Apócrifos, masoreticos, septuaginta y qumran

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ApcrifosDe Wikipedia, la enciclopedia libre Saltar a navegacin, bsqueda El trmino apcrifo (griego: ; latn: apcryphus; castellano: oculto) ha sido utilizado a travs de los tiempos para hacer referencia a algunas colecciones de textos y de escritos religiosos sagrados surgidos y emanados en contextos judos o cristianos, que no han sido incluidos en el canon del Tanaj judo hebreo-arameo, de la Biblia israelita Septuaginta griega, as como tampoco de ninguna de las distintas Biblias usadas por distintos grupos de cristianos.

Diferencia entre apcrifos y deuterocannicosCon este antecedente, es justo enfatizar que existen controversias muy antiguas entre los diferentes grupos confesionales al seno de la tradicin judeocristiana; dado que cada uno entre los principales grupos confesionales (cristianos ortodoxos, cristianos orientales cpticos eutiquianos, siracos nestorianos, etc., catlicos romanos, protestantes y otras tendencias) ha venido planteando a travs de los siglos algunas importantes diferencias con respecto del canon de los grupos restantes, y ha ido reservando el trmino de apcrifos para distintos grupos de textos y de escritos no incluidos en su propia versin del Canon bblico, aunque estn en la de otro u otros. Los representantes del protestantismo han llamado Apcrifos a los documentos Deuterocannicos (vase), que son reivindicados como parte integrante del canon por distintas iglesias cristianas ortodoxas, cristianas orientales y catlica romana. Y usan el trmino Pseudoepgrafos, escritos falsamente atribuidos, para hacer referencia al resto de los libros surgidos y emanados en contextos judos o cristianos y que, sin embargo, no han sido aceptados por ninguno de los grupos antes mencionados. El primero en usar el trmino en este sentido fue Jernimo de Estridn, en los escritos en que comenta la tarea que represent la traduccin al latn del texto bblico, a fin de designar a algunos de los libros que hoy son conocidos como deuterocannicos, que haban sido incluidos en la Biblia juda griega (canon alejandrino), llamada Biblia septuaginta, o Biblia de los LXX, aun cuando no aparecen en el Tanaj judo hebreo-arameo (Canon Palestinense), que fue redefinido por judos fariseos histricos y neotestamentarios, durante los trabajos del Snodo de Jamnia, en fecha tan tarda como el 95 d. C., y luego utilizada por las comunidades judas de los siglos posteriores. Jernimo ignoraba las grandes disensiones que esta aventurada decisin atraera con el tiempo entre las Cristiandades del Mundo Occidental.

Doce de estos libros: Tobit, Judit, el Resto de Ester, Baruc, la Epstola de Jeremas, la Historia de Susana, la Historia de Bel y el Dragn, el pasaje Daniel 3:24-90 (en el cual se contiene la Oracin de Azaras y el Himno de los tres Jvenes), Sabidura, Eclesistico, 1 Macabeos y 2 Macabeos, finalmente seran aceptados por los distintos grupos histricos cristianos (cristianos ortodoxos, cristianos orientales cpticos eutiquianos, siracos nestorianos, etc. y catlicos romanos). Otros de esos textos: el Captulo 151 del Libro de los Salmos de David (comnmente llamado Salmo 151), el Captulo 8 del Libro de las Odas, 3 Esdras y 3 Macabeos, as como el Eplogo Griego del Libro de Job, los Epgrafes Griegos de varios de los Salmos de David y el Epgrafe Griego del Captulo 1 del Libro de las Lamentaciones fueron recibidos como parte integrante del canon por todos esos grupos, excepto por la iglesia catlica romana. Todos estos escritos han sido ratificados por los escritos de muchos de los padres de la iglesia de oriente y occidente. Y, en el caso concreto de la iglesia latina, los doce documentos de la primera lista fueron legitimados por el Snodo de Roma, en el ao 380 d. C., y el Concilio de Hipona, en el ao 393 d. C. A pesar de lo cual, el trmino apcrifos volvi a ser aplicado a esos doce textos por Martn Lutero y otros reformadores protestantes del siglo XVI. A causa de lo cual, la iglesia occidental ratific su legitimacin durante los trabajos del Concilio de Trento en 1546. Algunos otros libros, incluidos en las Biblias Septuaginta (griega) y Peshitta (siraca), como 4 Esdras, 4 Macabeos, el Libro de las odas y el Libro de los Salmos de Salomn, pueden ser ledos entre los apndices de algunas importantes versiones y ediciones de la Biblia; como la Vulgata latina de Jernimo, la Biblia eslavnica de Ostrog, la Biblia sinodal rusa, la Biblia del oso de Reina (1569), la Biblia del cntaro de Valera (1602), la King James version (1611), la Revised standard version y la New revised standard version. Otros libros fueron vistos como textos sagrados e inspirados por comunidades judas marginadas, padres de la iglesia y grupos de cristianos, siendo rechazados como apcrifos ms tarde, o ms all de los contextos en los cuales ellos fueron acogidos:

La Peshitta siraca, la Biblia oficial de todas las iglesias Siracas Nestorianas (las Iglesias de Siria, Asiria, Caldea, el Asia Central, Armenia, el Turquestn, China y la India, de entre cuyas filas se separ Mahoma, y, en cuyo seguimiento, a su vez, el Islam musulmn), incluye en su Libro de los Salmos, adems del Salmo 151, los Salmos numerados 152, 153, 154 y 155, y la versin siraca a la Apocalipsis de Baruc. Los Beta Israel, antiguos habitantes de Etiopa, tenan como libros sagrados, adems del Sircida, el Libro de Enoc y el Libro de los Jubileos. Y la Iglesia Cristiana Ortodoxa de Etiopa incluye en su Biblia formas largas etopes de los libros de Enoc, los Jubileos, el Resto de palabras de Baruc, 1 Macabeos, 2 Macabeos y 3 Macabeos.

Estos documentos fueron rechazados por los fariseos de los siglos I y II, as como por los judos actuales y grupos protestantes y paraprotestantes de mltiples tendencias; pero conservados por los israelitas, por los judos de la dispersin y por los cristianismos

tempranos e histricos. Los judos actuales y los protestantes han llamado apcrifos, de manera sistemtica, a todos los escritos deuterocannicos, excluyndolos de sus propias versiones de la Biblia. Sin embargo, algunas de las Biblias protestantes ms importantes los han incluido. Se cita como ejemplos la Biblia de Lutero, la King James Version, la Revised Standard Version y la New Revised Standard Version. Casiodoro de Reina decidi incluirlos como parte integral del Antiguo testamento en la Biblia del oso, la primera edicin de la Reina-Valera, en el ao de 1569. Y Cipriano de Valera, su primer revisor y corrector de estilo, opt por reunirlos aparte, como un tercer grupo de textos intertestamentarios, entre el Antiguo y el Nuevo testamento, en la Biblia del Cntaro, de 1602. Sin embargo, a causa de confrontaciones de tipo ideolgico, fueron suprimidos en 1860 por Lorenzo Lucena Pedrosa. Pero en 2009 ha sido publicada en Espaa la Biblia del Siglo de Oro, que es una edicin actualizada del texto de Reina y Valera, con restitucin de nueve de sus doce Deuterocannicos.

Apcrifos del Nuevo testamentoEl trmino apcrifos, lejos de referirse a las consabidas acepciones adversas negativas que tiene, es una expresin que reviste otro carcter: se trata de textos cuyo acceso fue oculto, vedado, denegado ante las grandes masas de cristianos catlico-ortodoxos, escritos revestidos en un aura de magia y misticismo.[cita requerida] Se trata de otras palabras y enseanzas de Jess que fueron difundidas por siete de los doce discpulos de Cristo, de acuerdo con los textos del Nuevo testamento. En este slo han sido compilados documentos escritos por cinco de esos doce (Mateo, Juan, Santiago, Pedro y Judas el Tadeo). Se trata de escritos que alegan ser las enseanzas ocultas de los restantes apstoles y cuyo contenido no respalda muchas de las ideas mesinicas comnmente aceptadas por grupos de cristianos, y que fueron documentos tenidos en gran estimacin, e incluso revestidos de carcter sagrado por los cristianos gnsticos de los primeros siglos de la era cristiana. Se trata de enseanzas referentes a una forma distinta de lograr acceder a la vida del mundo perdurable, no como un don gratuito, por bienaventuranza, sino como un estado conquistado de una transcendencia metafsica basada en la renuncia cotidiana al mundo y los placeres de la carne.[cita requerida] Los apcrifos del Nuevo Testamento incluyen varios evangelios y vidas de los apstoles. Algunos de ellos fueron escritos evidentemente por autores gnsticos o miembros de otros grupos posteriormente definidos como herejes. Muchos de estos textos fueron descubiertos durante los siglos XIX y XX, generando una intensa oleada de especulaciones en torno a su importancia en los inicios del cristianismo entre los eruditos religiosos.[cita requerida] Si bien los protestantes, catlicos y, en general, los ortodoxos estn de acuerdo acerca de qu libros deben ser incluidos en el canon del Nuevo testamento, la Iglesia ortodoxa etope sola incluir las epstolas I y II de Clemente y al Pastor de Hermas. A su vez, otras iglesias como la Copta tenan en sus pasajes escritos que describan la niez de Jess.[cita requerida]

Lutero consideraba apcrifa a la epstola de Santiago, dudando y cuestionando su autora a manos de cualquiera de los dos apstoles llamados por el nombre de Santiago. Tambin porque la epstola contiene una declaracin que contradice aparentemente las enseanzas de Lutero de la salvacin slo por la fe: la "fe sin obras est muerta" (2:26). Lutero, en su propia edicin de la Biblia, degrad y releg al nivel de unos simples apndices la Epstola de Santiago y otros tres documentos, a saber: la Epstola a los Hebreos, la Epstola de Judas y el libro de Apocalipsis.[cita requerida] Posteriormente se incluyeron estos libros con el canon protestante en su Nuevo Testamento, pero los colocaron luego de esos libros. Por lo tanto, los libros del Nuevo Testamento luterano (al menos en alemn) estn ordenados en forma diferente a otras Biblias protestantes. Un libro apcrifo del Nuevo testamento bien conocido es el Evangelio de Toms, el nico texto completo que fue encontrado en la ciudad egipcia de Nag Hammadi en 1945. Otro evangelio propio de las corrientes gnsticas dentro del cristianismo de los primeros siglos, atribuido a Judas de Carioth, el Evangelio de Judas, gener expectativa entre los seguidores de estudios y cuestiones del judeocristianismo cuando fue rescatado, reconstruido y presentado en el ao 2006, en esfuerzo conjunto de Maecenas Foundation y National Geographic Society.[cita requerida] Han ejercido y ejercen un enorme influjo en la piedad e iconografa cristianas. Entre las tradiciones conservadas nicamente en los apcrifos, se cuentan los nombres de los padres de Mara, (Joaqun y Ana), el episodio de la Presentacin de la Virgen nia en el templo, el nmero y los nombres de los Reyes Magos (Melchor, Gaspar, Baltasar), y la presencia de un asno y un buey en el pesebre donde Mara dio a luz. All tambin se encuentran los nombres y las historias del Buen Ladrn (Dimas) y del Mal Ladrn (Gestas); la historia de Vernica (recogida inclusive en la devocin piadosa del Via Crucis, de tradicin catlica); el nombre de Longinos, el centurin que atraves el costado de Jess en la cruz; o la primera sugerencia explcita de la virginidad perpetua de Mara, que se encuentra en el Protoevangelio de Santiago. La fuerte presencia de esas tradiciones en la liturgia lleva con frecuencia a olvidar que ninguno de ellos ha sido incluido entre los Evangelios cannicos.[cita requerida]

