El Hijo Del Hombre Come y Bebe (Mt 11,19; Lc 7,34)

Hijo del hombre come y bebe (Mt 11,19; Le 7,34)

Hay dos pasos exactamente paralelos en el primer y tercer

evangelio: Mt 1 l,18s Porque vino Juan sin corner ni beber, y dicen: Demonio tiene. Vino el Hijo del hombre condendo

y bebiendo, y dicen: Ahi tenis un hombre comiln y bebedor de vino ( ), amigo de publi canos y pecadores .

Le 7,33s: Porque ha venido Juan el Bautista sin corner

pan ni beber vino, y decis: Demonio tiene. Ha venido el Hijo del hombre condendo y bebiendo, y decis: Ahi tenis un hom bre comiln y bebedor de vino, amigo de publicanos y peca dores .

En tesis habria lugar al estudio de las variantes textuales, de su influjo en la primitiva tradicin cristiana. Algo iremos

diciendo, no mucho1. Analizamos aqui el tema obvio, en su

aplicacin al Salvador: corno entendi la primera antigiiedad ' el corner y beber

' de Jess; qu actitud adoptaron ortodoxos

y herejes ante el fenmeno. Los evangelios, obviamente entendidos, no crean problema.

A nadie, escriba ni fariseo, le llamaba la atencin que Jesus carniera. Extrafibales a muchos, que lo hiciese con los publi canos y pecadores (cf. Me 2,16; Mt 9,11; Le 5,30)2. Pero vinie ron prejuicios cristolgicos, y lo que saltaba a la vista co rnenz a oscurecerse. tEra verdad que Jess comia? tPdia

corner beber de veras?

J- Nada sefialan monografias corno la de E. Massaux, Irtfluence de

l'Evangile de saint Matthieu sur la littrature chrtienne avant Saint

Irne {Louvain 1950). 2 Otros testimonios en W. Bauer, Dos Leben Jesu (Tiibingen 1909)

316 s.

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524 ANTONIO ORBE, S. I.

Doctrina heterodoxa

Marcin niega que Cristo tuviese cuerpo material. E1 Sal vador comia y bebia en apariencia3. De donde, varios coro larios. E1 hereje creiase obligado a prohibir tambin a sus cristianos la carne 4. Al Salvador hubo de hacerle corner, la

vispera de su pasin, la cena Suya, no la cena pascual. A tal fin borro de Le 22,14 6 , rompiendo toda tra dicin judaica5. Debi de prescindir asimismo de Le 7,33-35 previniendo la difcultad que del ayuno del Bautista y el rgi men normal de Jess se le seguia. Tal parece la explicacin del silencio tertulianeoe.

Marino, a quien Adamancio asigna el papel de bardesanita, rehuye sistemticamente a propsito de los manjares eucaris ticos (1 Cor 10,16) y naturales (Mt 7,10; Le ll,12s) el alcance obvio de los trminos7.

Annimos adversarios de s. Ignacio negaban que Jesucristo hubiera nacido de veras hombre, cornicio y bebido s.

En la misma linea se situaron Satornilo 9 y quienes corno l condenaban el matrimonio, la generacin, el corner carne...

3 Cf. Tert., adv. Marc III 8,4: Iam nunc, cum mendacium depre henditur Christus caro, sequitur ut et omnia quae per carnem Christi gesta sunt, mendacio gesta sint: congressus, contactus, ccmvictus, ipsae quoque virtutes .

* Tert., adv Marc I 14; de ieiunio 15; Hipol., Ref VII 30,3 (cf. 1 Tim 4,3). Vase Bauer, Leben Jesu 321.

5 Cf. Th. Zahn, Geschichte des Neutestamentlichen Kanons I (Er langen 1888) 691,2; II, 1890, 489s; A. Harnack, arcioni (Leipzig 1924) 233*. La omisin viene atestiguada por s. Epifanio, Schol. 62. E1 autor de un libro annimo contra los judios y quatuordecimanos, al decir de Focio {Bibl. 115: PG 103,392A) 'afirma que Nuestro Sefior Jesu cristo no comi en el santo (dia) Quinto la Pascua legai, porque ni era entonces el tiempo, sino al dia siguiente. Y que ni siquiera al dia

siguiente comi lo que comi, por observar la ley. En efecto no (tomo) el corder ni los cimos ni hizo nada de cuanto tenian por costumbre guardar los que cumplian la Pascua legai. Sino que dice comi una cena propia mistica, de la cual dio tambin a los discipulos pan y bebida '. Vase Bauer, Leben Jesu 159s.

Muy bien Harnack (Marcion 197*): ...es musste dem M. anstssig sein, und Tert. hatte es schwerlich iibergangen, wenn er es bei M. ge funden hatte.

Cf. dial. V 20 (Bakhuyzen 108,18ss) = PG 11,1880 Css. Vase H. J. W. Drijvers, Bardaisan of Edessa (Assen 1966) 172.

8 Cf. Trall 9,1; Smym 3,3. Puede verse H. Schlier, Religionsgeschichtti che Untersuchungen zu den Ignatiusbriefen {Giessen 1929) 109s.

9 Iren I 24,2.

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EL HIJO DEL HOMBRE COME BEBE 525

con arreglo al docetismo de su cristologia. Igualmente los en cratitas de Iren I 28,1 Taciano merece particular considera rin. Hostil al vino, elimino el trmino de Mt 11,19 y Le 7,34 10; asi corno

' el vino mezclado de hiel ' bebido por Cristo en la cruz hubo de sustituirlo por

' vinagre y hiel

' (Mt

27,34)". Sacaba, al parecer, de quicio la recomendacin del

Apstol12, llevndola de rebote a la conducta misma de Jess. El Salvador de algunos Hechos apcrifos de los Apstoles

pareexa corner y beber, mas no comia ni bebia. En los Acta Johannis 87-105 sobre cuyo docetismo ha llamado no ha mucho la atencin el P. Festugire 13, se expresa Juan asi:

Otra maravilla os dir (), hexrmanos. Alguna vez, que riendo agairarle daba con un cuerpo material y slido. Otras veces, en cambio, al irle a palpar ofreciaseme ( ) inmaterial e incorpreo y corno si nada hu biera. Y si invitado algxin dia por un fariseo acudia al llamamiento, le acompanbamos. Y a cada imo le ponian los invitantes un pan. Y tambin l tomaba uno; mas l bendecia el suyo y nos lo repartia, y al punto se har taban todos (con l) anientras nuestros panes se conser

10 Cf. . Lamy, S. Ephraem Hymni et Sermones II (Mechliniae 1886) 747.4; L. Leloir, Comm. de l'vang. Concord, ou Diatessaron, en SCh

121,12. 11 S. Efrn, Comm. V 9 fin; XVIII 1; XX 27. Sin embargo la lectura

' vinagre y hiel atestiguada por Orgenes (Comm. in Matth. ser. 127)

y AN codd it Pesch, se explica muy bien por influjo de Ps 68,22. Vase tambin Barn 7,5; Evang. etri 5,16; Melitn, peri Pascha 80 v. 583

{cf. fr. XVI ed. Otto IX 500 422); Tert., adv. Jud. 10,4; 13,10; Didaskalia

syr. XIX; Acta Pilati X 1; XVI 7; S. Greg. de Elvira, traci. IX 14.

Tambin san Ireneo recurre a la frmula ' aceto et felle potatur (resp.

potari) ' en III 19,2 y IV 33,12; epid 82. Otros muchos testimonios vanse

en Bauer, Leben Jesu 217ss.; mejor que en O. Perler, SCh 123 p. 183s.

Anadir ltimamente II Logos del gran Set NHC VII, 2 p. 55 ; 16ss : vase mi Cristologia gnostica II (Madrid 1976) 233 y 311.

12 Rom 14,21 : ' Est bien el no corner carne ni beber vino Vase

Taciano, segn Clem. Al., Strom III 12,85,2. 3 Le dieu inconnu et la gnose (Paris 1954) 233; Il porte deux carac

tres. D'une part, Jsus change d'apparence, soit que, plusieurs disci

ples tant runis dans un mme lieu, Jsus se montrt sous une forme

diffrente l'un et l'autre... soit que, aux yeux du mme disciple, Jsus changet de stature, tantt petit tantt se dressant jusqu'au ciel, ou de qualit: sa poitrine est tantt douce et molle, tantt dure comme

le roc. D'autre part le corps de Jsus, sans subir aucune modification

dans son aspect extrieur, peut tre tour tour matrici ou immat

riel. Jsus, aux yeux de ses disciples, reste toujours le mme: mais

la substance de son corps passe d'un tat l'autre. Ou, pour prciser

encore, le vrai corps de Jsus est immatriel: mais ce corps immatriel

devient l'occasion un corps pourvu de matire.

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vaban enteros, de suerte que se espantaban quienes le habian invitado 14.

tQuiere eso decir que el Salvador no comia? E1 autor de Ada Johannis indica mas bien que el cuerpo de Jesus era idneo para corner, beber, caminar y otras funciones mate

riales, mas no estaba sujeto por necesidad fisica a ellas15.

Igual que, resucitado de entre los muertos, comia con los

Once. Por eso tambin repartia el pan entre los dems in vitados. Una leve referencia al milagro de la multiplicacin y a la Eucaristia, aludida lineas despus1B, acusa la dimen sin que el autor annimo trat de conferir al verdadero

manjar de Jess17. El silencio del vino pregonaria quiz el

sesgo vegetariano18 del escrito.

