ajustada con la debida diligencia y ponderacin falle sin embargo en su propsito? H. Eso es comn en la ciencia mdica y en las dems. D. Vemos sin embargo que haya variado la justicia de su accin? H. De ningn modo. D. En tal caso el alcance de su conocimiento tcnico podr variar, pero una accin basada en la benevolencia es justa? C. Naturalmente. D. Es por otro lado posible que benevolentemente dicte un curso de accin por mala voluntad o deseando causar dao? H. Tampoco. D. Veamos le permite la benevolencia dejar el resultado al azar? H. No, ni ceder a la negligencia. D. Le forza la justicia entonces a actuar con la mxima excelencia

tcnica en el arte que profesa? H. Soy de ese dictamen. D. Valorando tales hechos se decantar por la accin que le dicte la sabidura su accin ser sabia? H. Tan justa como sabia. D. Seleccionar la va dentro de las posibles que ms se apegue a ese dictamen? H. S. D. Veremos entonces que le falte algo para ser justa a su accin? H. No. D. Sera en los trminos que lo hemos expuesto perfectamente justa? H. Lo sera.

D. Sin embargo, es posible que con tu duda te refieras a otra cosa. H. De hecho s, pues si bien concedo que la accin sera relativamente justa, y que en ese sentido sera perfectamente justa, pues no le falta nada para serlo, me gustara saber si existe alguna accin que no sea relativamente justa sino absolutamente, trascendentemente. D. Hemos quedado que la justicia es una virtud cierto? Y que la virtud es aquello que conduce al bien. H. As quedamos. D. De tal manera la accin que buscamos ahora conduce a un bien trascendente. H. S. D. Y no es conocido este bien trascendente como la felicidad? H. As es comnmente llamado. D. Mas habiendo una general uniformidad sobre tal dictamen, el asunto es mucho ms controvertido en tanto a la naturaleza de la felicidad misma o no es as? C. Cosa cierta has dicho sobre la aparente uniformidad de juicio que la coloca como el bien supremo, pero es casi imposible encontrar unidad en el concepto que de ella misma se tiene, o del modo de alcanzarla. D. De tal forma es posible que unos contradigan a otros en tanto a la naturaleza de la felicidad? C. Eso mismo digo. D. Lo mismo sobre el mtodo para lograrla? Es decir los que logran un consenso sobre su naturaleza pueden diferir y todava habremos de sumarle toda una serie de complicaciones. C. Lo mismo digo. Z. Inclusive existen quienes niegan que la felicidad exista en realidad, y otros que sostienen que tal cualidad es nicamente divina por lo que toda especulacin y esfuerzo humano para lograrla se viene intil. D. Bien, en cuanto a todos los que sostienen que la felicidad de los habitantes es el objeto del Estado, tendrn el voto unnime sobre la primera cuestin de la que hablamos? C. Naturalmente, incluidos entre ellos los hedonistas, pragmatistas, aristotlicos y todos los que llamamos eudaemonistas. D. Otra cosa ser que acuerden en la naturaleza intrnseca de la felicidad, y mayor la dificultad de que coincidan en el medio para obtenerla. C. Cierto, habr incluso aquellos que digan que la felicidad le pertenece al Estado independientemente de que los habitantes sean o puedan ser felices. D. En el caso de los pragmatistas, podemos ver si quiera que entre ellos sostengan una definicin concisa de lo que es la felicidad o su naturaleza? C. Ni si quiera esto es posible. Es posible que puedan llegar a un acuerdo en tanto al mtodo conciso a seguir? C. Difcilmente. D. Y en trminos generales tendremos a los materialistas, empiristas y hedonistas contra los hiloformistas, racionalistas e idealistas? Y de entre de stos y los otros continuarn las discusiones. D. Es esto corriente en este tema solamente? C. Muchos son los desacuerdos entre las personas, no slo en estos temas. D. Dentro de los temas que la gente disputa no se encuentran el tema del Arte y el de la belleza? Resulta fcil o difcil que lleguen a un acuerdo sobre stos? C. An teniendo frente de s un objeto dado, es comn que mientras unos lo encuentran artstico y bello, otros afirmarn lo contrario, as habr puntos de vista intermedios. H. Me parece de lo ms comn, al grado que hay quienes sostienen o que todo es bello o que no existe belleza como tal, sino que cada cul considera bello lo que es de su agrado. D. Creen que sea conveniente que lo dejemos as? C. Cmo? D. Creen que sea conveniente que no analicemos ms el punto que estudiamos, la belleza, y que dejemos nuestro concepto de ella sea una mera opinin, sea de un hombre hoy y otro maana, y que fusemos completamente incapaces de definir si un objeto es bello, ni aunque nos tropezsemos con la belleza misma? C. Sera muy ridculo no poder decir que es bello ni que es la belleza. D. Diremos lo mismo en tanto la felicidad? Pues me parece que sera mucho ms que ridculo que en el curso de nuestras vidas nos estrellramos con ella y por no saber reconocer sus marcas y seales la dejsemos pasar de largo. C. En ese caso diremos que sera la mayor imprudencia jams. Z. Faltara capacidad a nuestra lengua de expresar la magnitud de un error como se. D. Debemos entonces continuar nuestra indagacin? Guarda alguna importancia? C. Cmo justificaramos no haber dirigido nuestro mejor