Entre los textos apcrifos se cuentan numerosos Evangelios; entre ellos hay los que llevan nombres de personajes famosos de la iglesia primitiva a los que se atribuyen estos escritos, como el Evangelio de Toms, del cual se encontraron antiguas copias en copto, manuscritas por una comunidad de cristianos gnsticos; otros fueron titulados por el supuesto contenido de la obra (Evangelio de la Verdad), por su origen (evangelios atribuidos a Marcin, a Cerinto) o por el grupo al que estuvieron destinados (Evangelio de los Hebreos, de los Griegos, etc.). En el siglo XIX comenzaron a hacerse unos estudios a fondo sobre estos textos. Se hallaron escritos "apcrifos" desde el ao 300 a. C. hasta el Nuevo testamento, que proporcionaron a los investigadores una gran riqueza como fuentes histricas, as como posturas divergentes sobre temas como inmortalidad y resurreccin, y la creencia en ellos a travs de los siglos, desde un punto de vista siempre escatolgico.[cita requerida]

1. Introduccin. 2. El hallazgo en Nag Hammadi 3. Evangelios Apcrifos 4. Gnosticismo 5. Los Evangelios Apcrifos y el Gnosticismo 6. Anexo 7. Bibliografa 1. Introduccin. El presente trabajo trata de establecer las eventuales relaciones entre los evangelios llamados "apcrifos" y la tendencia filosfico religiosa conocida como gnosticismo. En la medida de lo posible, el objetivo es conservar la correspondencia entre ambos temas, para lo cual es necesario primero aclarar sus significados. Sin embargo, antes de hacerlo, no se puede obviar la importancia del descubrimiento en Nag Hammadi de textos gnsticos apcrifos, especialmente los Evangelios de Felipe y Toms, aunque no se dejan de lado otros documentos de gran valor, como los apcrifos perdidos o los fragmentos papirceos. La principal fuente de informacin y referencia es la edicin de Los Evangelios Apcrifos preparada por Aurelio de Santos Otero e impresa por la Biblioteca de Autores Cristianos. Al final, se presenta un anexo con el texto correspondiente a la IV Sesin del Concilio de Trento, celebrada el 8 de abril de 1546, donde se establece la lista definitiva de los evangelios cannicos. 2. El hallazgo en Nag Hammadi En diciembre de 1945, en un pueblo egipcio llamado Nag Hammadi (en rabe "Pueblo de Alabanza") unos campesinos hallaron cerca de mil pginas en papiro: 53 textos divididos en cdices, cuya antigedad se remonta probablemente hacia el Siglo IV d.C. Estaban enterrados junto al acantilado oriental en el alto valle del Ro Nilo. Se tratan de traducciones originales del griego al copto, que contienen evangelios (de Toms y Felipe), apocalipsis, tratados teolgicos y palabras atribuidas a Jess, de franca orientacin gnstica y considerados por la Iglesia Catlica como apcrifos. Lo que ahora se conoce como Nag Hammadi, se llamaba antes Xhnobockeion, donde en 320 d.C. San Pacomio haba fundado el primer monasterio Cristiano. En 367 d.C., el obispo Atanasios de Alejandra emiti un decreto prohibiendo las escrituras no aprobadas por la Iglesia central. Esto motiv a que algunos monjes locales copiaran unas 45 de esas escrituras, incluyendo las de Toms, Felipe y Valentn, en 13 volmenes encuadernados en cuero. Esta biblioteca entera fue sellada en una urna y escondida entre las piedras, por casi 1600 aos.

Sin embargo, no se consideran "evangelios" (los de Felipe y Toms) por varias razones. Por ejemplo, se dice que no fueron inspirados por Dios ni nacieron en comunidades cristianas, que no hablaban la lengua en que estn escritos (copta sahdica). Tampoco esas comunidades cristianas tuvieron consenso en considerarlos inspirados. Su origen, a juzgar por su contenido, se da en crculos gnsticos. En la actualidad, los escritos de Nag Hammadi tienen una gran vigencia que se extiende a varias ramas. No sera extrao que todava se estn haciendo traducciones o actualizando las ya hechas, pues la importancia de tal descubrimiento lo hace digno de un cuidadoso rigor cientfico. Por otra parte, ha sido fuente para el desarrollo de numerosas investigaciones y la produccin de cantidad de artculos, libros y hasta pelculas. 3. Evangelios Apcrifos La Biblia Catlica se divide en Nuevo y Antiguo Testamento, el cual a su vez se divide en Libros Protocannicos (39 libros en lengua hebrea, canonizados primero) y Libros Deuterocannicos (siete libros en lengua griega, literalmente significa "segundo canon"). El Antiguo Testamento tiene como base el texto masortico, autorizado por eruditos judos. Podra decirse que el principal criterio para calificar a un libro de apcrifo es considerar que carece de inspiracin divina. El primero en usar ese trmino fue San Jernimo, para referirse a los libros que llegaron a ser los deuterocannicos, cuando tradujo la Vulgata latina. Su origen es griego, generalmente traducido por "escondido" o "secreto". Cuando algunos apcrifos se incorporaron a la Septuaginta, los israelitas convocaron a un Concilio en Jamnia para analizarlos. Acordaron aceptar los que reunieran ciertas condiciones: concordancia con la ley mosaica, haberse escrito en Palestina y en hebreo, y antes de la muerte de Esdras, quien segn los hebreos fij bajo mandato divino la lista de libros cannicos del Antiguo Testamento. Debido a que esos libros, probablemente escritos entre 150 a.C. y 100 d.C. (por lo menos dos siglos despus de que muri Esdras), no reunan las condiciones establecidas, fueron separados de los otros. Del Nuevo Testamento, el primer intento de agrupar los libros dignos de ser integrados se da a finales del s. II y se conoce como fragmento de Muratori. Data aproximadamente de 170 - 180 d. C. y contena los cuatro Evangelios, el Apocalipsis de Juan, trece cartas de Pablo y Sabidura. Faltaba la Epstola a los Hebreos y las Epstolas de Pedro. Son numerosas las listas de libros considerados como revelados: de Melitn de Sardis (177 d.C.), Orgenes (230 d.C.), Atanasio (326 d.C.), Cirilo (348 d.C.), Hilario de Pointiers (358 d.C.), Concilio de Laodicea (363 d.C., que prohibi leer los libros apcrifos en las iglesias), Epifanio (368 d.C.), Gregorio Nacianceno (370 d.C.), Anfiloquio (380 d.C.), Rufino (395 d.C.) y Jernimo (395 d.C.). hay quienes dicen que en el Concilio de Hipona, en 393 d.C., convocado por el Papa Dmaso, es la primera afirmacin de la lista cannica. Pero es hasta el ao 1546, cuando tuvo lugar el Concilio de Trento, que en su cuarta sesin del 8 de abril de ese ao se fijaron definitivamente los libros cannicos y los apcrifos. Se

excluyeron de la vulgata tres de los diez que haba agregado: el tercero y el cuarto de Esdras y la Oracin de Manass. Los llamados Libros Cannicos son, por lo tanto, los que la Iglesia acepta como revelados por Dios. Benedicto P. XV, en su encclica Spiritus Paraclitus, dice: "Los Libros de la Sagrada Escritura (...) fueron compuestos bajo la inspiracin, o la sugestin, o la insinuacin, y an el dictado del Espritu Santo, ms todava, el mismo Espritu fue quien los redact y public." Esta misma encclica, se dice que Jess afirma la iluminacin divina en el escritor, donde Dios mueve su voluntad a escribir lo que ha de transmitirse a la humanidad. En el Segundo Concilio del Vaticano, en la Constitucin Dogmtica "Dei Verbum" sobre la Divina Revelacin, la Iglesia dice que por un acto de bondad y amor a la humanidad Dios ha decidido revelarse a s mismo y a su voluntad. Dios se ha manifestado a los Padres de la Iglesia para prometer la salvacin. Refirindose explcitamente al Nuevo testamento, la Constitucin sostiene que sus libros principales son los Cuatro Evangelios y que si origen es indudablemente apostlico, predicado por mandato de Cristo, inspirado por el Espritu Santo y trasmitido por escrito por los cuatro apstoles. Acepta la historicidad de los evangelios, pero afirma que son fieles a la vida de Cristo y que obedecen a una tradicin oral. Lo reitera la encclica Divino Afflante Spiritu, de Po P. XII en 1943. La Iglesia Catlica reitera su condena a los libros apcrifos. Po P. IX , en la Encclica Noscitis et nobiscum de 1849 ataca lo que denomina "lecturas emponzoadas" y privilegia la difusin de libros escritos por "hombres de sana y reconocida doctrina". 4. Gnosticismo Las races del gnosticismo podran remontarse a la inversin que del sistema platnico hace Filn de Alejandra en funcin del judasmo. En su planteamiento, Dios estara por encima del Logos y del mundo de las ideas. A esto habra de unirse el platonismo medio y la difusin de religiones mistricas, cuyo resultado sera un movimiento aristocrtico (explicable por darse en medios intelectuales) cuyo contenido estara plagado de imaginera cosmolgica y filosofa. Sus principales lneas son:

La trascendencia indudable de Dios, esto es, separado de toda forma de materia. La explicacin del mundo sensible por una complicada genealoga de seres que se encuentran entre la materia y el Dios del cual han emanado en decadencia. Los eones corresponden al mundo de las ideas platnicas, y se encuentran en un nivel inferior a Dios. La negatividad al respecto de la materia, que ocupa el menor grado en la sucesin de los seres. Introduce el mal y por eso no es creacin divina, al contrario, su origen est en el pecado de algn ser intermedio que viene a ser el Yav del Antiguo Testamento, el Dios semita. Para esto, el Dios verdadero envi a su hijo Jess para liberar a quienes creyeran en l y destruir el mal. Para Baslides, el cuerpo de Jess fue solamente aparente para manifestarse a los hombres, hubiera sido indigno para

su naturaleza un cuerpo material. Baslides, por ejemplo, sostiene que Cristo no sufri la pasin, el crucificado fue Simn Cireneo (quien le ayud a llevar la cruz) y luego Jess tom su forma y ascendi al cielo. En los apcrifos, por ejemplo en el Protoevangelio de Santiago y en general en los apcrifos de la natividad, se reitera la inmaterialidad de Cristo y abundan las imgenes de un Cristo vengativo y hostil con respecto a lo creado. La posicin de la Iglesia es muy clara. En el decreto Ad Gentes Divinus se dice: "...el hijo de Dios sigui los caminos de una verdadera encarnacin, para hacer a los hombres partcipes de la naturaleza divina (...) l tom la naturaleza humana ntegra, cual se encuentra en nosotros" La concepcin antropolgica dualista, es decir, la idea de que el hombre est compuesto de un principio malo, que es la materia, su cuerpo, y otro bueno, que es su espritu aprisionado en este mundo y que puede regresar a la regin superior de donde procede. La salvacin consiste en asimilar un conocimiento supuestamente oculto y que es revelado a ciertos escogidos. Esto es posible, no por Dios, sino por uno de los eones intermedios, es decir, Jess o Logos.