Los Hechos de Ped.ro poseen asimismo fragmentos de su bida entonacin gnostica. En el capitulo 20 dice Pedro entre otras cosas:

Hic ipse est et plenitudo omnis maiestatis, qui nobis sua omnia monstravit bona: manducavit et vivit ( = bibit) propter nos, ipse neque esuriens neque sitiens, baiulavit et inproperia passus est propter nos, mortuus est et re

surrexit nostri causa10.

Ada Johannis y Ada Petri contienen elementos de gnosis valentiniana, pero no pertenecen abiertamente a ella.

Los exegetas de Mt ll,18s (Le 7,33s), entre los discipulos de Valentin, admitirian el fenmeno material, lo mismo que el nacimiento y dems ordinarias manifestaciones de la vida

terrena, en su aplicacin a Jess. El fenmeno, mas no la realidad substrato. El Salvador, en carne no material, hacia lo que los dems hombres en carne terrena.

14 Ada Johannis 93 (196,19ss). Vase R. A. Lipsius, Die apokrypheti Apostelgeschichten und

Apostellegenden I (Braunschweig 1883) 522. 16 c. 95 (197,25): . " Recurdese la substitucin marcionita de la cena Pascual por la

mistica. Vase Schlier, Ignatiusbriefen 166ss. ls Cf. Bauer, Lebert Jesu 322. 18 Adus Petri cutn Simone XX (67,24ss).

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E1 recurso a versiculos corno el de Io 4,34 20 a nada con duce, porque son Iiteralmente alegricos 21.

Otra cosa ocurre con unas lineas del propio Valentn, conservadas por Clemente Alejandrino:

Valentin en la carta a Agatpodo 22 dice: Sujeto a todas las pasiones ( )

23 , Adopto la insercin


troducir igual que los dems los alimentos materiales.

Porque ese solo fenmeno no entraftaba corrupcin en el in dividuo. Mientras la asimilacin y eliminacin significaban corruptela; y Jesus, ni por dios, ni por Salvador la consentia.

Valentin tenia tal vez la mente en Io 4,34. La frase Jesus

trabajaba la divinidad ( * ) se pres

ta a varias versiones: a) actuaba ponia en ejereicio la natu raleza divina, haciendo sentir su incorrupcin e impidiendo por lo mismo cualquier fenmeno impropio de un Dios, corno seria la corrupcin y asimilacin de alimentos; b) trabajaba el

manjar divino, en sentido anlogo al ' alimento perfecto

' de Acta Thomae29. La voluntad del Padre, la theoria de Dios, la

incorruptela constituyen el unico manjar digno de Jess. Solo l nutre, sin corrupcin, su persona; en contraste con el man

jar y bebida materiales, que por corruptibles eran inadaptados a Su dignidad.

Yo me inclino a la primera versin, que Ueva consigo en forma implicita el contenido de la segunda. La continencia de Jesus venia impuesta por su natura divina; o, si se quiere, por 'lo Santo' de l, incompatible con cualesquier formas de

corrupcin. Segun tradicin judia, los ngeles de Mambre (Gen 18,8ss)

parecian corner, mas no comian30. Notables por su analogia

con la carta de Valentin unas lineas del Testamentum Abrahae. Al reparo que presenta Miguel, uno de los tres ngeles

Se

fior, todos los espiritus celestes son incorpreos, no comen ni

beben responde el Sefior:

Ve, no te preocupe eso. Ai irte a sentar con l (= Abra hn), enviar a tu interior un espiritu capaz de corner todo ( ), que consu mir de tus manos y mediante tu boca todas las cosas que haya en la mesa31.

29 c. 120 (230,13ss): ' Hazme participe de la Vida eterna, para que

reciba de ti un manjar perfecto ( ); treme tu misma el

pan y la mezcla de agua'. Vase 1 Cor 10,3s; Did 10,3; Clem. Al., Paed I 6,42ss; Strom V 10,66,2. Otros testimonios en Schlier, Ignatiusbriefen 149ss 166; Christus urtd die Kirche im Epheserbrief (Tiibingen 1930) 59 n. 2.

3 Vase ltimamente el Targum Neophyti ad loc. Cf. Filn, de Abrahamo 118; Genesis rabbah 48,14; Tob 12,19.

31 Testamentum Abrahae, ree. A c. 4 ed. M. R. James (Texts and Studies 11,2) p. 81, 21ss. Puede verse E. Schurer, Gesch. d. jiid. Volkes III (Leipzig 1909) 338s; y mi Cristologia gnostica I (Madrid 1976) 386.

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La frase cruciai ( ) res

ponde a otra, poco anterioi (

... )32 y evoca 4 Reg 19,7 y Gal 4,6. Dios intro ducir ' el espiritu devorador

' (^), corno pudo

introducir el Espiritu Santo en Isaac. El se encargar de con sumir los manjares que Miguel y sus compafieros finjan co rner 33.

No tuvo mucho que inventar Valentn. La exegesis hebrea

de la escena de Mambre le proporcionaba sobrados elementos. El Salvador llevaba congnito el espiritu devorador, para con sumir cuantos manjares le pusiesen delante. Importa poco que no haya invocado el del Testamentum Abra hae. Los simonianos, y aun los valentinianos de Hiplito co nocian ' el fuego devorador

' ( 7), en sentido pa

ralelo34, vinculndolo a la naturaleza del demiurgo (segun Deut

4,24; Ex 24,17). Es probable que Valentin esquivara el trmino

( resp. 7 ), por tratarse de una vis divina del Salvador, ajena a la del demiurgo hebraico.

En el fondo, el eolesistico Clemente 3S, adversario en otras ocasiones de Valentin, se contenta con aducir sus breves lineas, sin oomentarlas ni siquiera impugnarlas. Casi, corno si se avi niera al contenido.

He aqui unas ideas suyas peregrinas de sesgo parecido. Escribe en las Adumbratones in Johannem:

' Et manus inquit (I/o l,le) nostrae contrectave

runt de Verbo vitae ', non solum carnem eius, sed etiam virtutes eiusdem Filii significat, sicut radius solis usque ad haec infima loca pertransiens, qui radius in carne ve niens palpabilis factus est discipulis. Fertur ergo in tra ditianibus, quoniam lohannes ipsum corpus, quod erat extrinsecus, tangens manum suam in profunda misisse et duritiam carnis nullo modo reluctatam esse, sed locum manui praebuisse dicipuli. Propter quod etiam infert:

33 Testamentum Abrahae c. 4 p. 81, 9s. 33 James ed. cit. p. 120s aduce Tob 12,19 y Macario Magnes, Apoli

tica IV, 27 : no consumieron (los ngeles) el manjar y la bebida corno

Abrahn, sino que corno fuego ( ) gastaron lo que les pu sieron delante... tornando corno hombres lo que les di a corner Abra

hn, lo consumieron comindolo corno ngeles... consumindolo con in

corpreo tacto ( ) . 34 Hip., Ref VI, 9,9 w. 137,11 (simonianos); Ref VI, 32,8 w. 161,lls {va

lentinianos). 33 Vase Ecloga prophet. 26.

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' et manus nostrae contrectaverunt de Verbo vitae con

treetabilis utique factus est qui venit in carne38.

Las tradiciones (od ) "responden a la noticia de los Acta Johanns 37. La Virtud divina (resp. el Hijo de Dios, Verbo de Vida) penetra en la carne, a la que comunica Su propiedad (= incorruptela?), elevandola sobre sus cualidades fisicas (de dureza y prob. tambin de corrupcin). Le hace al Hijo (resp. a su Virtud divina) palpable (' contrectabilis, palpabilis ') para los discipulos. El Alejandrino mantiene la naturaleza carnai del Salvador, tanto corno la divina. Imagina la encarnacin del Hijo a la manera de una henosis dinmica, de la Virtud

() del Verbo con la substancia de la carne. Silencia por razones quiz de exegesis la union entre las sub stancias del Logos y de la carne, que por si sola dejaria inex

plicada la mutacin cualitativa de est ltima. Otros fragmentos perfilan la doctrina de Clemente. En el

individuo perfecto, enseiia, subsisten las afeceiones necesarias a la permanencia -del cuerpo: el hambre, la sed y semejantes.

Mas en el Salvador afiade seria ridiculo que el cuerpo reclamara, corno tal, los servicios necesarios para la conservacin. Comia en efecto, no a causa del cuerpo sostenido () corno estaba por divina vir tud , sino para que no se les ocurriera a cuantos con

El estaban pensar de El en forma ajena ()3S, corno

mas tarde algunos que imaginaron habia El manifest dose en apariencia (). En (en su persona) era sim plemente impasible ( ), y ningn movimiento de pasin ni piacer ni tristeza se insinuaba en El39.

Clemente cree haber salvado el docetismo errneo de algu nos alude a gnsticos prob. valentinianos , hacindole corner (y eliminar) sin verdadera precisin.

El cuerpo del Salvador, segn l, no tenia necesidad para conservarse, de los medios indispensables al cuerpo humano

3c GCS III 210,9ss. Vase . Zahn, Supplementum Clementinum, Erlangen, 1884, 87 y 97; y mi Cristologia gnstico I (Madrid 1976) 382.

37 Arriba . 525s. ss E1 adverbio equivale por el contesto a

' errneamente ' : pensar de manera ajena a la verdad. Cf. Gal 5,10 y sobre todo Fil 3,15.