esfuerzo en su bsqueda y consecucin? Sin duda guarda la mayor importancia de todas, y no podemos evitar esta indagacin. D. En tal caso dime no le produce al que juzga un objeto como bello una atraccin? C. As sucede. D. Lo que considera contrario a lo bello, es decir lo feo qu reaccin le produce? C. La de repulsin. D. Estas atracciones y repulsiones, se dan con dependencia de que el que las juzga como tales tenga contacto con ellas? C. Puede que se den en ausencia del contacto con ellas. D. En qu caso? C. En el caso de que juzgue tal objeto como bello y que sin tenerlo enfrente el mero pensar en tal objeto le produzca la atraccin o la repulsin. D. En ese caso diremos que el objeto que le produce la atraccin o repulsin es la misma idea o pensamiento sobre tal objeto pensado? C. Lo podramos decir as. D. Mas en ausencia del objeto, sea en percepcin o conceptualizacin, podemos decir que se cause la atraccin o repulsin? C. No. D. Depende entonces del contacto? C. Lo admito. D. A este juez le parecern todos los objetos sensoriales y conceptuales con los que tenga contacto igual de atractivos y repulsivos? C. No, algunos le parecern atractivos, otros negativos y otros inclusive neutros. D. Y esto ser para nuestro juez al azar, sea que le presentemos un objeto y reaccione a ste aleatoriamente o depender de las caractersticas del objeto y las condiciones en las que se le presente? C. Naturalmente depender de las caractersticas del objeto as tambin de la manera y modo en los que se le presente. D. Y si en las mismas condiciones y modos le presentamos los mismos objetos que usamos para que a este juez le parecan en mayor o en menor medida atractivos a otro juez distinto le parecern de igual e idntica manera atractivos? C. Es posible. H. Y es posible que le parezcan atractivos de distinta manera y grado, e inclusive repulsivos. D. En tal caso depende la sensacin de atraccin adems de los objetos y los modos en los que se presenten, del observador o juez, pues en observadores distintos puede haber reacciones distintas sobre los mismos estmulos? C. Tal se deduce de lo que hemos aceptado. D. Este ltimo factor, depende de las caractersticas y cualidades del observador o es aleatoria? C. Depende de esas cualidades del observador tambin. D. Hay ms notas musicales o dedos en ambas manos? C. Hay ms dedos en las manos. D. Diremos que son pocas las combinaciones que de ellas se pueden hacer en melodas? H. Son numerossimas las combinaciones que pueden dar en meloda, en una vida sera imposible escucharlas si quiera la mitad. D. En tal caso sern pocas las variedades de experiencias que se pueden tener si hemos de combinar en ellas las cualidades de los objetos, los modos en los que se presenten y las cualidades de los observadores? C. Sern inmensas. D. Si un objeto con diversas cualidades hace contacto con el observador, puede causar diversos efectos en el observador? H. Cmo? D. Es posible mezclar en una bebida sustancias que le causen al que las toma una sensacin de placer mas otras que le produzcan malestar? C. Seguramente. D. As unas producen un efecto y otras otro, unas producen un efecto sobre ciertas cualidades del observador y otras sobre otras? C. Es posible. As tambin una sola cualidad que tenga contacto con el observador puede causar varios efectos en el observador por las distintas cualidades de ste? C. S. D. Y en esta secuencia de causa efecto el contacto es la causa, los elementos que hacen contacto son el perceptor y la percepcin, y el efecto es la sensacin? H. Sin lugar a dudas. D. La sensacin que resulta puede venirse atractiva para el sujeto, repulsiva o neutra. H. Cierto. D. En esos casos hemos supuesto que considerar bello lo atractivo, feo lo repulsivo? C. Evidentemente. D. El objeto que le produce la sensacin que considera satisfactoria lo considerar bello, y anlogamente el que produzca disatisfaccin, feo? C. Es extensin de lo mismo que hemos dicho. D. Mas esto depender de las cualidades del objeto dado? Z. Efectivamente, adems de las del observador y del modo en la que tenga contacto. D. Es posible que para nuestro observador se le presente un objeto con el que nunca antes haya tenido contacto antes? C. Es posible. D. Y en este caso podremos decir que del contacto surgir una sensacin que resulte atractiva o repulsiva, satisfactoria o disatisfactoria, de acuerdo a las cualidades de los elementos en juego en tal proceso o ser de otra forma? Z. De esa forma. D. Ya sea que haya ya experimentado con anterioridad o no el objeto surgir una sensacin que confirmara, modificar o establecer por primera vez el criterio que sobre tal objeto se tenga? C. Dado lo que hemos sostenido, slo puede ser esto. D. As quien gusta en

general de las cosas dulces, mas nunca ha probado la miel ser probable que si la prueba la considere satisfactoria, y por lo tanto atractiva? Z. Lo ms probable. D. Y al considerar atractivo tal objeto podremos decir que est inclinado a dicho objeto? H. Sin problema. D. Si tenemos que las caractersticas propias del observador se conjugan con las del objeto perceptual o mental y producen la sensacin dada para dicha combinacin de la cul se sigue la satisfaccin o disatisfaccin, atraccin o repulsin, podemos decir que el observador cambie o permanezca igual? Z. Cmo? D. Con la atraccin o repulsin que este proceso causa se forma un criterio ya sea de atractivo o repulsivo para el observador? C. S, o se confirma el que ya exista. D. Y este conocimiento ya lo tena el observador? C. No, ciertamente. D. Ser totalmente idntico a lo que era antes de esa adquisicin? C. Efectivamente habr cambiado. D. Evidencia esto que las cualidades del observador son mutables o inmutables? Z. Que son mutables. D. A las cualidades de los objetos externos podemos atribuirles en mayor medida permanencia o son tambin mutables? Z. An las montaas, Dimedes, son mudables, cmo no han de ser mudables los objetos que percibimos. D. Sin embargo podemos decir, que para un individuo tal, tal o cual tipo d