San Justino, San Ireneo y San Hiplito consideran que el gnosticismo aparece en Samaria con Simn de Gitton (h 40). En Hechos de los Apstoles aparece: Pero haba all un hombre llamado Simn, que antes haba practicado la brujera y que haba engaado a la gente de Samaria hacindose pasar por una persona importante (Hechos, 8, 9). Los versculos del 9 al 24 relatan que lo llamaban "el gran poder de Dios". Se convirti y quiso comprar la facultad de hacer milagros a San Juan y a San Pedro, este ltimo lo conden. A Simn se le atribuyen tendencias gnsticas, era considerado como una encarnacin divina y a su esposa Elena como la de su pensamiento. Hubo sectas consagradas a Elena, donde se despreciaba el judasmo y se privilegiaba la magia. Segn la explicacin de Fraile, tales ideas no pueden ser atribuidas con propiedad a Simn, ms bien, se quiso hacer de su figura una justificacin de los orgenes del gnosticismo. Tuvo por discpulo a Menandro de Capparetta (h 60 80). El auge del gnosticismo ocurre en el Siglo II. Aparecen en Siria Satornilo (h 98 160), Cerdn (s. II), discpulo de Valentn, y Marcin, discpulo de Cerdn. En Alejandra, Baslides (h 120 161), su hijo Isidoro y Carpcrates (h 130 160). En la regin itlica, aparece Valentn (s. II) y su pensamiento se difunde por su regin y por la oriental, a finales del Siglo II y principios del III. Probablemente, haya sido el gnstico ms influyente. Su pensamiento fue ampliamente difundido, por ejemplo, por Tolomeo (h 140) considerado como el autor de la principal composicin gnstica: Epstola a Flora, y Heraclen (h 145 180) quien le dio una exgesis de orientacin gnstica al Evangelio de San Juan. Tiene un marcado sentido elitista. Por ejemplo, se dice que hasta inventaron un lenguaje propio, resultado de una combinacin entre caracteres egipcios y griegos. En los Evangelios Apcrifos aparece con frecuencia la teora gnstica del docetismo, segn la cual el cuerpo de Cristo es puramente aparencial. La divinidad de Cristo no le permitira, por definicin, hacerse carne, su cuerpo no pasa de ser aparente. Su principal exponente es Marcin, contra quien Melitn, Obispo de Sardes, escribi Sobre la Encarnacin de Cristo. 5. Los Evangelios Apcrifos y el Gnosticismo

Durante el surgimiento de las primeras comunidades cristianas, hubo un inters popular por conocer detalles sobre la vida de Jess, esto motiv la aparicin de diversos relatos que no slo se limitaron a leyendas, sino a la difusin de tendencias gnsticas o maniqueas. Ejemplo de estos relatos son Pistis Sophia y el Libro de Juan. A su vez, escritores ortodoxos emplearon medios similares para defender el dogma. Fraile menciona a varios libros de carcter gnstico: Pistis Sopha, de origen copto que relata el esparcimiento de los apstoles por el mundo; Evangelios de Eva, Mara, Judas Iscariote, Toms, Matas, Felipe, Baslides, de los egipcios y de los doce apstoles (podra agregarse el de Marcin y el de Bartolom); Apocalipsis de Adn, Abraham, Moiss y Nicotea. El Fragmento de Muratori habla de un documento marcionita perdido llamado La carta a los alejandrinos. Apcrifos perdidos: Ente los perdidos, el ms antiguo que se conoce es el Evangelio de los Egipcios. Data del ao 150 y debe el nombre a sus lectores. Revela una concepcin gnstica del alma y condena el matrimonio, en particular la lascivia que despierta la mujer. Clemente Alejandrino, Orgenes y San Epifanio lo consideran hertico. Aunque parece no tener relacin con este, se sabe de un Evangelio de los Egipcios que forma parte de los 13 volmenes de Nag Hammadi. El Evangelio de los Doce es considerado por especialistas como idntico al Evangelio de los ebionitas, grupo gnstico que en dicho evangelio manipulan a su conveniencia el Evangelio de San Mateo, as como el relato de la vida de San Pedro. Algo similar ocurre con el Evangelio de Matas, que los seguidores de Baslides (y Clemente agrega a Valentn y Marcin), emplearon para respaldar su pensamiento. Por ejemplo, Matas aparece condenando duramente la carne. Segn Hiplito, Baslides deca haber escuchado de Matas discursos revelados por Dios. Epifanio menciona en Adversus haeres el libro gnstico apcrifo Preguntas de Mara, y al igual que Filastrio se refiere al Evangelio de la Perfeccin, quien resalta su carcter fantasioso. Otros evangelios pertenecientes a grupos menores son el Evangelio de los Cuatro Rincones (gnsticos simonistas, herejes que practicaban la magia); Evangelio de Judas Iscariote (gnsticos "cayanitas", condenados por San Ireneo); Evangelio de Eva (personaje destacado en el pensamiento ofita); Tres clases de frutos de la Vida Cristiana; Nacimiento de Mara. Por su parte, Baslides y Marcin tienen evangelios propios. El primero, trata principalmente de un compendio de ideas gnsticas del autor. Marcin, por su parte, lo que hizo fue eliminar cuanto elemento judo pudo del Nuevo Testamento. Se dice que este evangelio es recreado en el Evangelio de Apeles, su discpulo. Adems, Marcin influy en el Evangelio de los Adversarios de la Ley y de los Profetas, que San Agustn lo censura. Estos son los Evangelios Apcrifos Perdidos de carcter gnstico.

Fragmentos Papirceos: De los fragmentos papirceos, cabe mencionar especialmente el Fragmento Gnstico de Oxyrhynchus. Consiste en una supuesta conversacin de corte gnstico de Jess con sus discpulos. "el Seor de todo no es el Padre, sino el progenitor. Pues el Padre es principio solamente de las cosas futuras; mas el padre de l es Dios, el progenitor de todas las cosas desde su origen en adelante" Otro fragmento es el de la Logia de Oxyrhynchus, donde aparece en boca de Jess la teora gnstica de la ubicuidad. Tambin los Fragmentos Evanglicos Coptos tienen relacin, por ejemplo con el himno gnstico de los Hechos de Juan. Entre estos, los Papiros Coptos de Berln contienen tres evangelios de carcter gnstico: el Evangelio de Mara Magdalena, que confirma la tesis de que los textos coptos relacionada con el gnosticismo tiene un origen helnico; el Apcrifo de Juan, que contiene supuestas revelaciones celestiales hacia Juan para que l las haga llegar a sus discpulos; y la Sabidura de Jesucristo, de relatos cosmolgicos cuya posible influencia es de Valentn. Luego, en el Agrapha, libro que contiene diversas sentencias atribuidas a Jess y no incluidas en los cuatro evangelios, Jess dice en el Agrapha de origen Musulmn: "Dijo Jess (a quien Dios salude): Cmo va a ser contado entre los sabios el que, (despus de estar) andando por la senda que conduce a la vida futura, dirige sus pasos hacia la vida de este mundo?" Apcrifos de la Natividad: A diferencia de los anteriores, estos evangelios han llegado enteros a nosotros. Su finalidad comn es defender el honor de Mara. Entre ellos cabe destacar el Protoevangelio de Santiago y el Evangelio del Pseudo Mateo, este ltimo se supone que es una reelaboracin latina del otro. Tuvieron posteriormente una fuerte influencia. Se caracterizan por un uso de la imaginacin que por momentos pareciera excesivo. Es posible ubicar presencia del gnosticismo ofita, cuando Mara llega al sexto mes de embarazo y Jos lo ignora. En este momento, Jos, angustiado, piensa que al igual que Eva, Mara fue engaada y seducida por la serpiente. En el Protoevangelio, hay quienes sostienen influencia doctica, considerando el parto de Mara como medio para la manifestacin aparencial del cuerpo de Cristo. En todo caso, el norte de esta clase de libros relativos a la natividad es reiterar el carcter virginal de Mara, an despus del alumbramiento. Es particularmente dramtico el episodio de la partera y Salom, donde esta ltima examina la virginidad de Mara: "Por vida el Seor, mi Dios, que no creer tal cosa si no me es dado introducir mi dedo y examinar su naturaleza (...) Ay de m! Mi maldad y mi incredulidad tienen la culpa! Por tentar al Dios vivo se desprende de mi cuerpo mi mano carbonizada!"

La idea del parto virginal de Mara est ms presente en el Evangelio del Pseudo Mateo, empleado por maniqueos y priscilianistas. Se reitera en III, 3 y IX, 4 de dicho evangelio, y en Liber de Infantia Salvatoris, en los versculos 69, 75 y 76 . Adems, se le agrega la fecundacin, por intervencin divina, de Ana, esposa de Joaqun y madre de Mara, a pesar de su esterilidad. El ngel enviado por Dios le dice a Joaqun: "Sbete, pues, que Ana, tu mujer, va a darte a luz una hija, a quien t impondrs el nombre de Mara (...) y ya desde el vientre de su madre se ver llena del Espritu Santo. No comer ni beber cosa alguna impura ni pasar su vida entre el bullicio de la plebe..." Este prrafo particularmente muestra adems la condicin austera y aristocrtica del gnosticismo. Evangelio de Toms: El segundo de los trece cdices hallados en Nag Hammadi contena en los folios 33 al 51 el Evangelio segn Toms, en lengua copta sahdica. Su origen probablemente se remonta al s. II. Actualmente, se encuentra en el Museo Copto del Antiguo Cairo. Otras partes de la biblioteca descubierta se encuentran en el Instituto Jung de Zrich. Ms que evangelio, se trata de una compilacin de enseanzas atribuidas a Cristo y reveladas a Ddimo Judas Toms, quien las escribi dirigidas, a juzgar por su introduccin, a un sector docto capaz de darles la correcta interpretacin (esto es, a un sector gnstico). San Agustn afirma, en Contra epistulam quam vocant Fundamenti, que este escrito fue conocido por el gnstico Mani y posteriormente empleado por la secta maniquea, segn los relatos de Timoteo de Constantinopla (De receptione haereticorum) y Teodoro de Raithu (De Sectis), que tambin mencionan el Evangelio de Felipe. Se considera a Toms como autor de otros dos escritos gnsticos: Pistis Sophia y Actas Apcrifas de Toms. El sentido gnstico de este evangelio se ubica en la ambivalencia de ciertas expresiones, como las parbolas e imgenes: Dijo Jess: "Los fariseos y los escribas recibieron las llaves del conocimiento y las han escondido: ni ellos entraron, ni dejaron entrar a los que queran. Pero vosotros sed cautos como las serpientes y sencillos como las palomas. (Toms, 39) Evangelio de Felipe: Es un evangelio que la complejidad de su contenido lo hace ver dirigido a medios gnsticos capaces de interpretarlo. Su orientacin es valentiniana , pues reproduce la teora de la unin de principios a nivel csmico y cuyos resultados van degradando. Se distingue, adems, entre hombres poseedores y carentes de gnosis. Hay una curiosa aprobacin a ciertos tipos de sacramentos, por ejemplo, el de la redencin y el bautismo tienen un claro trasfondo gnstico.