3 Strom VI 9,71,ls.

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(corner, dormir). Le contenta ( ) la vir tud divina; no simplemente corno el alma contiene al cuerpo, segn idea muy generalizada en los siglos II y III40, sino por singular privilegio corno el pneuma divino le mantiene a salvo de toda corrupcin por atraerle a su propia unidad (de espiritu). En esto Clemente discurre igual que Valentin, corno si la condicin somtica del Salvador resucitado fuera la nica conveniente al organismo del Verbo. La presencia del Espiritu de Dios implicito en el Logos deberia bastar connaturalmente aun antes de su resurreccin, para mantener

fuera de las leyes normales de conservacin el cuerpo de Jess. Si el ' soplo de vida

' es compatible con la corrupcin de ahi la mortalidad connaturai a los hombres , la presencia del ' Espiritu ', principio de cohesin ( ) del soma, desecha toda posible corruptela41.

Contenido corno estaba (el sma de Jess) por divina virtud , y no simplemente por el alma (= soplo de vida); en otros trminos, vivificado por la plenitud del Espiritu di

vino, no requeria para vivir a lo Dios elemento alguno material. Es el mismo principio sobre que san Ireneo funda la in

corruptela de los justos, en posesin del Espiritu. el mismo sobre que los eclesistieos en general basaban el rgimen de Jess redivivo.

tPor qu pues come y bebe, igual que los dems? Res

ponde el Alejandrino (con la psicologia recelosa de los disci

pulos en el Cenculo, ante la aparicin de Jess): para pre

venir el docetismo de los futuros gnsticos heterodoxos; no

fuesen a ereer los discipulos al comprobar se mantenia sin

40 Cf. mi En los albores de la exegesis iohannea (Roma 1955) 224ss;

y sobre todo E. L. Fortin, Christianisme et culture philosophique au

cinquime sicle (Paris 1959) 131ss. 41 Cf. Iren., adv. haer. V, 12,2: Porque una cosa es el soplo de

vida que hace al hombre asimismo animai ( ) [y por ende

mortai]. Y otra el Espiritu vivificante, que le hace tambin espiritual

( ) [y por ende incorruptible e inmortai]... (Isaias) atri

buye el Espiritu en propiedad () a Dios, el cual lo derrama en los

ltimos tiempos sobre el gnero humano mediante la adopcin. Mientras

el hlito le atribuye en comn a la creatura, y le presenta corno he

chura. Ahora bien una cosa es lo hecho, otra el que lo hace. El soplo es pues temporal, y el Espiritu eterno. El soplo florece en breve, dura

algn tiempo y tras esto se va, dejando sin hlito aquello que primero contenta. En cambio el Espiritu cine al hombre por dentro y por fuera,

y corno quien siempre perdura no le abandonar jams (

, ) . Vase mi Antropologia de san

Ireneo (Madrid 1969) 218ss.

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corner ni beber que su cuerpo era de solas apariencias. Para demostrarles posee un cuerpo material, fisicamente ca

paz de corner (asimilando y eliminando por corrupcin), dor mir y sufrir. Come y duerme por causa nuestra; igual que sufre por nuestra causa.

La doctrina de Valenta no coincide con la del eclesis tico alejandrino. Media entre ambas la distancia que entre el docetismo hereje y el somatismo ( = realismo carnai) eclesis tico. La idea de Clemente sera peregrina, y responde a una

imagen bastante imperfecta de la union (personal, no fisica) del Verbo con la carne.

Mientras Valentn falla por denegar uno de los elementos esenciales del compuesto, la carne; Clemente, por llevar la

union personal hasta las fronteras de la union fisica: corno si, fuera de todo intento pedaggico, la comunin (personal) del

Logos con la carne hubiera de manifestarse desde el principio fisicamente, con la infusin de las propiedades naturales del Verbo (v. gr. la incorrupcin) en la carne; sin respetar den tro de la economia del propio Salvador las leyes de la

paulatina maturacin del cuerpo, desde su indole inicial (fisi camente) imperfecta, basta la teleiotes definitiva, ganada me ritoriamente en la Pasin.

Por fortuna, Clemente apur mejor en otras ocasiones,

aplicando al cuerpo del Salvador, segiin la ideologia de la carta ad Hebraeos, el proceso de lo pasible a lo impasible.

A pesar de la apatheia del Logos, en cuanto dios42, no

por haber asumido la carne naturalmente pasible (oc ... - )43 la hizo sin mas impasible, sino que la fu educando en orden a la impasibi lidad ( )44.

Porque no se dej ver en lo que era a quienes, ,por la debilidad de la carne, eran incapaces de comprenderlo; sino que tornando una carne sensible vino a ensenar a los hombres lo (a ellos) asequible por (el camino de) la obediencia a sus preeeptos45.

Puntualicemos. Clemente rto pone reparo a las lineas (doc ticas) de Valentn, en Strom III 7,59.

EL HIJO DEL HOMBRE COME EBE 533

todo con l, xns bien, por la idea de que el Salvador no tenia personalmente hambre ni sed, corno ? Es claro, por eso segundo. Para la cristologia, y componentes fisicos del Salvador, mediaba una diferencia capital entre los eclesisticos y Valentn.

Doctrina eclesistica

Se presume la doctrina de los eclesisticos. Supuesta la real encarnacin del Logos, el corner y beber de Jesus no creaban dificultades.

El testamento de Aser anuncia la visitacin del Altisimo a la tierra:

Y El vendr corno hombre, condendo y bebiendo con los hombres ( )46.

S. Ignacio Antioqueno, combatiendo a docetas, urge la verdad de tales manifestaciones.

Jesucristo... naci realmente () y comi y bebi

( ); fu de veras perseguido bajo Pon

cio Pilato47.

en otra parte:

Yo por ami parte s bien sabido, y en elio pongo mi fe, que despus de su resurreccin, permaneci el Sefior en su carne.... Es mas, luego de resucitado, comi y bebi con ellos ( )

hombre de

carne corno era si bien estaba en espiritu hecho una cosa con su Padre48.

Cristo, por ser de veras hombre, lo mismo despus que antes

de resucitado, comi y bebi segun la carne. Ignacio ataca a

los docetas, entes de apariencia (Smyrn 2), urgiendo la resurrec

cin del Seflor en carne; e implicitamente, la vida y pasin

Suya, tambin carnales.

- Test. Aser 7,3. Trall 9,1. Smyrtt 3,1.3.

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E1 tacto denuncia ya bastante la materialidad del cuerpo resucitado19. Cristo apel a otro argomento.

' Comi y bebi con ellos ' ( ), dice Ignacio con una

energia superior an a la de Pedro en Act 10,40s50. Ningun eclesistico anterior a Ireneo cita expresamente

Mt ll.lSs (Le 7,33s). Entre los inmediatos a l, figuran Ter tuliano y Clemente.

E1 africano atiende a otras ideas. EI propio Senor, dds curre, calinnniado por comiin y bebedor, amigo de frecuentar comidas y cenas con publicanos y pecadores, nunca lo fu por ir a bodas. Solo a unas asisti no sin misterio , a las de Can.

Non enim aliud fuit Helias quam Joannes ' qui in vir

tute et spiritu venit Eleliae' (cf. Le 1,17); cum ' ille vo

rator et potator homo, prandiorum et caenarum cum pu blicanis et peccatoribus frequentator ', semel apud unas nuptias caenat multis utique nubentibus. Totiens enim voluit celebrare eas, quotiens et esse51.

Algo mas sugestivo y explicito Clemente:

' E1 que no come no menospreeie al que come; y el que

come no juzgue (mal) a quien no come, pues Dios le

49 Cf. Smyrn 3,2: Y asi, cuando se present a Pedro y sus com paneros, les dijo :

' Tocadme, palpadme y ved crno no soy un daimon

incorpreo Y al punto le tocaron y creyeron ... . Vase Lightfoot ad loc. Sobre el problema inherente al logion del Sefior redivivo, lti mamente mi Cristologia gnstica II (Madrid 1976) 516s. Es obvio que los docetas hayan invocado la cena del Cristo glorioso para negar la realidad de su carne. Cf. s. Agustn, ep. 102,2: deinde si post resurrec tionem status beatus futurus est nulla corporis iniuria, nulla necessitate famis, quid sibi vult cibatum fuisse Christum et vulnera monstravisse? sed si propter incredulum fecit, fnxit (fr. 92 ed. Harnack, Porphyrius Gegen die Christen p. 101). Vase la actitud de s. Jernimo (Contro Jo hattnem Hieros. 25-26 y sobre todo c. 34; adv. Joviniatt. 2,17), inspirado parcialmente en Tertuliano, de resurr. 4s y 60,4s. Cf. H. Chadwick, Ori gen, Celsus, and the Resurrection of the Body, en HThR 41 (1948) 83 102; Y.-M. Duval, Tertullien contre Origne sur la rsurrection de la chair datis le Contro Iohannem Hierosolymitanum, 23-36 de saint Jrme, en Revue des tud. August. 17 (1971) 264-266.

so ' A este le resucit Dios al tercer dia, e hizo la grada de que se manifestase visiblemente, no a todo el pueblo, sino a los testigos de antemano elegidos por Dios, a nosotros que con l comimos y bebimos

( ) despus de haber l resucitado de entre los muertos '. Cf. Le 24,30.35.42s; Io 21,12s.