Sirven de base para este evangelio los libros cannicos de Mateo y Juan y sus epstolas. En lnea con el gnosticismo, afirma su subordinacin con respecto a Dios y niega la corporeidad de Cristo. Jess los llev a todos a escondidas, pues no se manifest como era (de verdad), sino de manera que pudiera ser visto (...) por ello su Logos se mantuvo oculto a todos. (Felipe, 26) Evangelios de la Pasin y la Resurreccin: El Evangelio Apcrifo de Bartolom contiene relatos fantsticos y misteriosos, de influencia egipcio, y se preocupa de temas comunes a los gnsticos: descenso al infierno, encarnacin, etc. Los Evangelios Apcrifos han inspirado tradiciones e iconografas alrededor del tema de la Natividad. Por ejemplo, fue la base de La Roldana para "El descanso en la huida a Egipto" de 1691, que muestra la huida de la Sagrada Familia a Egipto. Pero atendiendo a la tradicin, la celebracin de la Navidad en diciembre se dice que los cannicos tomaron gran parte de informacin de los apcrifos. Detallan hechos especficos acerca del nacimiento de Cristo y factores que lo rodean. Por ejemplo, la llegada de los Tres Reyes Magos. Para esto, es fuente principal el Protoevangelio de Santiago. Actualmente, en Valencia, Espaa, se celebra La Festa o Misteri d'Elx, un drama cantado en valenciano, excepto algunos versos en latn, nico en el mundo y celebrado en la Baslica de Santa Mara y basado en los Evangelios Apcrifos. Tratan sobre la muerte, asuncin y coronacin de la Virgen Mara, y defiende su virginidad. Se compone de piezas medievales, renacentistas y barrocas. Surgi en el rea mediterrnea de Europa. Despus del Concilio de Trento las representaciones teatrales realizadas dentro de templos fueron prohibidas. El Misteri fue lo nico que qued gracias a una Bula emitida en la primera mitad del s. XVII. Tiene lugar los das 14 y 15 de agosto de cada ao, y al finalizar se reparten entre los asistentes hojas de palma bendita. 6. Anexo Concilio de trento Las sagradas escrituras Celebrada en 8 de abril de 1546 Decreto sobre las escrituras cannicas El sacrosanto, ecumnico y general Concilio de Trento, congregado legtimamente en el Espritu Santo y presidido de los mismos tres Legados de la Sede Apostlica, proponindose siempre por objeto, que exterminados los errores, se conserve en la Iglesia la misma pureza del Evangelio, que prometido antes en la divina Escritura por los Profetas, promulg primeramente por su propia boca. Jesucristo, hijo de Dios, y Seor nuestro, y mand despus a sus Apstoles que lo predicasen a toda criatura, como fuente de toda verdad conducente a nuestra salvacin, y regla de costumbres; considerando que esta verdad y disciplina estn contenidas en los libros escritos, y en las tradiciones no escritas, que recibidas de boca del mismo Cristo por los Apstoles, o enseadas por los mismos

Apstoles inspirados por el Espritu Santo, han llegado como de mano en mano hasta nosotros; siguiendo los ejemplos de los Padres catlicos, recibe y venera con igual afecto de piedad y reverencia, todos los libros del viejo y nuevo Testamento, pues Dios es el nico autor de ambos, as como las mencionadas tradiciones pertenecientes a la fe y a las costumbres, como que fueron dictadas verbalmente por Jesucristo, o por el Espritu Santo, y conservadas perpetuamente sin interrupcin en la Iglesia catlica. Resolvi adems unir a este decreto el ndice de los libros Cannicos, para que nadie pueda dudar cuales son los que reconoce este sagrado Concilio. Son pues los siguientes. Del antiguo Testamento, cinco de Moiss: es a saber, el Gnesis, el Exodo, el Levtico, los Nmeros, y el Deuteronomio; el de Josu; el de los Jueces; el de Ruth; los cuatro de los Reyes; dos del Paralipmenon; el primero de Esdras, y el segundo que llaman Nehemas; el de Tobas; Judith; Esther; Job; el Salterio de David de 150 salmos; los Proverbios; el Eclesiasts; el Cntico de los cnticos; el de la Sabidura; el Eclesistico; Isaas; Jeremas con Baruch; Ezequiel; Daniel; los doce Profetas menores, que son; Oseas; Joel; Amos; Abdas; Jons; Micheas; Nahum; Habacuc; Sofonas; Aggeo; Zacharas, y Malachas, y los dos de los Macabeos, que son primero y segundo. Del Testamento nuevo, los cuatro Evangelios; es a saber, segn san Mateo, san Marcos, san Lucas y san Juan; los hechos de los Apstoles, escritos por san Lucas Evangelista; catorce Epstolas escritas por san Pablo Apstol; a los Romanos; dos a los Corintios; a los Glatas; a los Efesios; a los Filipenses; a los Colosenses; dos a los de Tesalnica; dos a Timoteo; a Tito; a Philemon, y a los Hebreos; dos de san Pedro Apstol; tres de san Juan Apstol; una del Apstol Santiago; una del Apstol san Judas; y el Apocalipsis del Apstol san Juan. Si alguno, pues, no reconociere por sagrados y cannicos estos libros, enteros, con todas sus partes, como ha sido costumbre leerlos en la Iglesia catlica, y se hallan en la antigua versin latina llamada Vulgata; y despreciare a sabiendas y con nimo deliberado las mencionadas tradiciones, sea excomulgado. Queden, pues, todos entendidos del orden y mtodo con que despus de haber establecido la confesin de fe, ha de proceder el sagrado Concilio, y de que testimonios y auxilios se ha de servir principalmente para comprobar los dogmas y restablecer las costumbres en la Iglesia. Decreto sobre la edicin y uso de la sagrada escritura Considerando adems de esto el mismo sacrosanto Concilio, que se podr seguir mucha utilidad a la Iglesia de Dios, si se declara qu edicin de la sagrada Escritura se ha de tener por autntica entre todas las ediciones latinas que corren; establece y declara, que se tenga por tal en las lecciones pblicas, disputas, sermones y exposiciones, esta misma antigua edicin Vulgata, aprobada en la Iglesia por el largo uso de tantos siglos; y que ninguno, por ningn pretexto, se atreva o presuma desecharla. Decreta adems, con el fin de contener los ingenios insolentes, que ninguno fiado en su propia sabidura, se atreva a interpretar la misma sagrada Escritura en cosas pertenecientes a la fe, y a las costumbres que miran a la propagacin de la doctrina cristiana, violentando la sagrada Escritura para apoyar sus dictmenes, contra el sentido que le ha dado y da la santa madre Iglesia, a la que privativamente toca determinar el verdadero sentido, e interpretacin de las sagradas letras; ni tampoco contra el unnime consentimiento de los santos Padres, aunque en ningn tiempo se hayan de dar a luz estas interpretaciones. Los Ordinarios declaren los contraventores, y castguenlos con las pensas establecidas por el derecho. Y queriendo tambin, como es justo, poner freno en esta parte a los impresores, que ya sin moderacin alguna, y persuadidos a que les es permitido cuanto se les antoja, imprimen sin licencia de

los superiores eclesisticos la sagrada Escritura, notas sobre ella, y exposiciones indiferentemente de cualquiera autor, omitiendo muchas veces el lugar de la impresin, muchas fingindolo, y lo que es de mayor consecuencia, sin nombre de autor; y adems de esto, tienen de venta sin discernimiento y temerariamente semejantes libros impresos en otras partes; decreta y establece, que en adelante se imprima con la mayor enmienda que sea posible la sagrada Escritura, principalmente esta misma antigua edicin Vulgata; y que a nadie sea lcito imprimir ni procurar se imprima libro alguno de cosas sagradas, o pertenecientes a la religin, sin nombre de autor; ni venderlos en adelante, ni aun retenerlos en su casa, si primero no los examina y aprueba el Ordinario; so pena de excomunin, y de la multa establecida en el canon del ltimo concilio de Letran. Si los autores fueren Regulares, debern adems del examen y aprobacin mencionada, obtener licencia de sus superiores, despus que estos hayan revisto sus libros segn los estatutos prescritos en sus constituciones. Los que los comunican, o los publican manuscritos, sin que antes sean examinados y aprobados, queden sujetos a las mismas penas que los impresores. Y los que los tuvieren o leyeren, sean tenidos por autores, si no declaran los que lo hayan sido. Dese tambin por escrito la aprobacin de semejantes libros, y parezca esta autorizada al principio de ellos, sean manuscritos o sean impresos; y todo esto, es a saber, el examen y aprobacin se ha de hacer de gracia, para que as se apruebe lo que sea digno de aprobacin, y se repruebe lo que no la merezca. Adems de esto, queriendo el sagrado Concilio reprimir la temeridad con que se aplican y tuercen a cualquier asunto profano las palabras y sentencias de la sagrada Escritura; es a saber, a bufonadas, fbulas, vanidades, adulaciones, murmuraciones, supersticiones, impos y diablicos encantos, adivinaciones, suertes y libelos infamatorios; ordena y manda para extirpar esta irreverencia y menosprecio, que ninguno en adelante se atreva a valerse de modo alguno de palabras de la sagrada Escritura, para estos, ni semejantes abusos; que todas las personas que profanen y violenten de este modo la palabra divina, sean reprimidas por los Obispos con las penas de derecho, y a su arbitrio. Asignacin de la sesin siguiente Item establece y decreta este sacrosanto Concilio, que la prxima futura Sesin se ha de tener y celebrar en la feria quinta despus de la prxima sacratsima solemnidad de Pentecosts. 7. Bibliografa Altaner, Berthold. Patrologa. Espasa Calpe, Madrid, 1962. La Biblia. Sociedades Bblicas Unidas, 1979. Coleccin completa de Encclicas Pontificias 1830 1950. Preparada por las Facultades de Filosofa y Teologa de San Miguel, Repblica Argentina. Editorial Guadalupe, Buenos Aires, 1952. Documentos Completos del Vaticano II. Editorial Mensajero, Bilbao, 1974. Fraile, Guillermo. Historia de la Filosofa II. Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid, 1960. Puech, Henri Charles. En Torno a la Gnosis. Taurus Ediciones, Madrid, 1982. De Santos Otero, Aurelio. Los Evangelios Apcrifos. Dcima Edicin. Biblioteca de

Autores Cristianos, Madrid, 1999. Zernov, Nicolas. Cristianismo Oriental. Ediciones Guadarrama, Madrid, 1962.

Pregunta: "Qu son los libros Apcrifos o Deuterocannicos? Los libros Apcrifos o Deuterocannicos pertenecen a la Biblia?" Respuesta: Las Biblias Catlicas Romanas tienen muchos ms libros en el Antiguo Testamento que las Biblias Protestantes. Estos libros son conocidos como libros Apcrifos o Deuterocannicos. La palabra apcrifo significa escondido, mientras que la palabra deuterocannico significa segundo canon. Los apcrifos o deuterocannicos fueron escritos originalmente en el tiempo entre el Antiguo y el Nuevo Testamento. Los libros son llamados: 1 Esdras, 2 Esdras, Tobas, Judit, Sabidura de Salomn, Eclesistico, Baruc, la Carta a Jeremas, Oracin de Manases, 1 Macabeos, 2 Macabeos, y adiciones a los libros bblicos de Ester y Daniel. La nacin de Israel trat a los libros apcrifos o deuterocannicos con respeto, pero nunca los acept como libros verdaderos de la Biblia hebrea. La iglesia cristiana primitiva debati la situacin de los apcrifos o deuterocannicos, pero pocos cristianos primitivos creyeron que ellos pertenecieran al canon de la Escritura. El Nuevo Testamento cita al Antiguo Testamento cientos de veces, pero en ninguna parte cita o alude a cualquiera de los libros apcrifos o deuterocannicos. Ms an, hay muchos errores probados y contradicciones en los apcrifos o deuterocannicos. Los libros apcrifos o deuterocannicos ensean muchas cosas que no son verdad y tampoco son histricamente precisos. Si bien, muchos catlicos aceptaron previamente los apcrifos o deuterocannicos, la Iglesia Catlica Romana oficialmente los aadi a su Biblia en el Concilio de Trento a mediados del 1500 d.C. primordialmente en respuesta a la Reforma Protestante. Los apcrifos o deutoerocannicos, respaldan algunas de las cosas en que la Iglesia Catlica Romana cree y practica, las cuales no estn de acuerdo con la Biblia. Ejemplos de ello est en las oraciones por los muertos, peticiones a los santos en el Cielo por sus oraciones, adoracin a ngeles, y ofrenda de limosnas expiatorias por los pecados. Algunas cosas de las que dicen los apcrifos o deuterocannicos son verdaderas y correctas. Sin embargo, debido a los errores histricos y teolgicos, estos libros deben ser vistos como documentos histrica y religiosamente falibles, y no como la inspirada y autoritativa Palabra de Dios.