91 De monogamia 8 fin. Tert. influy en Joviniano (ap. Jernimo, adv. lovin. 1,14).

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acogi ' (Rom 14,3) E1 propio Sefior hablando de si, dice

(Mt ll,18s; Le 7,33s): ' Vino Juan que no comia ni bebia,

y dicen: Demonio tiene. Vino el Hijo del hombre co ndendo y bebiendo, y dicen: Ved un hombre comiln y bebedor de vino, amigo de publicanos y pecador ( ) '


modo ausus est aliquis dicere neque manducasse eum, neque bibisse? Quae utique manifesta incredulitas est doctrinae ejus. Si autem manducabat et bibebat, et sub stantia vini atque escae in carnem ejus efficiebatur, sine dubio per omnes corporis ejus compages ac membrorum perplexiones diffundebatur. Spiritalem enim naturam sicut quidam de ejus corpore sentiunt, quod imperite satis et absurde faeiunt impossibile est vini atque escae recipere substantiam. Si vero quis indignas obsce nasque ad haec proferat inquisitiones, requirens si etiam digestiones in corpore febant, nihil absurdum videtur fa teri secimdum consequentiam naturae corporeae53. Si ve

ro etiam exemplis a nobis hoc exigant affirmari, osten dendum est dllos satis haec insipienter inquirere. Ubi enim ista vel de apostolis vel etiam de caeteris sanctis facta esse referuntur, vel etiam de impiis et peccatoribus, ex abundanti de eo requiritur54.

Origenes distingue, al parecer, entre los adversarios dos cla ses: a) quienes le hacian al Salvador corner y beber con en

gafio de los circunstantes {' decipiens vel fallens oculos vi dentium '); b) quienes le atribuian la cosa

' putative Unos

y otros le denegaban la manducacin y potacin material. Y

siempre, por razn del cuerpo ' espiritual

' (resp.

' psiquico ')55.

tEn qu se diferencian las dos clases de adversarios? Yo no lo veo elaro. Los primeros colocarian quizs el fraude

en los ojos de los oircunstantes: creerian ver ilusin pro ducida en su vista por Jess lo que el Salvador no hacia. Los segundos le colocarian en el cuerpo del Salvador, segn

explicacin anloga a la de Valentn 5,1.

Lo primero irla bien con algunos paralelos 57; el Salvador actuaria corno por magia. Lo segundo parece haber sido mas

53 Anlogo reparo presentaba Marcin para los fenmenos de la nor mal epifania humana, de Cristo: Tert., de carne Cti. 4. Fenmenos que a muchos gnsticos no arredraban. Vase mi Cristologia gnostica I.417s.

54 Ex Pamphilo, Apologia Origenis V resp. ad 4. PG 17, 586 A ss = PG 14, 1295 Dss. Ningn paralelo en s. Jernimo, ad Galatas.

ss Cf. ibid. PG 17, 587 A = PG 14, 12% C: Spiritale enim corpus quomodo poterai circumcidi ferro terreno?... Non minus autem angusta buntur etiam illi qui animale corpus dicunt esse corpus Christi . Vase mi Cristologia gnostica I (Madrid 1976) 452ss.

Cf. p. 527. 57 Cf. Iren II 21,2: In quibus ratio haec est: Hermes

' fraudulen tiae sive seductionis verba, et subinvolantes mores indidit eorum sensi bus ' (Hesiod., Erga 77) . Vase mi Antropologia de san Ireneo 134 n. 46.

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general entre gnsticos. Sin necesidad de fraudes mgicos, el Sefior -tornarla los manjares, igual que los circunstantes; de

jando a Su virtud divina eliminarlos sin menoscabo de la

propia incorruptela. Contra las dos clases de adversarios, hace valer Orgenes

el alcance obvio de los trminos evanglicos, sin arredrarse ante las consecuencias, que a Clemente parecieron alguna vez ridiculas58. Al corner y beber el Salvador, la substancia del vino y del manjar convertiase en Su carne, y difundiase a travs de las articulaoiones de Su cuerpo y rniembros. Asi mismo se cumplian los fenmenos correlativos, a que aludiera un dia Jesus (cf. Me 7,19; Mt 15,17). Holgaba curiosear sobre ellos ('ex abundanti de eo requiritur'), cuando, sin escndalo de tan escrupulosos exegetas, se dejaban sentir por igual entre

apstoles y santos, impios y pecadores.

San Ireneo

Merecerian la pena tan largos prolegmenos si Ireneo hu biera otorgado singular importancia a la exegesis de Mt 11,18s (Le 7,33s), al hecho de corner y beber Jess. Mas no hay eso. El Santo le da ,por obvio, tocndolo por via indirecta. Pero, corno en todo lo heterodoxamente capital, dej constancda de su pensamiento; y por haberlo hecho sin relieve literardo, hubo

que restituir el ambiente. El rgimen vegetariano, conferido por Dios al hombre en

el Paraiso, dur hasta el diluvio59. El Santo lo probaba con fundamento en Gen 9,1-6 y en una paradosis a que no eran

ajenos los Presbiteros del Asia.

Iren., adv. haer. II 32,3: Sed et si aliquid faciunt, per magicam

quemadmodum diximus operati, fraudulenter seducere nituntur insen satos . Alude a II 31,2.3.

158 Cf. arriba p. 530. 59 Cf. epid 22: Mas luego del diluvio concluy Dios un pacto de

alianza con el mundo entero, en particular con to'dos los animales y los hombres... Y cambi de alimento a los hombres, dandoles orden de corner carne, pues a partir de la primera creatura, Adn, hasta el di

luvio, los hombres se nutrian de solos granos y frutos de rboles; pero el alimento de carne no les estaba permitido . Otro tanto supone en adv. haer. V 33,4. Dijimos largo en la Antropologia de san Ireneo 389s; y ltimamente en Cristologia gnostica I.270ss {a propsito del gemido de la creacin: Rom 8,19ss).

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Los encratitas prolongaban eri cambio indefinidamente el

rgimen antediluviano, imponiendo siempre la abstinencia de carnes

EL HIJO DEL HOMBRE COME BB 539

de Dios. Marcin, y quiz Taciano, borro Le 22,18 (resp. los

paralelos)ei, consciente de su trascendencia. Ireneo se apoya en la promesa, entendida con singular

realismo, para urgir la indole de los tiempos del reino:

Propter hoc autem ad passionem veniens, ut evangelizaret Abrahae et iis qui oum eo, apertionem hereditatis, quum gratias egisset, tenens calicem, et bibisset ab eo et de* disset discipulis, dicebat eis (Mt 26,27ss): ...

' Dico autem vobis, a modo non bibam de generatione vitis huius, us que in diem illum quando illum bibam vobiscum novum in regno Patris mei '... Promisit bibere de generatione vitis cum suis discipulis: utrumque ostendens, et here ditatem terrae in qua ibibitur nova generatio vitis, et car nalem resurrectionem discipulorum eius. Quae enim nova resurgit caro, ipsa est quae et novum percepii poculum. Neque autem sursum in supercaelesti loco constitutus cum suis, -potest intelligi bibens vitis generationem; neque rursus sine carne sunt, qui bibunt illud: carnis enim pro prium est et non spiritus, qui ex vite accipitur potus65.

A la promesa de Jesus en el Cenculo hay que anadir la pro feria de Isaac a Jacob (Gen 27,28):

' Dios te d del rorio del cielo y de la fertilidad de la tierra, muchedumbre de trigo y de vino

Quemadmodum et Isaac continet benedictio, qua bene dixit filium minorem Iacob... et propterea addidit:

' Det tibi Deus de rore caeli et a fertilitate terrae, multitudinem tritici et vini '... Multitudinem autem tritici et vini quo modo hereditavit hic, qui propter famem factam in terra, in qua habitabat, in Aegyptum transmigravit, subiectus Pharaoni, qui tunc regnabat in Aegypto? Praedicta itaque benedictio ad tempora regni sine contradictione pertinet, quando regnabunt iusti surgentes a mortuis; quando et

creatura renovata et liberata multitudinem fructificabit tmiversae escae, ex rore caeli et ex fertilitate terrae...

Sigue luego la clsica cita de Papias, sobre las vides asom brosamente cargadas del Milenio67.

Cf. Bauer, Leben Jesu 166ss y 494. P. Lebeau, Le viti nouveau du

Royaume {Paris 1966) omite el problema. a V 33,1. 6 V 33,3. Cf. Barn. 5,7 y sobre todo Tert., adv. Marc. III, 24,7-9. 67 Vase la Antropologia de san Ireneo 388s.

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En los tiempos del remo nadie corner carne, pues tor nar el mundo a la condicin primigenia; las plantas volvern a su pristino vigor. Todos en cambio bebern el fiuto de la

vid, El vino correr abundante en la cena de Bodas. Y si asi entonces, tpor qu rehuir el sentido obvio de Mt ll,18s?

Aparte el argumento indirecto, est la cita expresa. El Santo utiliza una corta clusula (de Mt 11,19): 'Vino el Hijo del hombre comiendo y bebiendo

Ireneo descubre en ella el cumplimiento de una accin

proftica: la de las hijas de Lot. Al beber Lot hasta la embria

guez y caer dormido dando lugar a que sus hijas suscitaran semilla de l, prefigurbase el misterio del Hijo del hombre. El Verbo habia de conversar fiumanamente ' comiendo y bebiendo ' , y echarse a dormir ( = morir) dando lugar a

que sus dos hijas la Sinagoga y la Gentilidad suscitaran simiente de El. ,

Hoy se nos antoja fuerte semejante exegesis. No asi en los siglos primeros. Para en tender algunas desconcertantes ac ciones de los Justos del AT, habian formulado los Presbiteros corno axioma de exegesis la norma aquella:

En las cosas que la Escritura no reprende, sino simpie mente expone, no debemos hacernos acusadores pues no

somos ms exactos (' diligentiores ')68 que Dios ni pode mos superar al Maestro (cf. Mt 10,24; Le 6,40) sino in quirir la figura (= el alcance tipico); pues de cuantas cosas referen las Escrituras sin reprobarlas, ninguna so

braC!).

Lo mismo habia ensenado Ireneo, con igual recurso a un

Presbitero califcado70. A Celso el hecho de Lot (cf. C. Cels.