SeptuagintaLa Biblia griega, comnmente llamada Biblia Septuaginta, o Biblia de los Setenta y generalmente abreviada simplemente LXX fue traducida de textos hebreos y arameos ms antiguos que las posteriores series de ediciones que siglos ms tarde fueron asentadas en la forma actual del texto hebreo-arameo de la Tanaj o Biblia Hebrea. Representa una sntesis en que se subraya el monotesmo judo e israelita, as como el carcter universalista de su tica.[1] La Biblia Septuaginta fue el texto utilizado por las comunidades judas de todo el mundo antiguo ms all de Judea, y luego por la iglesia cristiana primitiva, de habla y cultura griega.[2] Junto con la Biblia Hebrea, constituye la base y la fuente del Antiguo Testamento de la gran mayora de las Biblias cristianas. Actualmente la iglesia Ortodoxa contina utilizando el orden y nmero de libros de la Septuaginta en su Antiguo Testamento.

EtimologaEl nombre de Septuaginta, se debe a que sola redondearse a 70 el nmero total de sus 72 presuntos traductores. La Carta de Aristeas presenta como un hecho histrico la leyenda en la cual, por instrucciones de Ptolomeo II Filadelfo (284-246 a.C.), monarca griego de Egipto, 72 sabios judos enviados por el Sumo sacerdote de Jerusaln, trabajaron por separado en la traduccin de los textos sagrados del pueblo judo. Segn la misma leyenda, la comparacin del trabajo de todos revel que los sabios haban coincidido en su trabajo de forma milagrosa. Sin embargo, al presente sabemos que uno de los criterios de autoridad ms frecuentemente implementados en esos contextos histrico-geogrficos, consista en atribuir a los textos sagrados algn supuesto origen que se pudiera remontar a hechos extraordinarios. Aunque en general se trataba de textos vertidos de lenguas semticas, (hebreo y arameo), algunos de estos escritos fueron redactados de forma originaria en lengua griega.[3] En general se piensa que la LXX habra sido formada con el objetivo de cultivar la fe de las comunidades de israelitas piadosos que vivan en la Dispora, y que se comunicaban en la lengua griega comn (koin). En aquella poca, resida en Alejandra una muy nutrida y numerosa comunidad de inmigrantes judos e israelitas. Sin embargo, dado que la orden habra provenido del rey Ptolomeo II Filadelfo, tambin es probable que el fin de la misma fuera proveer a la Biblioteca de Alejandra de una traduccin griega de las leyes judas.

Proceso formativoPara su formacin, la mayora de los escritos sagrados judos debieron ser vertidos a una lengua distinta al de sus originales hebreos y arameos, (o de ser necesario, al griego). Su redaccin inici en el Siglo III a.C. (c. 280 a.C.), y concluy a finales del (c. 200 a.C.). El Libro de la Ley, Tor o Pentateuco, habra sido traducido en esa misma poca, y el resto del trabajo se complet en las dos o tres siglos siguientes. El filsofo judo Aristbulo,

quien vivi en Alejandra durante el reinado de Ptolomeo VI Filometor (181-145 a.C.), confirma este dato al referirse a ella en una carta al rey en los siguientes trminos: [...] la completa traduccin de todos los Libros de la Ley (el Pentateuco), en los tiempos del rey Filadelfo, ancestro vuestro [...] Aunque no se conoce exactamente la fecha y el lugar de estas traducciones, los estudiosos proponen que una escuela de traductores se ocup de verter el Libro de los Salmos de David, en Alejandra, hacia el ao 185 a.C. Ms tarde tradujeron los Libros de Ezequiel y Jeremas, as como el Dodecaprofetn, o Libro de los XII Profetas [Menores]. Ms tarde tradujeron los escritos histricos: (Josu, Jueces y Reyes), y, luego, finalmente, el Libro de Isaas. El Libro de Daniel fue traducido alrededor del ao 150 a.C.. Algunos eruditos sitan en Palestina, durante el Siglo I de la Era Cristiana, la traduccin al griego de los libros de Ester, Rut, Eclesiasts, Lamentaciones, y el Cantar de los Cantares, acaso por Aquila. Los escritos y textos hebreos y arameos, que sirvieron de base para la formacin de la Biblia Septuaginta, carecan de gramemas dotados de valores fonticos vocales, capitalizacin (alternancia maysculas/minsculas), signos de puntuacin y acentuacin, algunos ciertos tipos de conectores lgicos, y algunas conjunciones, artculos, prefijos y sufijos adverbiales y/o preposicionales. (Ms tarde, se agregaron al idioma hebreo algunos signos con valores fonticos voclicos, surgiendo as el llamado Texto Masortico.) Estos antecedentes podran contribuir a explicar algunas diferencias interpretativas entre la Biblia griega de los LXX y el texto hebreo-arameo conocido, y el hecho de que algn tiempo despus, en ambientes judos, algunos revisores hubieran procedido a tratar de corregir la Biblia alejandrina a fin de asimilarla a este ltimo. Esta compilacin de textos y de escritos sagrados judos traducidos al griego fue, desde un principio, bastante socorrida para ilustrar la fe de las comunidades judas e israelitas de la Dispora, permitiendo el acceso a los textos sagrados de sus padres y ancestros a las comunidades de israelitas piadosos que no hablaban hebreo, ni arameo. Y hay algunos indicios que sugieren que Cristo y sus discpulos habran utilizado la Septuaginta; tal como se desprende del hecho fcilmente comprobable de que la mayora de las citas explcitas del Viejo Testamento en el Nuevo Testamento reproducen el texto de la Versin LXX, y solamente una de cada siete citas ha sido retomada del Texto Masortico.

El "Plus de los LXX"La Biblia Septuaginta contiene los 24 (o 39) libros que conforman el Canon de la Tanaj judo hebreo-arameo, los cuales constituyen los textos ms comnmente aceptados del Antiguo Testamento de las Biblias cristianas (catlica, ortodoxa, protestante, etc.). En adicin a ellos, la Biblia Septuaginta incluye otros, los cuales no son parte de la Biblia Hebrea, pero que son reconocidos como textos de inspiracin divina por las Iglesias cristianas ortodoxas calcedonianas y en algunos casos por las iglesias pre calcedonianas. La Iglesia catlica romana reconoce estos libros como "deuterocannicos", es decir , como dignos de ser ledos pero no como textos con autoridad dogmtica. El nico libro presente

en la LXX que -por influencia de Jernimo- no es reconocido por la Iglesia catlica romana como deuterocannico es el Primer libro de Esdras, llamado en la Vulgata III Esdras Dichas series de textos, algunos de los cuales fueron redactados de forma original en lengua griega, hoy son reconocidas y agrupadas por mltiples autores bajo el nombre conjunto de Plus de los LXX, o de la Septuaginta. Para efectos de estudio, en las siguientes lneas se ha desarrollado de forma detallada un listado muy primario de estos documentos:1. El Libro III de Esdras[4] [5] [E] 2. El Libro de Tobit en algunas versiones llamado Libro de Tobas [EW] 3. El Libro de Judit [EW] 4. El Libro de la Sabidura de Salomn [EW] 5. El Libro de la Sabidura en algunas versiones llamado Libro de Sircides, o bien, del Sircida, o Eclesistico, junto a su respectivo Prlogo del traductor griego (Captulo 1a)[6] [EW] 6. El Libro de Baruc propiamente dicho (Baruc 1:15'5:9), junto a su respectivo Exordio (Baruc 1:1-15') [EW] 7. La Epstola de Jeremas nomenclaturada, en la Biblia Latina, Captulo 6 del Libro de Baruc, junto a su respectivo Epgrafe (Verso 1a, 1bis) [EW] 8. Los Libros I y II de los Macabeos [EW] 9. Los Libros III y IV de los Macabeos [E] 10.El Libro de las Odas; que incluye la Oracin de Manass [E] y el Himno Matutino [F], y otros 13 textos [F] retomados de otros libros bblicos cannicos, junto con sus epgrafes [F] 11.El Libro de los Salmos de Salomn, junto con sus Epgrafes [F] 12.Numerosas variantes aditivas, substractivas y ordinales a varios de los libros protocannicos del Antiguo Testamento, ms o menos mayores en el caso del texto de los Libros de Samuel, los Reyes, Ester, Job, los Salmos de David, los Proverbios, Isaas, Jeremas, y las Lamentaciones [EH]

Entre estas variantes se destacan, de manera especial:1. Variantes aditivas, substractivas y/o substitutivas mayores consistentes al Libro de Ester comnmente agrupadas bajo el nombre conjunto de Resto de Ester, junto a su respectivo Colofn (Ester 10:3l, 10:14) [EW] 2. El Resto del Eplogo al Libro de Job (Job 42:17a-17e, 42:18-22) [E] 3. Varios de los Epgrafes propios de los Captulos del Libro de los Salmos de David[7] [E] 4. El Captulo 151 del Libro de los Salmos de David comn y familiarmente llamado Salmo 151, junto a su respectivo Epgrafe (Salmos 151:1a) [E] 5. El Introito del Libro de las Lamentaciones (Lamentaciones 1:1a) [E] 6. El texto griego antiguo, OG,[8] del Libro de Daniel, conteniendo variantes aditivas, substractivas y ordinales ms o menos mayores a varios de los textos, pasajes y captulos de dicho documento [FH]

Entre estas variantes se destacan, de forma peculiarmente especial:1. El texto griego antiguo, OG, del pasaje Daniel 3:24bis-90; que incluye la Oracin de Azaras y el Himno de los 3 Jvenes, junto a sus respectivas Notas complementarias [EWT] 2. El texto griego antiguo, OG, de la Historia de Susana nomenclaturada, en la Biblia Latina, Captulo 13 del Libro de Daniel, junto a su respectivo Eplogo (Verso 63 OG, segn el numeral de Alfred Rahlfs) [EWT] 3. El texto griego antiguo, OG, de la Historia de Bel y el Dragn nomenclaturada, en la Biblia Latina, Captulo 14 del Libro de Daniel, junto a su respectivo Epgrafe (Verso 1 OG, segn el numeral de Alfred Rahlfs) [EWT]

Algunos importantes manuscritos de la Biblia Septuaginta incluyen, as mismo, las partes y pasajes propios del texto griego conocido de:1. 2. 3. 4. El Libro de Enoc [F] El Libro de los Jubileos [F] Las Apocalipsis de Baruc [F] Los Paralipmenos de Baruc [F]

Algunas breves siglas:

[F] Incluido completo en los Cdices de la Biblia LXX, aunque no recibido de forma consensual por todas las Iglesias Cristianas Ortodoxas, las cuales representan la forma consensual ms extensa del Canon. Algunos de estos textos han sido recibidos por algunas de ellas, y/o tambin por algunas Iglesias Orientales Siraco-Nestorianas y/o Cptico-Eutiquianas [E] Incluido completo en el Canon Amplio Oriental del Antiguo Testamento, seguido por las Biblias propias de las iglesias cristianas ortodoxas, y de las iglesias cristianas orientales [W] Incluido completo en el Canon Amplio Occidental del Antiguo Testamento, seguido por las Biblias propias de la iglesia catlica latina occidental [H] Excepto en los casos anteriormente indicados, comnmente se sigue el Texto Hebreo-Arameo [T] Incluso en los casos anteriormente indicados, comnmente se sigue la Edicin Griega de Teodocin

Los libros de estas series son algo ms tardos que el resto de los libros del Antiguo Testamento, y algo ms tempranos que los escritos propios del Nuevo Testamento; por lo cual representan cierta continuidad lgica y necesaria, y suplen las lagunas culturales de otra forma existentes entre ambos Testamentos. De la misma manera, algunos de estos

textos representan creencias y valores ancestrales de tribus israelitas no judas, es decir, que existieron fuera del judasmo de Jud, o Judea.

Historia del textoLos manuscritos ms antiguos de los LXX conocidos hasta ahora, son fragmentos del Siglo II a.C. del Levtico y el Deuteronomio (Rahlfs, Nms. 801, 819, y 957), y fragmentos del Siglo I a.C. del Gnesis, xodo, Levtico, Nmeros, Deuteronomio y los profetas menores (Rahlfs, Nms. 802, 803, 805, 848, 942, y 943). En Qumrn fueron hallados rollos con fragmentos griegos de xodo (7Q1), Levtico (4Q119-120), Nmeros (4Q121), y Deuteronomio (4Q120,122); as como porciones de algunos de los libros deuterocannicos: las dos terceras partes de Sircides (Gruta 2), porciones de Tobas (Gruta 4), de Baruc (Gruta 7), de la Epstola de Jeremas (7Q2), y, muy probablemente, de Susana (4Q551). Al realizar el trabajo filolgico, se observan variaciones importantes entre los documentos encontrados. Durante muchos siglos, los estudiosos bblicos pensaron que todas las variantes textuales y estilsticas entre la Septuaginta y la Tanaj tan slo eran producto de malas traducciones, del desconocimiento cabal de la Tanaj, de errores de copistas, o incluso de la falta de inters en la fidelidad al texto hebreo-arameo. Sin embargo, cuando a partir de los descubrimientos de Qumrn los estudiosos finalmente tuvieron a su alcance los rollos manuscritos del Mar Muerto, pudieron darse cuenta de que las variaciones propias de la Septuaginta se hallaban reflejadas tambin en manuscritos hebreos y arameos bastante ms antiguos que las formas actuales de la Tanaj juda; las cuales se derivan del texto masortico, que data de los Siglos IV al VIII de la Era Cristiana. Una lectura atenta de los Cdices griegos revela que los textos asentados en la Biblia LXX representan fielmente, con certeza total, textos en un estado "primitivo", carente de un estilo pulido y acabado, mucho ms primario y primigenio, que el actual texto hebreoarameo masortico, bastante ms pulido y editado en el curso de los siglos posteriores. Y tales diferencias se perciben de un modo sumamente especial en libros que presentan variantes consistentes en el orden de versos, ideas inacabadas o faltas de pulido, presentes en la versin LXX de los Libros de Samuel, Reyes, Ester, Job, Proverbios, Isaas, Jeremas, Lamentaciones, y Daniel. El actual texto hebreo-arameo masortico refleja numerosas correcciones en trminos de estilo, que incluyen variaciones en el orden de numerosos versos y pasajes, y redondeo de ideas que no haban sido asentadas de forma digerida, correcta o elegante en los antiguos textos hebreos y arameos premasorticos, de donde fue tomada, de forma ms temprana, la Biblia Septuaginta. Ante las controversias suscitadas en torno de estos hechos, algunos estudiosos sealan que, en numerosos casos, en Qumrn se han hallado manuscritos hebreos que avalan la versin griega de los LXX, y otros que respaldan al texto masortico. Se ha determinado finalmente, que aquellos manuscritos que avalan la Septuaginta son mucho ms antiguos que aquellos que respaldan al texto masortico.[9]

Hacia fines del Siglo I, y principios del Siglo II, el judo Teodocin hizo una revisin de la LXX, tratando en lo posible de hacerla coincidir con los textos hebreo-arameos con ciertas ediciones propias de esa poca, los cuales hoy se llaman los protomasorticos debido a que de ellos se derivan los textos masorticos de siglos subsecuentes, los cuales ya incluan algunas importantes revisiones tempranas de grupos de rabinos de esos siglos. Entre 123 d.C. y 130 d.C., Aquila de Sinope hizo una nueva traduccin, siguiendo textos hebreos de manera literal. Smaco hizo una nueva traduccin hacia el 170 d.C., en la que buscaba mejorar la calidad de la redaccin griega.[10] Hasta ese momento, todava los libros ms tarde compilados bajo el trmino Biblia solan circular por separado. En el Siglo III, Orgenes compuso la Hexapla, en donde compara en forma de columnas seis versiones enteras del Antiguo Testamento, la quinta de las cuales corresponde a la Septuaginta. A partir de la sta, y tras cotejarla con nuevas traducciones, Orgenes edit una versin completa, en la cual indic las diferencias con el texto masortico hebreo-arameo, llenando los pasajes omitidos de forma primigenia con textos procedentes de la edicin tarda (del Siglo II) del judo Teodocin.[10] Aunque la Hexapla como conjunto se perdi, se conservan fragmentos importantes. Otras ediciones de la Septuaginta, han sido atribuidas a Hesiquio de Jerusaln y a Luciano de Antioqua.[11] No existen manuscritos completos de la Versin LXX. Pero existen al menos tres grandes manuscritos que incluyen la Versin de los LXX del Antiguo Testamento junto a los textos griegos del Nuevo Testamento. En base a esto, actualmente no se considera a la Biblia Septuaginta como un cuerpo de textos sagrados judos; sino, en sentido propio, como la coleccin de textos sagrados israelitas, que grupos de cristianos de los primeros siglos hicieron el Antiguo Testamento de sus Biblias cristianas. Dicho de otra manera, jams existi algo como una Biblia juda. El cuerpo de los textos sagrados judos fue llamado Tanaj. Motivo por el cual, los conceptos de Biblia, as como de Antiguo y Nuevo Testamentos, nunca fueron conceptos judos. Se trata de conceptos de orgen israelita, y no slo judo, que fueron recibidos por cristianos. Hecha la aclaracin, los manuscritos bblicos extensos ms antiguos que incluyen la Versin de los LXX en la parte de sus textos correspondiente al Antiguo Testamento de las Biblias cristianas, son el Cdex Sinaticus y el Cdex Vaticanus, del Siglo IV, y el Cdex Alexandrinus, de la primera mitad del Siglo V. Existen algunas diferencias textuales, de nmero y de orden de los libros, entre estos tres Cdices: El Cdex Sinaticus omite algunos textos, an protocannicos, e incluye I y IV Macabeos. El Cdex Vaticanus omite los cuatro Libros de los Macabeos, e incluye algunas partes y pasajes propios del texto griego conocido del Libro de Enoc. Y el Cdex Alexandrinus incluye los cuatro Libros de los Macabeos, el Libro de las Odas y el Libro de los Salmos de Salomn.[10]

Ediciones impresas

La editio princeps es la Biblia Polglota Complutense basada en manuscritos ahora perdidos, parece transmitir versiones muy antiguas.[12]

La Edicin Aldina, iniciada por Aldo Manucio, apareci en Venecia en 1518. El texto es ms cercano al Codex Vaticanus que al de la Complutense. Ms utilizada ha sido la Edicin Romana, o Sixtina, la cual reproduce el Codex Vaticanus. Fue publicada en 1586, bajo la direccin del Cardenal Caraffa, por orden del papa Sixto V, para apoyar la traduccin de la Vulgata, ordenada por el Concilio de Trento. Ha sido reeditada varias veces. La Edicin de Grabe fue publicada en Oxford, de 1707 a 1720, y se basa en el Codex Alexandrinus, que se encuentra en el Museo Britnico de Londres. La Edicin de Swete, conocida de forma comn y familiar como Biblia de Cambridge, se basa de manera preferente en el Cdex Vaticanus, si bien teniendo en cuenta variantes y porciones retomadas de numerosos Cdices, mayores y menores. Fue impresa y editada por la Universidad de Cambridge, y dada a conocer en tres gruesos volmenes que fueron siendo publicados en los aos de 1887, 1891 y 1894. Algunas reediciones de la misma, aunque no la primera, incluyen ciertas partes y pasajes propios del texto griego conocido del Libro de Enoc, cuya edicin se basa en el Cdex Vaticanus, as como en el Cdex Panopolitanus. La Edicin de Tischendorf, conocida de forma comn y familiar como Biblia de Oxford, se basa en el Cdex Sinaticus. Fue impresa y editada por la Universidad de Oxford, y publicada en el ao de 1922. (Constantino de Tischendorf ya haba publicado, con anterioridad, el Nuevo Testamento del Cdex Sinaticus en 1911.) Alfred Rahlfs, estudioso alemn que dedic varias dcadas de su vida al rescate del texto de la Biblia Septuaginta, en Gttingen, Sajonia, comenz su Edicin en 1917, la cual una vez completa fue publicada en 1935. Se basa de manera preferente en el Cdex Alexandrinus, el ms completo de los tres grandes cdices griegos, si bien incluye algunas series de variantes del Cdex Vaticanus, el Cdex Sinaticus, y algunas otras fuentes, y ofrece notas crticas respecto a las variantes de las distintas fuentes.[13] Se realizaron numerosas ediciones: 1Ed. 1935; 3Ed. 1949; 4Ed. 1950; 5Ed. 1952; 6Ed. 1959; 7Ed. 1962; 8Ed. 1965. The Gttingen Septuagint (Vetus Testamentum Graecum: Auctoritate Academiae Scientiarum Gottingensis editum) es considerada la mejor edicin crtica. Ha sido publicada por Volmenes, entre 1931 y 2006, y aun no est completa. Presenta numerosas variantes de muy distintas fuentes.[14]

En 2006, la Sociedad Bblica Alemana public una revisin de la Edicin de Rahlfs, revisada por Robert Hanhart. Esta editio altera incluye miles de variantes respecto a la edicin original.[15]

Traducciones impresas

En el ao de 1851, Sir Lancelot C.L. Brenton public la primera Traduccin Inglesa de la Biblia Septuaginta Griega. Esta versin se cie al Canon Amplio Oriental, seguido por las Biblias cristianas ortodoxas, que incluye el Salmo 151, la Oracin de Manass,[16] y los Libros III de Esdras, y III y IV de los Macabeos. En el ao 2007, un equipo de estudiosos de la Organizacin Internacional para Estudios de la Septuaginta y Afines public una Nueva Traduccin Inglesa de la Septuaginta. Esta versin incluye, junto a los habituales del Canon Ortodoxo, el Libro de los Salmos de Salomn, y versiones alternas comparadas de textos paralelos de los libros de Josu, los Jueces, Tobas, Daniel, Susana, y Bel y el Dragn. En el ao de 1986, un equipo de estudiosos de La Sorbona de Pars comenz a publicar, por entregas de Tomos y Volmenes, La Bible d'Alexandrie, traduccin al francs de la Biblia LXX. Esta versin francesa no ha sido terminada hasta la fecha. En el mbito hispnico, desde 1928 existe una traduccin literal de la Biblia del griego al espaol, de la cual el Antiguo Testamento transcribe una considerable parte de los textos de la Biblia Septuaginta. Vertida por el P. Guillermo Jnemann, sacerdote catlico de origen alemn que vivi y ejerci hasta su muerte en Concepcin de Chile; misma que solamente ha sido publicada en una ocasin, en el ao de 1992, como una edicin especial dentro del marco de las celebraciones alusivas al V Centenario de la Evangelizacin de Amrica. Esta versin se cie al Canon Amplio Occidental, seguido por las Biblias catlicas romanas, aunque en Versin OG.[17]

Archivos informticos

La Edicin de Swete del Antiguo Testamento Segn los LXX, se encuentra disponible en formato de archivo escanogrfico en el sitio de Christian Classics Ethereal Library. El archivo de texto ms completo de la Edicin de Rahlfs de la Biblia Septuaginta, en griego koin original, ha sido el capturado por un equipo de estudiosos del Centro de Anlisis Computarizado de Textos (CCAT) de la Universidad de Pennsylvania, y est disponible en formato de estudio morfolgico en el sitio del CCAT, y en formato navegable (HTML) en el sitio de Thesaurus Indogermanischer Text und Sprachmaterialien (TITUS), auspiciado por la Universidad Johann Wolfgang Goethe, de Frankfurt del Main, y en Internet Sacred Text Archive (en este ltimo sitio, con opcin a compra en formato propietario). Este archivo contiene las 6 variantes ms notorias del documento histrico, que son dos diferentes versiones de Josu, de los Jueces, de Tobit, de Daniel, de Susana, y de Bel y el Dragn.