,is ' No tenemos mayor acribia Cf. IV 33,8 : ... quae pervenit usque ad nos custodita sine fictione Scripturarum tractatio pienissima, neque additamentum neque ablationem recipiens, et Iectio sine falsatione, et secundum Scripturas expositio legitima et diligens et sine periculo et sine blasphemia... .

69 IV 31,1 : De quibus autem Scripturae non increpant, sed simpli citer sunt posita, nos non debere fieri accusatores, non enim sumus diligentiores Deo, neque super magistrum possumus esse, sed typum quaerere: nihil enim otiosum est eorum quaecumque inaccusabilia po sita sunt in Scripturis .

Adv. haer. IV,27,1 (728,lss): Quemadmodum audivi a quodam presbytero, qui audierat ab his qui Apostolos viderant, et ab his qui di dicerant, sufficere veteribus de his quae sine Consilio Spiritus egerunt eam quae ex Scripturis esset correptionem ... Y mejor an en IV, 27,2 (742,110ss): Non debemus ergo, inquit file Senior, superbi esse neque

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IV, 45) ' mas abominable an que los crimenes de Tiestes

no le merecia estudio. Orgenes indica primero el camino de la alegora, y aborda enseguida sin salir de la letra el alcance del hecho.

A tal fin invoca la teoria estoica de las acciones indife rentes 71. ^Qu ocurriria si el Sabio (estoico) se hallara solo en el mundo, con su hija? ^podria unirsele deberia resignarse al exterminio de la especie72 humana?

Tal pudo ofrecrseles el caso a las hijas de Lot, noticiosas de la ruina de la Pentpolis y errneamente persuadidas de su absoluta soledad en el mundo. Lo que Orgenes apunta aqui (C. Cels. IV 45) con modestia y en hiptesis, habialo declarado afios antes con mayor decisin. Trascritas las palabras de las

hijas de Lot (Gen 19,31s), agregaba:

Apparet namque filias Lot didicisse quaedam de consum matione mundi, quae immineret per ignem, sed tanquam puellae non integre perfecteque didicerant; nescierunt quod Sodomiticis regionibus igne vastatis, multum adhuc spatii integrum resideret in mundo. Audierunt in fine saeculi terram et omnia elementa ignis ardore decoquen da. Videbant ignem, videbant sulphureas flammas, vide bant cuncta vastari. Matrem quoque suam videbant non esse salvatam, suspicatae sunt tale aliquid factum, quale in temporibus audierant Noe, et ob reparandam morta lium posteritatem solas se esse cum parente servatas. Recuperandi igitur fiumani generis desiderum sumunt,

atque instaurandi saeculi ex sese dandum opinantur exor

dium. Et quamvis grande eis crimen videretur furari con cubi tum patris, gravior eis tamen videbatur impietas, si humanae ut putabant posteritatis spem servata castitate

delerent. Propter hoc ergo consilium inexmt, minore ut ego arbitrar culpa, spe tamen argumentoque majore; pa tris imoestitiam vel rigorem vino molliunt et resolvunt.

reprehendere veteres, sed ipsi timere ne forte, post agnitionem Christi

agentes aliquid quod non placeat Deo, remissionem ultra non habeamus

delictorum, sed excludamur a regno ejus . Cf. Th. Zahn, Forschungen Z. NT. Kanons VI {Leipzig 1900) 64.

Que en C. Cels. IV 26 corno principio general habia condenado. 72 Orgenes ha visto formulado el caso en el Prtico, aunque falte

paratelo. Cf. svf III nr. 743. A la doctrina de los agregbase la obligacin de engendrar que incumbia al sabio. Cf. K. Praechter, Hierokles der Stoiker, (Leipzig 1901) 68ss 120ss; P. Wendland, Phiton und die kynisch-stoische Diatribe (Berlin 1895) 33ss; J. Kroll, Die Lehreri des Hermes Trismegistos (Munster i.W. 1914) 348s.

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Singulis ingressae noctibus, singulae suscipiunt ab igno rante conceptum; ultra non repetunt, non requirunt. Ubi

hic libidinis culpa, ubi incesti crimen arguito? Quomodo dabitur vitio, quod non iterato in facto?... Prosecuti sumus, ut potuimus, vel de culpis Lot ac fliamm ejus, vel rursum de excusationibus eorum73.

lgualmente habian excusado a las hijas Filn 74, y Josefo75. De Filn, y quiza mas directamente de Orgenes, paso la exe

gesis a san Ambrosio76. En respuesta a Celso, mitiga el Alejandrino su postura,

sin todavia modificarla; mas dispuesto a excusar la conduota

y propsito de ias hijas que la del padre.

S que algunos tropezaron (con escndalo) en este con sejo de las hijas de Lot (Gen 19,31s), y juzgaron nefando lo que hicieron, y que (por eso) segn ellos salieron de aquel comercio incestuoso las dos razas execrandas de los moabitas y amonitas. La Escritura divina no lo aprueba claramente en ningiin sitio, corno bien hecho; ni lo reprende y condena por mal hecho. Pero sea corno fuere, cabe explicarlo en sentido tropolgico, y tiene tam bin por si solo defensa77.

73 Origenes, Homil V in Gen 4: SCh 7bis pp. 170. 172. Quaest. in Gen. IV 56: Este consejo contra las costumbres ho

diernas del matrimonio es algo ilegal y una innovacin; pero tiene ex cusa. Porque estas doncellas, por su ignorancia de ajenas materias y porque habian visto incendiarse aquellas ciudades con sus habitantes todos, imaginaron que el gnero humano (habia sido destruido al mismo tiempo) en su integridad, y que no quedaba en parte alguna otro fuera de los tres. De donde, en la creencia (de manifestar) previsin (y) de que (la tierra) no podia ser devastada y permanecer yerma y tampoco el linaje humano podia ser destruido acometieron un acto audaz para sub venir a su falta de medios y dificultades .

'5 Antiqu. Jud. I 11,5. De Abraham I 4,24 y sobre todo I 6,56: Excusantur autem fliae

sancti Lot, quia putaverunt non vicinae regionis, sed totius orbis fuisse illud excidium, se solas cum patre superstites populis remansisse. Et ideo ne genus deficeret hominum, paternum petisse concubitum, ut se men generationis humanae de patre suo resuscitarent. Non ergo libi dinis vitium fuit, sed generationis remedium, quod non puto criminis duci loco . Algo parecido s. Jernimo (epla. 22,8) : Et licet (fliae Loth) putarent genus hominum deferisse et hoc facerent liberorum ma gis desiderio quam libidinis, tamen virum iustum sciebant hoc nisi ebrium non esse facturum; denique quid fecerit ignoravit: et quamquam vo luntas non sit in crimine, error in culpa est inde nascuntur Moabitae et Ammonitae... Anadir s. Crisstomo, Homil. 44 in Genesin; Teodoreto, quaest. 70 in Gen. (PG 80,180 AB).

77 C. Cels. IV 45.

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Orgenes se muestra rnenos indulgente con Lot. Le excusa de incesto, mas no de borrachera7S.

San Ireneo, siguiendo la linea y quiza las expresiones mis mas del Presbitero79, adopta para las hijas la postura de Filn, Josefo, Orgenes, s. Ambrosio y otros:

Illae quidem filiae secundum simplicitatem et innocen tiam putantes universos hoomines periisse, quemadmodum Sodomitas, et in universam terram iracundiam Dei su pervenisse, dicebant haec (Gen 19,31s). Quapropter et ipsae excusabiles sirnt, arbitrantes se solas reliotas cum patre suo ad conservationem generis humani, et propter hoc circumveniebant patrem80.

Pero a diferencia de Orgenes: a) excusa tambin, y en primer lugar, a Lot; b) por un motivo, comun al padre y a las hijas, a saber: el cumplimiento de una economia superi or (' dispen satio perficiebatur '), la consumacin de una figura {' consum mavit typum')

Uno y otras obedecian, sin entenderlo, a una dispensacin altisima. De ahi la inconsciencia de Lot en el acto; y la sim

plicidad ingenua de las hijas, inconscientes del misterio. Ireneo silencia el problema de la embriaguez. La Escri

tura no se la ech en cara. Ann ella servia a la dispensacin, y entraba en el acto misterioso, formando unidad con el suefio

y la concepcin. El Santo pues distinguia las dos partes del consejo to

rnado por las hijas, y las justificaba separadamente:

78 Cf. Homil V in Gen. 3: Post haec iam refertur illa famosissima fabula, in qua scribitur Alias ejus arte furatas concubitum patris. In quo nescio si qui potest excusare ita Lot, ut eum immunem faciat a peccato. Neque rursum ita eum accusandum puto, ut tam gravis incesti Aeri debeat reus. Non enim invenio eum insidiatimi esse, aut violenter eripuisse pudicitiam Aliarum, sed magis insidias passum, et arte cir

cumscriptum. Sed neque rursum circumventus fuisset a puellis, nisi ine briari potuisset. Unde videtur mihi in parte culpabilis, in parte excu sabilis inveniri. Excusari namque potest, quod a concupiscentiae et vo

luptatis crimine liber est, et quia neque ipse voluisse arguitur, neque volentibus consensisse. Subjacet vero culpae, quod decipi potuit, quod vino nimis indulsit, et hoc non semel, sed iterum fecit . Vase Filn, Quaest. in Genes. IV 56

7 Cf. IV 31,1 : Talia quaedam enarrans de antiquis presbyter reA ciebat nos et dicebat... IV 32,1 : Hujusmodi quoque de duobus Testa mentis Senior apostolorum discipulus disputabat... . Vase Th. Zahn, Forsch. z. Gesch. d. NT. Kanons VI (Leipzig 1900) 64ss.

so IV 31,2 (790,36ss).

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En primer lugar Gen 19,31: ' Dixit autem major ad mino

rem: Pater noster senior, et nemo est super terram qui intret ad nos, ut oportet omni terrae '81. Est primera parte la decla raba corno Josefo y Origenes. Las hijas se creen solas en el mundo, y tratan de perpetuar la especie.

En segundo lugar Ger 19,32: ' Veni, potionemus patrem

nostrum vino, et dormiamus cum eo, et suscitemus de patre nostro semen '82. Origenes no veia en esto nada de misterioso. Ireneo sita aqui el verdadero misterio de que son inconscientes las hijas (y el padre).

Abarca tres etapas: a) por parte de las hijas el hecho de

embriagar a Lot; por parte de ste, el de beber basta la em

briaguez.

b) el sueno de Lot.

e) la efusin del semen, por parte de Lot; las dos razas

(sinagogas) concebidas por las hijas. Las hijas tienen conciencia de los hechos sensibles: la em

briaguez, el sueno, y la efusin seminai de su padre. Lot nin

guna. Pero tanto las hijas corno Lot aqui viene el misterio de la economia consumado por todos ellos son inconscientes del alcance figurativo de las tres acciones.

La triple accin es proftica, y prefigura tres aspectos de la vida futura de Cristo: a) la existencia normal del Verbo, hecho carne, entre los hombres: caracterizada por Su eonvi

vencia ' comiendo y bebiendo (vino) ' entre publicanos y pe

cadores.

b) la muerte sueno del Verbo encarnado, al trmino de la vida entre los hombres.

c) la paternidad de Cristo a raiz de Su muerte, sobre los

hijos de ambas iglesias (judia y gentil). Lot seria siempre figura de Cristo. Sus hijas, de las dos

iglesias: la mayor, figura de la Iglesia de Israel; la menor, figura de la gentil. A est luz leamos las pginas de san Ireneo:

Etenim Lot non ex sua voluntate, neque ex sua concu

piscencia carnali, neque sensum neque cogitationem hu jusmodi operationis accipiens, consummavit typumS3.

si Segun IV 31,1 (790,31-33). 2 Ib. (790,33-35). ss IV 31,1 (788,18ss).

189.250.233.164 on Mon, 28 Apr 2014 23:02:28 PM

EL HIJO DEL HOMBRE COME BEBE S45

Cita a seguida, en confirmacin, Gen 19,33 y 3584, para con tinuar:

Nesciente igitur homine neque libidini serviente, dispen sano perficiebatur, per quam duae filiae, hoc est duae synagogae, ab imo et eodem patre {= Verbo) in sobolem adoptatae significabantur sine carnis libidine85.

Origenes se opone a la idea, parecidisima a la ireneana, de otorgar un alcance alegrico al hecho8


Si no mediara el misterio de la economia, ^qu necesidad habria de emborrachar primero al padre? Lo obvio hubiera sido actuar a piena luz, en piena conciencia. Ireneo insiste sobre lo involuntario e inconsciente del acto por parte de Lot, corno medio indispensable para el cumplimiento de la econo mia, para indicar la pureza de la doble generacin (de ambas

Iglesias) por Cristo. El misterio cristolgico prefigurado por la escena era, en ltima instancia, la adopcin limpisima (' sine carnis libidine ') para hijos (de Dios Padre), hecha por Jesu cristo a raiz de la muerte y resurreccin (suefio y desper tar) de entre los venidos de Israel y de la gentilidad.

La conciencia no (resp. la concupiscencia no) de las

hijas en el acto, no entra directamente en el misterio. Las

hijas, igual que las dos iglesias, actan pasivamente. Solo el

padre, en suefio, sin voluntad de carne ni voluntad de varn ni concupiscencia libidinosa, engendra del Espiritu con pureza hijos, sirvindose de las dos Iglesias impuras. El gran misterio est en Lot. Y apurando, en su nueva, no en su vieja pater nidad. En las generaciones nuevas, que tendr de las dos hijas, a raiz de su comunin con ellas. Las hijas pondrn la carne

(impura); l la simiente divina del Espiritu. Fruto de su co munin sern hijos adoptivos para Dios, engendrados no de la

sangre, ni de la carne, ni de la voluntad de varn, sino del

Espiritu divino, simiente del Padre 89.

Para evitar confusiones, conviene advertir una cosa ele

mental. San Ireneo aduce una exegesis alegrica, anterior a l, relativa a Lot. Si Lot es padre de las doncellas a que se ime, el hecho de la Escritura impone a la alegoria un minimo de fronteras. En su aplicacin a Cristo, le hace

' ipso facto

' padre;

al margen de otras consideraciones complementarias. Y le hace ' padre de dos hijas

' (resp. sinagogas). Ambas cosas, simple

mente, en virtud de la alegoria cristolgica. Es mas, corno Lot derrama su simiente en las hijas, tam

bin Cristo en sus sinagogas. Se impone pues la efusin de semen, por Cristo padre, sobre las dos sinagogas sus hijas.

s Cf. Orgenes, Homil IX in Levit. 2 (Baehrens 420,9s): PG 12,510 A: Sanctificata namque fuit tunica carnis Christi, non enim erat ex se mine viri concepta, sed ex sancto Spiritu generata... .

189.250.233.164 on Mon, 28 Apr 2014 23:02:28 PM


Se podr cuestionar sobre l origen de la alegoria cristo lgica de la comunin Lot/hijas: si naci v. gr. en atmsfera antimarcionita, en ambiente antignstico {antivalentiniano) en lucha con los judios. Lo que no cabe discutir es la exis tencia de la alegoria cristolgica, y por ende sus tres ele mentos fundamentales Cristo = padre, Sinagogas = hijas, co mercio Cristo/Sinagogas y efusin de semen por Cristo en la tradicin preireneana.

En su empefio por ballarle a Ireneo una fuente antimar cionita, desatiende Loofs tan elementales consideracionesm, y discute los puntos de coincidencia minima requeridos por la

aplicacin oristolgica. La paternidad de Cristo, premisa de la alegoria, no tiene

por qu explicarse con recurso a gnsticos 90, ni a nognsticos. En nuestro caso bastarla explicarlo por la id.entidad Lot = Cristo91. E1 Verbo era padre de judios y de gentiles, corno creador de los hombres; antes de toda comunin personal con la carne. Igual que Lot padre de sus dos hijas, antes de dormir con ellas 9Z.

Y asi corno Lot no era padre naturai de sus hijas por el nuevo semen, asi tampoco el Verbo de las dos sinagogas por la semilla derramada en ellas.

Fu menester previa la existencia de judios y gentiles creados por El una nueva efusin de semen, que hiciera de ambas sinagogas una nueva familia, la Iglesia nica de los hijos adoptivos de Dios. El cumplimiento ataja aqui la figura; que habria sido perfecta, si lejos de fundar Lot del ayunta miento con sus hijas las dos razas de amonitas y moabitas, hubiera fundado ima sola divina. He aqui el esquema:

Figura Cumplimiento

Lot Logos

hijas mayor menor hijas Israel Gentilidad Amonitas Moabitas Iglesia (de adopcin)

Theophilus voti Antiochien 103ss. Vase mi art. Ecclesia, sai terrae

segati san Ireneo, en RSR 60 (1972) 220ss. Loofs, Theophilus von Antiochien 106,2.

e1 Vase V. Grossi, Il titolo cristologico ' Padre ' nell'antichit cristia

na, en Augustinianum 16 (1976) 237-269. a2 Puede verse H. Lassiat, Promotion de Vhomme en Jsus-Christ

d'aprs Irne de Lyon (Tours 1974) 78 n. 11.

189.250.233.164 on Mon, 28 Apr 2014 23:02:28 PM


Es inconcebible que un hombre, de dos mujeres, tenga ini solo firuto. Lot fund dos familias, porque en cada una de sus hijas derram semilla distinta.

En cambio el Verbo encarnado, de dos iglesias sinago gas, tuvo un solo fruto, la familia nica de los hijos adoptivos del Padre. Razn: porque en ambas derram el nico semen del Padre, esto es, el nico Espiritu de Dios, de que es vehi culo el Logos, en cuanto hombre. En rigor, el Verbo encarnado

posee en si para comunicarlo el semen del Padre, el

Espiritu de Dios, mas no por eso es padre del semen paterno; de ilo contrario, engendraria hijos para Si, no para el Padre.

Depositario de tal semilla, el Logos-hombre la derrama a travs de Su humanidad (y a raiz de la resurreccin y ascensin) sobre las dos sinagogas (judia y gentil), elevndolas a la filia cin adoptiva del Padre. A raiz de su comunin con las dos

sinagogas, el Verbo (Cristo) no engendra para si hijos, sino

para ' el Dios Viviente ' ( = Dios Padre)93, hacindolos hijos

adoptivos de Dios Padre. La expresin semen Patris = Spiritus Dei podria llamar

a engafio. Igual que su correlativa Verbum Pater. Y lo mis mo aquellas otras: Vitale semen = Spiritus remissionis; Spiri tus Dei ( = creator, per quem facta sunt omnia) = Commixtus

carni y otras que se amontonan desusadamente en IV 31,2.

Tan abigarrada terminologia se explica por influjo tal vez del Presbitero a que alude IV 31,1. Mas no contradice al pensa miento del Santo.

Por semen patris {= Christi) = spiritus Dei entindese la natura divina del Verbo, en su doble eficacia genrica creadora94, y especifica santificante95 sobre los hombres.