La Traduccin Inglesa de Brenton, es posible encontrarla en formato navegable, con opcin a compra en formato propietario, en el sitio de la English Translation of the Greek Septuagint Bible. La Nueva Traduccin Inglesa, es posible encontrarla para ser descargada por partes en formato propietario de archivos PDF en el sitio de la NETS (New English Translation of the Septuagint). As mismo, es posible descargar gratuitamente, en formato propietario, el archivo CCAT sobre el texto de Rahlfs, hasta en 8 distintas opciones de mapeo, particin y acentuacin del mismo (con ciertas omisiones, sin embargo, con respecto del texto del CCAT), desde The Unbound Bible, un proyecto de Biola University, as como el archivo de La Sagrada Biblia de Don Guillermo Jnemann, que ha sido creado por VE Multimedios.

Referencias1. Henri-Charles Puech (Ed.), Las religiones en el mundo mediterrneo y en el Oriente Prximo I: Formacin de las religiones universales y de salvacin, Historia de las Religiones Siglo XXI, Vol. 5, Madrid, 1985 (4 ed.), pg. 180. 2. KELLY, John Norman Davidson; Early Christian Doctrines; Pg. 53; Continuum; Londres, Inglaterra, 1958; ISBN 0-82645-252-3. 3. DE JERUSALN, Escuela Bblica; Biblia de Jerusaln; Pp. varias; notas e introducciones a los textos; Descle de Brouwer; Madrid-Bilbao, Espaa, 1975; ISBN 84-330-0022-5. 4. La Biblia Latina llama Libros I y II de Esdras a los actualmente llamados Libros de Esdras y Nehemas. 5. Un cuarto documento, el Libro IV de Esdras, comnmente asociado a aquellos otros tres, jams constituy parte de los escritos griegos de la Biblia, ni de la Septuaginta. Sin embargo, aparece en mltiples versiones y ediciones no griegas de la Biblia entre las que destacan la Peshitta siraca, la Vulgata latina, y otras Biblias cristianas ortodoxas, e incluso protestantes; y es considerado de manera habitual como parte del Canon seguido por las Biblias cristianas ortodoxas y orientales. 6. El texto hebreo del Libro de Sircides incluye un breve Salmo de Alabanza de unos quince versos en Sircides 51:12a-12p, y unas Doxologas y Subscripciones en Sircides 51:30a-30d. Y algunas ediciones latinas medievales de la Biblia Vulgata agregan a este libro un breve documento de slo trece versos conteniendo un escrito tardo llamado Oracin de Salomn. La Biblia de Jacobo I de Inglaterra agrega a este libro, por su parte, otro curioso texto presentado bajo el nombre de Prlogo de un autor incierto. Ninguno de estos textos forma parte del texto de la Biblia Septuaginta. 7. (De acuerdo al texto griego de ese libro bblico, solamente los dos primeros Salmos nomenclaturados como los Captulos 1 y 2 de dicha coleccin carecen de un Epgrafe, o Nota descriptiva aclaratoria sobre su contenido y circunstancias.) 8. (Siglas de la expresin inglesa Old Greek, que hace referencia al texto griego antiguo, por contraposicin a otras versiones griegas tardas o posteriores.)

9. THIEDE, Carsten Peter; The Dead Sea Scrolls and the Jewish Origins of Christianity; Acpite A Greek surprise, pp. 124-130; Lion Publishing, Oxford, 2000; ISBN 978-970-777-245-8. 10. a b c Cousin Hugues (1992) La Biblia Griega: Los Setenta. Estella: Verbo Divino. 11. Dines, Jennifer (2004) The Septuagint, Michael A. Knibb, Ed., London: T&T Clark. 12. Joseph Ziegler, Der griechische Dodekepropheton-Text der Complutenser Polyglotte, Biblica 25:297-310, cited in Wrthwein. 13. Rahlfs, Alfred, (Ed.), (1935-1979), Septuaginta, Stuttgart: Deutsche Bibelgesellschaft. 14. IOSCS: Critical Editions of Septuagint/Old Greek Texts 15. German Bible Society 16. (Captulo extrado del Libro de las Odas, y, en esta traduccin, en ausencia del resto de este documento, agregado al final del Libro de los Salmos de David.) 17. (Siglas de la expresin inglesa Old Greek, que hace referencia al texto griego antiguo, por contraposicin a otras versiones griegas tardas o posteriores.)

[editar] Enlaces externosEnlaces formativos en ingls

The Septuagint Online (Introduction) (Sitio en ingls) The Septuagint Online (Texts & Translations) (Sitio en ingls)

Enlaces formativos en espaol

Primicia mundial desde Amrica Latina La Septuaginta: til en el pasado y en el presente

Edicin en griego de Henry Barclay Swete

Christian Classics Ethereal Library (Sitio en ingls)

Edicin en griego de Alfred Rahlfs

Centro de Anlisis Computarizado de Textos de la Universidad de Pennsylvania (Sitio en ingls) Septuaginta - Qu es? La septuaginta ( a veces abreviada LXX) es el nombre dado a la traduccin griega de las Escrituras judas. . La Septuaginta tuvo su origen en Alejandra, Egipto y fue traducida entre el 300 y el 200 AC. Usada ampliamente por los judos helensticos, estas traduccin griega se produjo pues muchos judos dispersados por el imperio comenzaron a perder su idioma hebreo. El proceso de traduccin del hebreo al griego le permiti a muchas personas

no judas echar una ojeada al judasmo. De acuerdo a un documento antiguo llamado La Carta de Aristeas, se cree que entre 70 q 72 estudiosos judos fueron comisionados durante el reino de Ptolomeo Philadelphus para llevar a cabo esta traduccin. El trmino Septuaginta significa setenta en latn, y se le llam as al texto para darle crdito a estos 70 estudiosos.

Septuaginta Influencia en el Cristianismo La Septuaginta fue tambin un recurso del Antiguo Testamento para los cristianos de los primeros siglos despus de Cristo. Muchos cristianos primitivos hablaban y escriban griego, por tanto se dejaban llevar por la Septuaginta para la mayor parte de su entendimiento del Antiguo Testamento. El Nuevo Testamento tambin fue influenciado por la Septuaginta ya que la mayor parte de las citas del Antiguo Testamento en el Nuevo Testamento son citas directas de la Septuaginta (tambin hay citas de los textos hebreos. Los padres griegos de la iglesia cristiana tambin son conocidos por citar la Septuaginta. Hoy da, la Iglesia Ortodoxa Oriental tambin basa sus enseazas del Antiguo Testamento en la Septuaginta. Algunas traducciones modernas de la Biblia tambin usan la Septuaginta junto a textos hebreos como su recurso.

Septuaginta - Qu contiene? La Septuaginta contiene los 39 libros del cann del Antiguo Testamento as como algunos libros apcrifos. El trmino Apcrifa fue acuado por el estudioso de la Biblia del siglo quinto, Jerome, y generalmente se refiere a un grupo de antiguas escrituras judas escritas durante el perodo del ltimo libro de las Escrituras Judas, Malaquas, y la llegada de Jess Cristo. Los libros apcrifos incluyen a Judith, Tobit, Baruc, Sirac (o Eclesistico), la Sabidura de Salomn, 1 y 2 de Macabeos, los dos libros de Esdras, anejos al libro de Ester, anejos al libro de Daniel, y la Oracin de Manases. Los libros apcrifos fueron incluidos en la septuaginta por motivos histricos y culturales pero no han sido reconocidos como canniocos (inspirados por Dios) por los judos ortodoxos o los cristianos protestantes. Muchos maestros de la reforma hacen notar que los escritores del Nuevo Testamento nunca citan los libros Apcrifos y que la Apcrifa nunca fue considerada parte de la escritura cannica juda. Sin embargo, los Catlicos Romanos y las iglesias Ortodoxas incluyen la Apcrifa en su Biblia (con la excepcin de los libros de Esdras y la Oracin de Manases)

La Septuaginta

til en el pasado y en el presente UN ETOPE influyente regresaba a su hogar desde Jerusaln. Mientras viajaba en su carruaje por un camino del desierto, lea en voz alta un escrito religioso. La explicacin de las palabras que ley le produjo tal impresin, que le cambi por completo la vida (Hechos 8:26-38). El pasaje en cuestin era el de Isaas 53:7, 8, tomado de la primera traduccin de la Biblia: la Septuaginta griega, o Versin de los Setenta. Esta obra ha desempeado un papel tan importante en la difusin del mensaje bblico en el transcurso de los siglos, que se ha dicho que fue una traduccin de la Biblia que cambi al mundo. Cundo se realiz y en medio de qu circunstancias? Por qu exista la necesidad de una traduccin as? De cunta utilidad ha sido desde su aparicin? Qu podemos aprender de la Septuaginta hoy?

El discpulo Felipe explic un pasaje que se ley de la Septuaginta

Concebida para los judos de habla griega

Tras destruir la ciudad fenicia de Tiro en el ao 332 a.E.C., Alejandro Magno invadi Egipto, donde se le recibi como a un libertador. En este pas fund la ciudad de Alejandra, que se convirti en un centro cultural del mundo antiguo. Deseoso de que los pueblos que habitaban las tierras conquistadas adoptaran la cultura helnica, Alejandro introdujo el griego comn (koin) en sus vastos dominios. Durante el siglo III a.E.C., Alejandra alberg a una gran comunidad de judos, entre ellos muchos inmigrantes que tras el destierro en Babilonia haban vivido en colonias dispersas fuera de Palestina. Hasta qu grado conocan estos judos el hebreo? La Cyclopedia de McClintock y Strong contesta: Es bien sabido que despus de que los judos regresaron del cautiverio en Babilonia, habiendo perdido en gran medida el conocimiento del hebreo antiguo, las lecturas que se realizaban de los libros de Moiss en las sinagogas de Palestina se les explicaban en caldeo [...]. Los judos de Alejandra posean probablemente an menos conocimiento del hebreo; el idioma que dominaban era el griego alejandrino. Todo indica que en aquella ciudad se reunan las circunstancias ideales para traducir al griego las Escrituras Hebreas. Aristbulo, judo que vivi en el siglo II antes de la era comn, dej escrito que durante el reinado de Ptolomeo II Filadelfo (285-246 a.E.C.) se tradujo la ley hebrea al griego. Existen varias interpretaciones de lo que quiso decir con la palabra ley. Hay quienes creen que se refera solo al Pentateuco; en cambio, otros opinan que tal vez aludiera a la totalidad de las Escrituras Hebreas. De todos modos, segn la tradicin, hubo 72 eruditos judos que participaron en la primera traduccin de las Escrituras del hebreo al griego. Posteriormente empez a usarse la cifra redonda de 70; de ah que la versin llegara a llamarse la Septuaginta, que significa setenta, y que se le designe LXX, en nmeros romanos. A fines del siglo II a.E.C. ya podan leerse en griego todos los libros de las Escrituras Hebreas, por lo que el trmino Septuaginta pas a denominar a todas las Escrituras Hebreas traducidas al griego.

til en el siglo primeroTanto los judos de habla griega anteriores a Jesucristo y sus

apstoles como sus contemporneos emplearon mucho la Septuaginta. Gran parte de los judos y proslitos que se congregaron en Jerusaln en el Pentecosts del ao 33 E.C. provenan de Egipto, Libia, Roma, Creta y el distrito de Asia, regiones en las que se hablaba griego. Seguramente lean esta versin (Hechos 2:9-11). Podemos decir, pues, que sirvi para difundir las buenas nuevas en el siglo primero. Por ejemplo, al dirigirse a hombres de Cirene, Alejandra, Cilicia y Asia, el discpulo Esteban dijo: Jos envi y mand llamar a Jacob su padre y a todos sus parientes de aquel lugar [Canan], en nmero de setenta y cinco almas (Hechos 6:810; 7:12-14). El texto hebreo del captulo 46 de Gnesis seala que el nmero de parientes de Jos era de 70; pero la Septuaginta dice que eran 75, de lo que se desprende que Esteban cit de esta ltima (Gnesis 46:20, 26, 27, nota). Mientras el apstol Pablo recorra Asia Menor y Grecia en sus viajes misionales segundo y tercero, predic a un sinfn de gentiles que tenan temor piadoso y a griegos que adoraban a Dios (Hechos 13:16, 26; 17:4). Estas personas de habla griega haban llegado a temer al Creador o a adorarlo porque haban adquirido cierto conocimiento de l en la Septuaginta, de donde Pablo cit o parafrase algunos pasajes al darles testimonio (Gnesis 22:18, nota; Glatas 3:8). En las Escrituras Griegas Cristianas hay unas trescientas veinte citas directas de las Escrituras Hebreas y un total aproximado de ochocientas noventa citas y referencias, la mayora de ellas basadas en la Septuaginta.Como consecuencia, fueron las palabras que se extrajeron de esta traduccin, y no las de los manuscritos hebreos, las que se convirtieron en parte de las Escrituras Griegas Cristianas. Este hecho fue sumamente significativo. Jess haba predicho que las buenas nuevas del Reino se predicaran en toda la Tierra habitada (Mateo 24:14). Para lograrlo, Jehov iba a permitir que su Palabra inspirada se tradujese a los mltiples idiomas que se hablaban en el mundo.