Ireneo acenta la eficacia ltima; y la coloca implicitamente, a raiz de la muerte {= sueno) del Verbo, en la efusin de Pentecosts.

Spiritus Dei spiritus remissionis peccatorum, el trmino

importa poco. El sentido persevera. Representa sietmpre el

3 Iren., adv. haer. IV, 31,2


Espiriti! vital, infundido por el Verbo sobre los nuevos hijos, a raiz de Su muerte (y resurreccin), para remitirles los peca dos y elevarlos a la filiacin divina. Tales premisas iluminan la dificil pgina de san Ireneo:

El Verbo de Dios era padre del gnero humano, se gn lo manifest Moiss al decir {Deut 32,6): '^No es ste mismo tu Padre, (quien) te adquiri y te hizo y te cre? '96 ^Cundo pues derram ste en el gnero hu

mano la semilla vital, esto es, el Espiritu de remisin de los pecados, mediante el cual somos vivificados? ^No fu cuandq comia (' convescebatur ')97 entre los hombres

y bebia vino en (est) tierra = pues ' lleg dijo (Jesus,

en Mt 11,19; Le 7,34) el Hijo del hombre condendo

y bebiendo' = y cuando echado en tierra se durmi y cogi sueno, segiin lo afirma l mismo en David (Ps 3,6): ' Yo dormi y cogi sueio '? 98 Y prueba de que esto tenia

lugar para nuestra comunin y vida ", dice de nuevo (Jer 31,26 = LXX 38,26): mi sueno se me hizo suave'. Y todo era significano por Lot. Pues la simiente del Padre del universo, esto es, el Espiritu de Dios por cuyo medio fueron hechas todas las cosas 10, se omezcl

y uni a la carne, su plasma101. (Y) mediante esa mezcla

W Cf. Iren., adv. haer. IV, 10,2 (49647s); IV, 19,1 (476,5ss y 24ss). Loofs, Theophilus von Antiochien 106.

97 Segiin Iren. arm. E1 lat. ' conversabatur ' hace sentido, mas no

tan feliz. 98 Cf. Iren., adv. haer. IV, 33,13 (838,280s): Qui autem dixerunt eum

dormisse et somnum cepisse et resurrexisse quoniam Dominus suscepit eum... mas por extenso en Epid. 73. Vase s. Justino, dial 97, 1; 1 Apot 38,5; 1 Clem 26,2. No hay por qu recurrir a IQT para rela cionar Ps 3,6 con la muerte de Cristo (corno quiere Loofs, Theophilus von

Antiochien 107). 99 Esto es, para comunicarnos su espiiitu {= simiente) y vivificarnos

con l. Ir. lat. ' in nostra communicatione et vita Ir. arm. '

super no

strani communicationem et vitam '. Ireneo mira a la eficacia del suefio

(y resurreccin), y no al suefio mismo. A vista de ella, el suefio muerte

se le hace llevadero y aun dulce. Me aparto de la versin de Loofs (o. c.

205: als er mit uns Gemeischaft hatte und mit uns lebte ) y de Rous

seau (' dans une communion de vie avec nous '). 100 Puede verse R. Cantalamessa, La cristologia di Tertulliano (Fri

burgo Svizzera 1962) 49-51; L'omelia in S. Pascha dello ps. Ippolito di

Roma (1967) 174 n. 97. Y para semen Christi = Dei spiritus, los lugares citados por Loofs, o. c. 107 n. 6; V. Loi, Novaziano. La Trinit (Torino

1975) 290ss. 101 Cf. Iren III 19,1 (332,3ss) : Porque para eso se hizo hombre el

Verbo, e hijo del hombre el Hijo de Dios: para que el hombre, mezclado

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y unidad las dos sinagogas, esto es, las dos asambleas (del judaismo y de la gentilidad), fruotifican de su padre (el Verbo) hijos vivientes para Dios ( = el Padre) vivo (cf. Rom 7,4)102.

Inserta en tan hermosa perspectiva, iqu vale la clusola de Mt 11,19:

' El Hijo del hombre vino comiendo y bebiendo'? Vale conio sintesi de la vida humana del Verbo. Ya en

la figura (en Lot) tiene suma importancia el vino, corno medio

indispensable para el sueno. Discurrieron bien las hijas; su

padre tenia primero que beberle (hasta la embriaguez), para sucumbir al sueno; despierto no daba ocasin al ayuntamiento.

En el consejo de la economia divina, el Verbo (padre de ambas sinagogas) tenia primero que hacerse hombre, para con versar con ellos 'corner y beber vino (corno) Hijo del hombre ' y dormir el sueno de la muerte. Despierto corno

puro Verbo dios jams habria merecido derramar del

Cuerpo redivivo la semilla del Espiritu de adopcin, sobre

judios ni gentiles. ' El hecho de beber ' sintetizaba en figura la convivencia

del Verbo entre los hombres. Como ' el hecho de dormir ' vati cinaba la muerte del Verbo, a raiz de su vida entre los hombres.

Y al ' derramar el semen ' prefiguraba Lot la efusin del Espi ritu divino simiente del Padre entre las dos Iglesias judia y gentil, a raiz de la muerte del Verbo.

Apurando, Ireneo lleva el simil cristolgico de Lot a tres perfiles: a) beber vino, b) dormirse, c) con sueno dulce (des canso). No la embriaguez a que sigue un suefio pesado; sino la

al Verbo de Dios {' conmixtus Verbo Dei ') y recibiendo la adopcin (), se haga hijo de Dios.

102 IV 31,2 (792,45ss): Pater autem generis humani Verbum Dei, quemadmodum Moyses ostendit dicens (Deut 32,6):

' Nonne hic ipse Pater tuus possedit te, et fecit te, et creavit te?

' Quando igitur hic vitale se

men, hoc est Spiritimi remissionis peccatorum per quem vivificamur, effudit in humanum genus? Nonne tunc cum conversabatur cum homi nibus et bibebat vinum in terra ' venit enim, inquit (Mt 11,19; Le 7,34), Filius hominis manducane et bibens

' et cum recumbens obdor mivit et somnum cepit, quemadmodum ipse in David dicit (Ps 3,6): ' Ego dormivi et somnum cepi

' > Et quoniam in nostra communicatione et vita hoc agebatur, iterum ait (Jer):

' Et somnus meus suavis mihi factus est Totum autem significabatur per Lot, quoniam semen Patris omnium, hoc est Spiritus Dei, per quem facta sunt omnia, commixtus et unitus est carni, hoc est plasmati suo, per quam commixtionem et unitatem duae synagogae, id est duae congregationes, fructificant ex pa tre suo flios vivos vivo Deo (cf. Rotti 7,4).

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EL HIJO DEL HOMBKE COME BEBE 551

bebida que prepara un suefio confortante. Lo ltimo se perfila al orientar la dormicin (muerte) de Cristo

' in nostra(m) com municatione(m) et vita(m) para comunicarnos Su Espiiitu semen vital, no solamente en remisin de pecados, sino para adopcin. Mas alla de la muerte esprale a Cristo un despertar dulcisimo, el espectculo de la iglesia nica de los hijos adopti vos, fruto de la comunin del Verbo con nuestra carne impura, doblemente representada por la sinagoga judia y gentil.

Previa la igualdad Lot Verbo encarnado, Ireneo sintetiza el drama de la economia, en tres actos:

1) beber vino (Lot): ' convivir con los hombres' (Cristo);

2) dormirse (Lot): morir (Cristo);

3) sueno dulce (Lot): descanso (Cristo); = efusin del semen (Lot): efusin del Espiritu adoptivo

(Cristo). La resurreccin se menciona de manera implicita. Ni

Lot persever dormido, ni Cristo muerto. El sueno de Jess es suave por su eficacia inmediata sobre los hombres, venidos de la gentilidad y de Israel.

La ilacin entre el beber vino y dormirse se esconde en la que medi entre la Vida y muerte de Jess. El Verbo hecho hombre vivi corno sus hermanos ' condendo y bebiendo ', sin sustraerse a las leyes fisicas humanas. Por haber asumido natu raleza de 'comedor y bebedor' y no natura de ngel103,

superior a experiencias de carne y vino tuvo que morir

(' dormirse ') 10L

He ahi, en sintesis, la admirable cristologia compendiada por el Santo en torno a Mt 11,19 (Le 7,34).

Pero tal exegesis ^es de Ireneo del Presbitero (de IV 31,1 initio)? A mi juicio en lo substancial, viene del Presbitero105. La paridad con fragmentos poco anteriores parece demostrarlo.

Tambin en IV 30,1 hay un hecho, a primera vista reprobable el expolio de Egipto por los israelitas corno el de Lot;

los Sobre el estado de ' vigilia '

propio de Dios de los ngeles de

Dios, puede verse mi Antropologia de san Ireneo (Madrid 1969) 201ss. 104 El suefio, indispensable para la salud de los mortales (Arist., de

somn. 2,455 b 17ss), proviene del alimento (ibid. c. 3). El corner y beber, de un lado, y el suefio, de otro se corresponden corno la vida mortai y la muerte. Vase la nota 44 de Festugire, a CH 1,15 (p. 22).

los por tal la ofrece Routh, Reliquiae Sacrae I 55ss. Sobre el indi viduo aludido por Ireneo, vase Zahn, Forschungen VI 64ss. 90ss.

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y la misma fundamental justificante: el tipo cristolgico (resp. eclesial) a que Dios lo ordenabaim.

Buena parte de la hondura exegtica de Ireneo habr pues que retrotraerla a los presbiteros del Asia.

Conclusin

La ciencia tiene su lado cinegtico. Muchas veces sale uno a caza de trminos y exegesis prometedores, y vuelve sin nada.

Est vez me ocurri al revs. Habia elegido unos versos muy

poco citados, y me salieron al paso piezas de todos calibres aun dogmticos y de caracteristicas muy varias, Aparte elementos de critica text-ual, presumibles en Marcin y entre los encratitas (Taciano), se dej ver a propsito de unas cortas lineas de Valentn, en carta a Agatpodo

un asipecto

poco estudiado del docetismo. El Salvador, siempre que comia bebia, acababa con los manjares sin defecacin. A juzgar por un paratelo del Testamentum Abrahae (ree. A c. 4), le ocurria lo que a los ngeles de Mambre. Un espiritu devorador

( ) los consumia, sin dar lugar a que se le

corrompieran. Valentin interesaba probablemente, con catego ria de axioma, lo de Ps 16,10 muy repetido en los Hechos :

No dejars que tu Santo ( = el Salvador) vea la corrupcin . La divinidad, la continencia (resp. Espiritu de continencia) [Valentn], el espiritu devorador, el fuego interior [Testamen tum Abrahae, Macario Magnes], se adelantaban a las digestio nes vulgares, incompatibles con la indole de la substancia de Jess. Lejos de escandalizarse el alejandrino Clemente ante las lineas de Valentin (Strom III, 7,59,3), apunta por cuenta propia una solucin anloga (Strom VI, 9,71,ls), al atribuir a la ' virtud divina ' la eficacia continente ( = synctica:

) sobre el cuerpo de Jess. orienta, sin querer, hacia la ideologia de san Ireneo (adv. haer. V, 12,2), el gran adversario de Valentin. Segn Ireneo, la ineficacia del

' soplo

de vida ' para salvar el cuerpo humano de la muerte (y corrup

io6 iv 30,1: Qui vero exprobrant et imputant quod profecturus popu lus jussu Dei vascula omnis generis et vestimenta acceperit ab Aegyptiis et sic abierit, ex quibus et tabernaculum factum est in eremo, ignorantes justifieationes Dei et dispositiones ejus semetipsos arguunt, sicut et presby ter dicebat. Si enim non typica profectione hoc consensisset Deus, hodie in vera nostra profectione, hoc est in fide in qua sumus constituti, per quam de numero gentilium exempti sumus, nemo poterat salvari .

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cin), contrasta con la eficacia del ' Espiriti! vivificante obra

de Cristo, para la incorrupcin definitiva del hombre. En otros trminos, el mismo Espiritu de incorrupcin que,

segun los eolesisticos mas antidocetas, sostendr eternamente

el cueipo humano redivivo, actuaba ya en vida de Jesus: no sobre su cuerpo, sino sobre los manjares que introducia en l.

Tampoco es claro para darles vida eterna, sino para consumirlos a modo de fuego. El Salvador (de Valentn) se

comportaba antes de su muerte, igual que, entre eclesisticos, Jesus redivivo, al corner sin escrapulo cuanto le presentaban.

Otro punto de inters fu la exegesis de san Ireneo (adv. haer. IV, 31,2), inspirada en la tradicin de los presbiteros de

Asia, y basada en la aplicacin cristolgica de la escena (Gen 19,31ss) de Lot. Lot, emborrachado por sus hijas, se durmi, y en tal estado suscit descendencia. La analogia con Cristo y las dos iglesias (judia y gentil) afecta singularmente: a) al hecho material de beber vino, embriagarse, dormir, infundir simiente en las hijas: acciones todas

' corpreas ', solo aplica

bles al Verbo encarnado; b) a la relacin que media entre be ber vino, caer en suefio y suscitar semen: por su aplicacin a la vida terrena de Jess aqui Mt 11,19 y Le 7,34 , a la muerte (suefio), y a la efusin del Espiritu semen Patris

por Cristo glorioso. Ya desde su origen entre los presbiteros del Asia, la apli

cacin cristolgica de Gen 19,31ss acentuaba la efusin futura

del Espiritu (de adopcin) sobre las dos iglesias, judia y gentil, a raiz de los tres magnos misterios del Verbo: Encarnacin

( = beber vino), muerte ( = suefio) y resurreccin carnai. Fun dada en alegora Lot, figura de Cristo no pudo nacer normalmente en circulos antimarcionitas (contra Loofs): Mar cin impugnaba por igual el recurso al AT y a la exegesis aleg rica, a fin de prevenir toda aplicacin proftica de los hechos del AT al Salvador. Hubo de aparecer mas bien, en lucha con los gnsticos con docetas (no marcionitas). A tal fin: a) sal vaba la virtud e inocencia de Lot, con arreglo a una norma

general de benevolencia para los hechos no expresamente reprendidos por la Escritura; b) hacia valer, en su corporeidad, los actos para urgir la dimensin material de los tres grandes misterios de la vida del Salvador.

Ireneo mantuvo las lineas fundamentales de la exegesis

por l recibida de los presbiteros del Asia. Bastle subrayar

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la ilacin entre los hechos de Lot bebi vino para caer en suefio, cay en suefio para suscitar semen , y aplicarlos, con anloga ilacin, a los del Salvador: debi tornar carne

(y beber) para morir, debi morir para resucitar y suscitar semen (divino) en las dos iglesias humanas (judia y gentil), mediante su adopcin commi para hijas de Dios Padre.

Una vez mas, el peso fuerte ha recaido sobre san Ireneo

y su doctrina de la Salus carnis, secuela de la Encarnacin.

Antonio Orbe, S. I.

SUMMARY

Science can be like a hunt. Often one goes out to hunt prom

ising terms and exegesis, but returns empty-handed. This time, the opposite has happened. I had chosen some verses which are

stldom quoted, and carne across game of ali sizes even dog matic and with the most different characteristics. Apart from

elements of textual criticism, possibly in Marcion and among the

Encratites (Tatian), an aspect of docetism (relative to some brief lines from Valentinus in a letter to Agatopodus) was seen which had been only slightly studied. The Saviour, whenever he ate or

drank, finished the food without dejection. To judge from a parallel in the Testamentum Abrahae (ree. A c. 4), it was the same thing that would happen to the angels in Mambre. A devouring spirit

( ) would eat the food and thus prevent it from

spoiling. Valentinus was probably interested, as if it were an

axiomatic category, in what Ps 16,10 says in a verse often repeated in Acts: You shall not allow your Holy One (= the Saviour) to see corruption. The divinity, continence (resp. the Spirit of con

tinence) [Valentinus], the devouring spirit, the internai fire (Testa mentum Abrahae, Macarius the Great) acted before common di

gestion, something incompatible with Jesus' kind of substance. Far from being scandalized, Clement of Alexandria, seeing these

lines from Valentinus (Strom III, 7, 59, 3), proposes a similar solution of his own (Strom VI, 9, 71, ls), when he attributes to divine virtue the continent efficacy ( = synectic; ) over the body of Jesus. And he unwittingly leads towards the

ideology of Irenaeus (Adv. Haer. V, 12, 2), Valentinus' great enemy.

According to Irenaeus, the lack of efficacy in the breath of life

to save the human body from death (and corruption) contrasts with the efficacy of the life-giving Spirit , which is the work of Christ towards man's definitively incorrupt state.

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In other words, the same Spirit which, according to the most

antidocetic authors, will sustain the resurrected human body, was

already acting in the life of Jesus: not upon his body, but upon the food which he introduced into it. Of course, this was not to

give the food eternai life, but to consume it like a fire. The

Saviour (of Valentinus) behaved before his death in the same

manner as, according to the Antignosticism, the resurrected Jesus

ate without scruple everything that was presented to him.

Another point of interest was the exegesis of St. Irenaeus

(Adv. Haer. IV, 31, 2), inspired by the tradition from the Asian presbyters and based upon a christological application of an episode

involving Lot (Gen 19,31ff.). Lot, made drunk by his daughters, fell asleep and in that state generated his descendants. The analogy with Christ and the two churches (Jewish and Gentile) affects especially: a) the material fact of drinking wine, becoming in toxicated, sleeping, introducing semen into his daughters (actions which are corporeal and only applicable to the incarnate Word);

b) the relation between drinking wine, falling asleep and producing semen (through its application to the earthly life of Jesus [here Mt 11,19 and Lk 7,34], his death (sleep) and the effusion of the Spirit [semen Patris] by the glorious Christ).

Ever since its origins among the Asian presbyters, this ap

plication to Christ of Gen 19,31ff. emphasized the effusion of the

Spirit (of adoption) over the two churches (Jewish and Gentile), based upon the three great mysteries of the Word: the incarnation

(to drink wine), death (sleep) and the bodily resurrection. Based

upon the allegory (Lot as a figure of Christ), this application could not normally come up among antimarcionite circles (against

Loofs). Marcion objected equally to such use of the Old Testament

and of allegorical exegesis, in order to present the prophetic ap

plication of Old Testament episodes to the Saviour. This application must rather have appeared in the struggle against the Gnostics

or the Docetists (not Marcionites). For that purpose: a) the virtue

and innocence of Lot were saved, according to a general rule of

benevolence towards episodes not explicitly condemned by Scrip

ture; b) the actions were underlined in their materiality, in order

to urge the material dimension of the three great mysteries in

the Saviour's life. Irenaeus maintained the fundamental lines of the exegesis he

took from the Asian presbyters. It was enough for him to apply the episode of Lot to the Saviour's life: he had to take flesh (and

drink) in order to die; he had to die in order to rise and bring forth the [divine] semen for the two churches of mankind (Jewish

and Gentile) through their common adoption as daughters of God

the Father.

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El Hijo Del Hombre Come y Bebe (Mt 11,19; Lc 7,34)

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