El apstol Pablo cit con frecuencia de la Septuaginta

til en nuestros dasEl valor de la Septuaginta todava perdura, pues es til para descubrir errores de los copistas que se han introducido inadvertidamente en los manuscritos hebreos ms recientes. Tomemos por caso el relato de Gnesis 4:8, que dice as: Despus de eso, Can dijo a Abel su hermano: [Vamos all al campo.] De modo que aconteci que, mientras estaban en el campo, Can procedi a atacar a Abel su hermano y a matarlo. Las palabras encerradas entre corchetes Vamos all al campo no aparecen en los manuscritos hebreos que datan del siglo X E.C., pero s en manuscritos anteriores de la Septuaginta y en otros documentos ms antiguos. En el texto hebreo aparece la palabra que suele introducir el parlamento; sin embargo, no hay nada que le siga. Qu pudo haber sucedido? En vista de que Gnesis 4:8 contiene dos oraciones consecutivas que concluyen con la expresin en el (o al) campo, la Cyclopedia de McClintock y Strong da la siguiente hiptesis: El transcriptor hebreo probablemente se vio inducido a error por el hecho de que la [misma] palabra [...] finaliza ambas oraciones. Tal vez por ello pas por alto la primera oracin en la que aparece la expresin Vamos all al campo. Est claro, pues, que la Septuaginta y otros manuscritos anteriores existentes son de utilidad para hallar incorrecciones en las copias ms recientes del texto hebreo. Por otra parte, los ejemplares de la Septuaginta tambin tienen inexactitudes, y a veces el texto hebreo ayuda a corregir el griego. De modo que la labor de comparar los manuscritos

hebreos con los griegos y con versiones a otros idiomas ayuda a descubrir errores cometidos por los traductores y los copistas, lo que nos proporciona una reproduccin exacta de la Palabra de Dios. Hoy disponemos de algunos ejemplares completos de la Septuaginta que datan del siglo IV de la era comn. Tales manuscritos, as como otros ms recientes, no contienen el nombre divino, Jehov, representado en hebreo con el Tetragrmaton ( YHWH), sino que lo sustituyen por las palabras griegas para Dios y Seor cada vez que este aparece en el texto hebreo. No obstante, un descubrimiento realizado en Palestina hace unos cincuenta aos arroj luz sobre el asunto. Un equipo de arquelogos que exploraba las cuevas cerca de la ribera occidental del mar Muerto descubri fragmentos de un antiguo rollo de piel que reuna los escritos de los doce profetas (desde Oseas hasta Malaquas) en griego, fechado entre los aos 50 a.E.C. y 50 E.C. En estos fragmentos anteriores no se haba reemplazado el Tetragrmaton por las palabras griegas para Dios y Seor, lo que confirm la utilizacin del nombre divino en la versin original de la Septuaginta. El ao 1971 fue testigo de la publicacin de los fragmentos de un antiguo rollo de papiro (papiros Fuad 266). Qu revelaron estas partes de la Septuaginta,que datan del siglo II o I a.E.C.? Que tambin conservaban el nombre divino. Estos primitivos fragmentos de la Septuaginta constituyen una prueba contundente de que Jess y sus discpulos del siglo primero conocan y usaban el nombre de Dios. La Biblia es el libro ms traducido de la historia. Ms del noventa por ciento de la poblacin mundial puede leer al menos parte de ella en su propio idioma. Nosotros estamos especialmente agradecidos por contar con una traduccin exacta en lenguaje actual la Traduccin del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras , que est disponible en su totalidad o en parte en ms de cuarenta idiomas. La Traduccin del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras (con referencias) contiene centenares de remisiones a pie de pgina a la Septuaginta y a otros manuscritos antiguos. Verdaderamente, la Septuaginta sigue siendo de valor e inters para los estudiantes de la Biblia de nuestros das.

La Biblia de los Setenta (LXX), tambin conocida como Septuaginta, o Alejandrina, es una traduccin de la Biblia hebrea (el Antiguo Testamento, o Tanaj) al griego. Es la principal versin en idioma griego por su antigedad y autoridad. Su redaccin se inici en el siglo III adC (c. 250 adC) y se concluy a finales del siglo II adC (c. 150 adC). En la Septuaginta se ampli el numero de libros con textos recibidos del judasmo palestino. Libros escritos en griego como la Sabidura, Jeremas, Daniel, y adiciones al de Esther. La traduccin de los Setenta incluye los siguientes libros, escritos originalmente en griego, que la biblia Hebraica no tena: Judit (preservada en la biblia latina) Tobit (preservado en biblia latina pero reescrito por Jernimo) Libros primero y segundo de los Macabeos Sabidura de Salomn (preservada en la biblia latina) Sabidura de Ben Sirach (Siracida o Eclesistico) (preservado en la biblia latina) Baruch (preservado en la biblia latina) Carta de Jeremias (preservada en la biblia latina) Susana (Daniel 13) (preservada en la biblia latina) Belial y el dragn (Daniel 14) (preservado en la biblia latina) Primer libro de Esdras (preservado en la biblia latina como tercer libro de Esdras) Tercer y cuarto libro de los Macabeos (no preservado en la biblia latina) Salmos de Salomn (no preservado en la biblia latina)

Texto masorticoDe Wikipedia, la enciclopedia libre Saltar a navegacin, bsqueda

El texto masortico es la versin hebraica de la Biblia oficialmente usada entre los hebreos. Es usada frecuentemente como base para las traducciones del Antiguo Testamento por parte de los cristianos. Fue compuesta, editada y difundida por un grupo de hebreos conocido como masoretas entre el siglo I y el X d. C. Contiene variantes, algunas significativas, con la versin griega llamada Septuaginta. La palabra hebrea mesorah ( )se refiere a la transmisin de una tradicin. De hecho, en sentido amplio, se refiere a toda la cadena de la tradicin hebrea. Pero en el mbito del texto masortico la palabra asume un significado especfico, relacionado con notas marginales en los manuscritos (y ms tarde impresos) de la Biblia Hebraica en las que hay particularidades del texto, relacionadas sobre todo con la pronunciacin exacta de la palabra. Los ms antiguos manuscritos completos del texto masortico vienen del siglo IX d. C., pero existen fragmentos ms antiguos que parecen pertenecer a la misma familia textual. Por ejemplo, entre los manuscritos del Mar Muerto, los fragmentos encontrados en otros puntos del desierto de Judea y el texto masortico, algunas de estas difieren en una letra cada 1000. En cambio otros fragmentos tienen diferencias mucho ms acusadas.

EtimologaEl trmino hebreo masorah (tradicin) aparece en diversas formas. Tiene su origen en el libro bblico de Ezequiel 20, 37 con el significado original de cadena. La inmutabilidad del texto era una caracterstica propia, que lo encadenaba o lo ligaba al contexto. Cuando, en el curso del tiempo, la Masorah se volvi una disciplina tradicional, el trmino comenz a significar entregar y asumi el significado de tradicin.

Lengua y formaEl lenguaje del texto masortico es en parte hebraico y en parte arameo palestino. Las anotaciones masorticas se han encontrado con diversas formas:1. en trabajos diversos (por ejemplo Oklah we-Oklah) 2. en la forma de notas escritas en los mrgenes y al final de los cdices. En algunos casos las notas estn escritas entre lneas. La primera

palabra de cada libro bblico est tambin, por lo general, rodeado de notas. Estas ltimas se llaman masorah inicial; las notas en los mrgenes a un lado o entre columnas son llamadas masorah pequea o interna; las de los mrgenes de abajo o arriba masorah grande o externa. El nombre gran masorah se aplica algunas veces a las notas lexicales que se colocan al final de la Biblia impresa, llamada masorah final.

La masorah pequea consiste en breves notas con referencias a lecturas marginales, a estadsticas que indican el nmero de veces en que una forma particular se encuentra en las Escrituras, a una pronunciacin precisa o errada y a letras escritas de manera anmala. La masorah grande es ms abundante en notas. La final comprende todas las rbricas ms largas para las que los espacios no podran encontrarse en el margen y estn puestas en orden alfabtico en la forma de una concordancia. La cantidad de notas que contiene la masorah final est condicionada por la cantidad de espacios vacos en cada pgina. En los manuscritos esto vara tambin con el salario que se daba a quien copiaba.

OrigenEl Talmud y algunos manuscritos de los caratas afirman que una copia de referencia de la Biblia hebraica se conservaba en el Templo de Jerusaln para ser usada por los copistas; existan adems correctores pagados de los libros bblicos entre los empleados del templo.[1] Esta copia es mencionada tambin en la Carta a Aristeas nm. 30;[2] en las afirmaciones de Filn (prembulo de su anlisis de la constitucin poltica de los hebreos) y en Flavio Josefo, Contra Apionem I, 8. Otra historia talmdica, quizs en referencia a tiempos antiguos, cuenta que tres rollos de la Tor fueron encontrados en el Templo pero que eran distintos. La cuestin fue resuelta con una decisin por parte de una mayora por una de las tres versiones.[3]

Masorah numricaEn la antigedad clsica los escribas eran pagados por su trabajo segn el nmero de textos copiados. Los libros de la Biblia, en prosa, se prestaban mal a ello, y los escribas comenzaron a contar las letras. A partir de este uso se desarroll con el tiempo la masorah numrica, que cuenta y reagrupa los elementos del texto. La recoleccin de manuscritos y la importancia de sus diferencias ha dado material para la Masorah crtica. La relacin estrecha que exista (desde los Soferim hasta los Amoraim) entre el maestro de la tradicin y el masoreta -que muchas veces eran la misma persona- explica la masorah exegtica. Finalmente el desarrollo de un sistema grfico de acentuacin y vocalizacin ha dado pie al nacimiento de la masorah gramatical.

Fijacin del texto

La subdivisin en palabras, libros, secciones, pargrafos, versculos y captulos (citados probablemente en orden cronolgico); la definicin de la ortografa, pronunciacin y musicalidad; la introduccin o la definitiva adopcin de caracteres cuadrados y las cinco finales; algunos retoques textuales para protegerse contra la blasfemia; la enumeracin de letras, palabras, versculos, etc. y la sustitucin de algunas palabras en las lecturas pblicas fueron las primeras realizaciones de los masoretas. Como no se poda ni pensar en modificar el texto original de la Biblia, los primeros maso